Si, Te Deseo | Ristopher Oreo CNCO

Capítulo 56

Christopher Velez

Saber que Richard se encontraba bien me mantenía en calma lo suficiente como para no romper en llanto cada 10 minutos. Tampoco he sido de llorar mucho pero si alguien que quiero se encuentra en peligro es inevitable que lo haga.

Los demás ya se habían ido a casa hace mucho después de estar en la sala de espera con Alex una de las enfermeras nos llevó a la habitación donde está Richard y en el camino Alex explicaba a una enfermera que me quedaría con Richard. Cuando llegamos me quede frente a la puerta de su habitación, giré la manija y abrí la puerta.

La habitación tenía las luces apagadas, frente a mi vi un gran ventanal de donde entraba la luz de la luna. Había una sola camilla en la habitación y sobre ella estaba Richard, reconocí sus facciones y me acerqué lentamente. Vi su brazo cubierto por el yeso sobre la sabana, tenía un suero en el otro brazo y como el doctor dijo estaba dormido. Verlo herido me lastimo, mordí mi labio inferior para evitar soltar algún ruido que lo levantara y sentí que mi respiración se hacía difícil. Tenía ganas de llorar.

Al llegar al lado suyo me enfoqué en el brazo con el yeso y toque suave con la yema de los dedos. No podría bailar en unos meses, eso lo lastimaría mucho. Pensé en que si me hubiera quedado con el cuando el lo pidió esto no hubiera pasado. Podía no haber salido con Sebastián y estar con el, evitar que sacaran fotos y esa llamada no hubiera existido.

Sus ojos cerrados y su respiración regular calmó mis ganas de llorar, pero aún me sentía culpable.

—Chris...—escuché a Alex detrás mío, giré y estaba en la puerta.—Hable con la enfermera, te puedes quedar aquí con el, si llega a despertar llama a una de ellas. ¿De acuerdo?

—Si.— asentí.

—Descansa en el sofá.—me señaló un pequeño sofá en la habitación.— El estará dormido un buen rato, mañana hablarán.

—Lo haré.—me giré a Richard otra vez.—puedes ir al auto Alex, estaremos bien.—conteste con tono bajo.

—Estaré aqui temprano en la mañana, descansa.—respondió y cerró la puerta de la habitación.

No tenía pensado dormir por ahora, así que me quedé de pie al lado de Richard en silencio. Pose mi mano sobre su mejilla, le acaricie con el pulgar y sentí su barba contra mi piel, la tenía un poco fría. Tome otra sabana del pequeño closed detrás mío y lo cubrí.

—¿Tienes frío?—susurre bajo, sabía que no respondería pero quería sentirme acompañado—. Puedo abrazarte pero... no quiero lastimarte—no quería despertarlo pero tampoco quería que estuviera con frío.

O quizá solo era una excusa mía para no alejarme de él...

Busque un espacio en la cama donde no molestaría, se senté en el borde cerca del hombro de Richard y me apoye contra el espaldar. Vi como Richard giraba su rostro hacia donde estaba yo pero aún seguía completamente dormido.

—Te amo.—incliné mi rostro hacia el de Richard y deje un suave beso en su frente. Esta sería una noche larga.

•••

Al día siguiente una enfermera entró en la habitación y encontró a Richard aún descansando y su acompañante durmiendo en el sofá. Se acercó al suero de Richard, lo reviso y minutos después volvió a salir. Chris escuchó la puerta cerrarse y se levantó, se frotó los ojos y miró a Richard dormido. Sacó su teléfono celular y le mando un mensaje a Alex que contándole que todo estaba bien y a sus compañeros que Richard aún no había despertado.