En el amor no existen limites. (Bruno Mars)

Capítulo 14

Todos estábamos esperando la respuesta de Michelle...

-Estoy sorprendida, no me lo esperaba, amor. Por supuesto que quiero pasar mi vida junto a ti.- Michelle no paraba de llorar, para celebrar el si juntaron sus labios haciendo un beso llenó de amor y sinceridad.

-Felicidades hermano y cuñada, que sean muy felices.-les dije abrazandolos.

-Mientras mas pronto sea la boda, mejor. Porque ya quiero vivir con el amor de mi vida.-dijo Will besando la frente de Michelle.- pero bueno por lo pronto ya aceptó.
Todos estábamos celebrando, bueno a excepción de mis padres, mi madre se veía un poco contenta, pero el enojo de mis padres se notaba demasiado, sabía que a mi hermano no le iría bien al llegar a la casa. Espero y cumpla con lo que le dije, osea, no tomar en cuenta las palabras de mi padre.

La cena acabo, todos se dirigian a sus respectivas casas. En el auto iban discutiendo por lo que me puse los audífonos, si algo escuche fue que si mi hermano se casaba mis padres ya no le pagarían la carrera, pero mi hermano dijo que el solo se la podía pagar y que si podía se iba de la casa para no molestarlos. Ya no escuche nada, pues subí el volumen de mi musica.Mi celular vibró, era un mensaje de Bruno. -Mensaje-
Bruno: ¿Como ha estado tu día?,preciosa.

Nat: Pues bien en lo que cabe y el tuyo.

Bruno: Pues ahí va. Oye, mañana Domingo descanso, ¿Quieres salir a algún lado?

Nat: ¿A donde me llevarías?

Bruno: Donde mi princesa guste. Al cine, la plaza, cualquier lugar.

Nat: Te acepto al cine porque quisiera ir a un bar pero necesito cumplir los 18 y todavía me falta un mes :(.

Bruno: Perfecto. Paso por ti a las 4pm.

Nat: Cerca de mi casa, donde me dejaste la primera vez.

Bruno: Bueno, ¿Que haces?

Nat: Acabo de llegar a mi casa. Y ¿Tu?. Te extrañe esta semana :(.

Bruno: ¿Dónde andabas?, pues estoy descansado, ya acabe algo del papeleo, tal vez vaya a Hawaii por negocios, pero no tardaría. Mañana te recompenso el tiempo que no nos vimos, pequeña.

Nat: En una cena familiar. Que bien. Yo jamás eh viajado a Hawaii, llévame.

Bruno: Te llevaría si pudiera, pero es del trabajo.

Nat: Bueno, entonces no :(.

Bruno: Lo voy a checar, princesa.

Nat: Bueno me iré a dormir, te quiero :).

Bruno: Descansa, también te quiero :).

-Fin del mensaje.-

Sus mensajes me alegraban el día, pues sabía que se acordaba de mi y me sentía querida. Ya estaba cansada, decidí darme una ducha, salí de ella, me puse una pijama y quede profundamente dormida.

Me desperté, ya había amanecido, fui de las últimas en bajar, todos en el desayuno estaban callados, ni siquiera mi mamá me había servido así que agarre los waffles junto con un jugo de naranja.

-Buenos días.-dije

-Buenos días, hermanita.- genial, la única que me había recibido bien fue Rose,lo que es inocencia aun y no saber nada del problema.

-Me voy a trabajar.- dijo mi padre sin despedirse.

-Arreglate Nat, iremos a las terapias de Rose.- claro estaba que le harían la ley del hielo a mi hermano.

-Me voy a quedar aquí, es que terminaré una tarea e iré al cine con un amigo al rato. Lo siento mamá.

-Esta bien. Nos vemos al rato.-dijo saliendo de la casa con Rose. Las terapias que tenía Rose eran con la nutriologa pues mi hermana nació muy pequeña y delgada que siempre tiene que ir a las terapias de nutrición y a hacer ejercicio.

-Con permiso, hermana.-dijo Will subiendo las escaleras.

-Hey... ¿No me contaras lo que pasó?

-Pues mis padres no están dispuestos a aceptar, así que me voy a ir al departamento que tengo, que esta a mi nombre y es pagado por mi así mi padre no me lo quitara.

-Lo van a aceptar tal vez no en este momento pero no harán... Pero ¿como que tienes un departamento?

-Si,ahí me la pasaba cuando no llegaba jaja, estaba con Michelle.

-Bueno hermano, suerte y ¿Te ayudo con las maletas?

-Claro

-Pero cargarme de caballito hasta tu cuarto.

-Esta bien, vamos.-me subí hasta su cuarto y empezamos con toda su ropa, todavía era temprano por eso no me arreglaba. Nos la pasábamos bromeando y a veces me gustaba una que otra camisa de mi hermano y se las pedía, me decía que si porque algunas camisas eran de cosas que me gustaban o algunos eran jerseys de equipos de béisbol que amaba o camisas de fútbol y basquet, compartiamos gustos hasta de súper héroes. Me fui con mucha ropa que tal vez utilizarla pronto.

-Entonces, ¿Ya no nos veremos?.- mi tono de voz se estaba rompiendo.
-Te pasaré la dirección para que me visites, enana. Te extrañaré. Te despides de Rose de mi parte y pues si se puede de mis padres. - lo abrace, a pesar del humor que tenía mi hermano, éramos como almas gemelas y lo amaba mucho.

-Te amo, espero la invitación a tu boda.

-Tal vez pase por ti un día de estos al colegio.Bye.- cargo sus maletas y las subió al carro. Solo veía como encendía el motor del auto y arrancaba. Estaba triste pero feliz a la vez, porque mi hermano iba a hacer lo que quería, iba a vivir su vida con su pareja que tanto ama y eso era lo mejor...