Capítulo 12: En la soledad

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Otro día más... en la cabeza Miles de pensamientos, palabras, recuerdos y lágrimas en los ojos...

Habia que por obligación respirar hondo.

Secar las lágrimas era imposible, que más da si solo salen como si le hubieran abierto un grifo.

Para una persona que siempre estuvo acompañada y con amistades al lado es difícil estar sola...

Soledad, para mi un tormento... Mientras que para otros significa libertad para mi es el más cruel tormento, donde me encuentro conmigo misma, pensando en todo, con una amplia visualización de lo que es la vida y como a transcurrido la mia...

Todos me conocen por ser super sociable, la que siempre tiene una sonrisa. Claro nunca he dejado de ser positiva, pero en la soledad... Cuando nadie está es difícil mantener esa sonrisa en el rostro.

Es frío, oscuro, triste... Un tormento total, mi soledad...

Puedo poner una sonrisa falsa, puedo mantenerme al ritmo de la gente, puedo reir, puedo ser la mejor amiga, puedo ser todo... Puedo, porque puedo...pero solo soy humana...porque sangro si me caigo...y duele en el alma cada cosa..

Pensamientos en mi cabeza son como cuchillos al corazón...

Se me clavan adentro dejándome sin aliento y con dolor en el pecho.

Siempre me pregunto como es que puedo seguir viviendo así.

Han sido tantos los momentos en que he intentado irme pero no tengo la valentía solo rompo en llanto y no puedo hacerlo.

Es desesperante...

Tomé una hoja de papel y comencé a escribir...

Aqui me encuentro una vez mas, caminando por la ruta de la vida, dolida por los acontecimientos pasados, los cuales se transforman como una gran nube negra, nublado mi cielo azul, desatando una gran tempestad, que me asota, que me mueve de lado a lado. Hace frio, no tengo abrigo, estoy sola, y no tengo donde refugiarme, trato de correr, pero la debilidad llega a mi ser, comienzo a llorar, y a decaer en el suelo... Trato de continuar pero cada vez caigo en más ocasiones y en cada una de ellas hay una herida nueva y viejas heridas son abiertas por los impactos... Caigo y ya no me puedo levantar, llevo mis piernas a mi frente, dejando reposar mi cabeza en ellas, y las abrazo fuerte, tratando de calmarme pero las lágrimas siguen cayendo, siento como cae la lluvia sobre mi, cada gota es como ácido a mis heridas, duele, lástima, comienzo a llorar con más intensidad, mientras el frío hace doler hasta lo más profundo de mis huesos. Grito con fuerza pero nadie me escucha, grito tan fuerte que mi garganta arde. Pero no tengo un remedio... Trato de hallar un rayo de luz, pero mis ojos están segados por las lágrimas que causa mi dolor y entonces ¿Como poder continuar?...

Así me sentia...en medio de una tormenta imposible de atravesar.

¿Pero como poder superarlo?

Ser olvidado por quien se supone que te proteja... ¿Donde estas papá?

Ser traicionado por aquellos que se hacían llamar amigos... ¿Donde quedó la lealtad?

Ser lastimado físicamente y mentalmente por quien hacías llamar familia de crianza... ¿Porque solo buscan saciar los placeres?

Ser rechazado por aquellos que siempre dijeron estar ahí... Solo porque cometiste un error... ¿Porque no podemos aprender a perdonar?

Amar a alguien con tu vida, entregarlo todo por una persona que solo te preguntas ¿Hara lo mismo por mi? ¿Te amara igual?... pero la distancia y el tiempo te han demostrado que probablemente no lo haga...

Como poder vivir ocultando tanto dolor y no poder hablarlo, no poder sacarlo de ti.

Como espinas en el corazón, que cuando estás en la más densa y oscura soledad te lastiman porque están ahí...lo llevas dentro, no hay con que distraerte, solo estás tú...

Es un panorama horrible solo quieres salir corriendo de allí...

Me costó salir de allí, me costó tanto aprender a dejar el pasado atras, me dolio... Pero me levanté de en medio de aquella tormenta y seguí caminando, aún no he llegado a la meta pero sigo de pie...

¿Y que hice?

Salmos 55:22 Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará;
No dejará para siempre caído al justo.

Entregué a Dios mi dolor, entonces el comenzó a limpiar mi interior, y comencé a perdonar... Olvidar... Y recuperarme.

Ese rayo de luz que mis ojos llenos de lágrimas no podían ver llegó a mi en el momento menos esperado...

He pasado dolor, travesías que nose cuántos podrían aguantar... Pero con la ayuda del Dios he podido permanecer.

Siempre está ahí y soy testigo... En el momento menos esperado siempre me sorprende. Siempre contesta en el momento justo.

He sabido estar en lugares cotidianos como lo es el supermercado o tal vez alguna tienda de ropa y gente que ni me conoce y jamás en mi vida había visto comienzan a hablarme diciendo "así te dice el señor"...es INCREÍBLE...

Es un trato especial que también puedes tener tu si decides poner tus cargas sobre el. Para que el sea ese rayo de luz en medio de tu tormenta, y en tu soledad sea el quien te acompañe.

Ahora mi soledad la dedico hablar con el, a escribir, a componer canciones para exaltar a Dios.

Y más que todo saque de mi todo lo que me atormentaba.

De mi corazón al papel

Att. Khatleen Smith

PD: Saludos a todos los lectores, me he tardado en actualizar he estado ocupada pero la palabra de bendición no va a faltar, seguiré actualizando en cada oportunidad que tenga.

Les propongo algo, quiero que comenten si quieren que trabaje algún tema en específico, algo de lo que quieran ayuda, también pueden enviar un mensaje si no lo quieren hacer publicamente. Estaré dispuesta ayudarles en todo lo que pueda.

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