Si, Te Deseo | Ristopher Oreo CNCO

Capitulo 7

      Con cualquiera, Christopher ese momento quería cambiar de cuerpo con cualquiera persona en el mundo pero no quería estar ahí. Ahora no solo debía fingir desinterés frente a Richard si no que también ahora tenía que explicar porque tenía un lubricante en su habitación.

— ¿Porque...—Richard intentó hablar.

— Es que tengo necesidades. — Respondió rápidamente el castaño. "Vamos Chris inventa algo creíble" se decía a sí mismo.

—¿Qué? — Dijo Erick.

— Ya saben... — Ambos chicos lo miraron divertidos, Erick se divertía con la incomodidad de su amigo y Richard infló su pecho al ver que Chris quería estar con el — me sirve para cuando me toco.

Todo se quedo en silencio, Erick tenía un rostro serio, pero no duro ni 10 segundos así antes de estallar en risas por una respuesta tan tonta y no fue el único, Richard se rió junto a Erick de Chris.

— Si, claro.— dijo Erick calmando su risa.— Me voy, solo venía a recoger mis audífonos.

Tomó los audífonos de la mesa de Chris y salió con una sonrisa pícara en su rostro.

Uno menos, ahora podía o no explicar porque tenía el lubricante a Richard. Tampoco le debía explicar nada a Richard, ni que fuera su novio.

— ¿Para tocarte? — habló por fin Richard caminando a donde Erick había dejado el lubricante, lo tomó y sonrió al verlo.— ¿De verdad dijiste eso?

— Es la verdad.

— No, no lo es. — Sonrió de lado Richard. Si antes ya se sentía orgulloso de sí mismo ahora su ego estaba en el cielo.

— ¡Quita esa sonrisa de tu cara! — Habló  serio Chris. — No lo compré para usarlo contigo.

Richard rió.

Christopher se molestó, ya se sentía avergonzado como para oír como Richard se burlaba de el.

— Te odio.— y Chris se fue al baño ofendido. Chris enojado es difícil de imaginar pero cuando se molesta no hay algo que sirva para quitar ese enojo.

••••

Al momento de irse a dormir no pasó nada, Chris no quería hablar con Richard y como el orgullo de Richard podía más, él tampoco le habló. Ese era un defecto en Richard, tendía a ser orgulloso con Chris, pero solo con el.

Al día siguiente las cosas no cambiaron, ninguno de los dos se saludo, solo bajaron a desayunar. Chris solo esperaba que Erick olvidara todo (lo que es imposible) o que por lo menos no lo divulgará, pero estamos hablando de Erick.

— ¿Y qué pasó anoche? — preguntó el cubano tomando un vaso para servirse jugo.

— Nada. ¿Debía pasar algo?— dijo Chris.

— Zabdiel me dijo que tal vez vendrías a dormir a mi habitación. Pero nunca viniste.

Todos miraron a Zabdiel que acababa de llegar apenas Erick termino de hablar.