Si, Te Deseo | Ristopher Oreo CNCO

Capítulo 22

Y así dejó Richard caer ese escudo que le impedía decir lo que verdaderamente sentía, el moreno había soltado todo y ahora lo que más temía era recibir una respuesta negativa por parte de Christopher, porque después de todo él sabía que curar las heridas que causó en Christopher no sería nada sencillo y que esas palabras no bastarían.

Los sollozos comenzaron a ser poco audibles, Christopher empezaba a calmarse y su respiración se normalizaba.

—Es tarde Chris.—habló Richard muy bajo, solo para que Christopher lo oyera.—Debes dormir.

Lo que más quería Richard ese momento era hablar con Christopher pero sabía que no era el momento adecuado, porque el castaño estaba dolido y cansado, necesitaba descansar y pensar. Ordenar sus pensamientos y sentimientos era lo que más necesitaba Christopher.

El castaño se alejó del cuerpo de Richard limpiando sus lágrimas con sus manos, miró a Richard y asintió, Christopher agradecía que Richard no insistiera en hablar porque no se sentía con ganas de hacerlo. Caminó a su cama y se metió en esta sin sacarse la ropa ni los zapatos, Richard soltó un suspiro y se acercó a su amigo, se puso de rodillas y se encargó de sacarle los zapatos, Christopher no dijo nada, solo agradeció en sus adentros el detalle de Richard mientras sus ojos poco a poco empezaron a cerrarse para no abrirse hasta la mañana siguiente.

El moreno no tenía ganas de estar ahí ahora, así que salió al pequeño balcón que había en la habitación, miró hacia abajo y apoyó sus dos codos en el borde del balcón para dejar caer su peso y poder estar ahí todo el tiempo que necesitara para saber como enfrentar todo mañana, porque sus palabras tendrían consecuencias grandes, no malas es claro.

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Los párpados de aquel chico de cabellos castaños se comenzaron a mover y Richard solo lo miraba desde su cama, estaba sentado mirando a Christopher dormir. Estuvo velando el sueño de Christopher mientras había estado toda la noche pensando que decir para cuando Christopher despertará, sabía que ahora las palabras jugaban un papel importante.

Christopher abrió los ojos y lo primero que vió fue a Richard sentado en su cama con los codos apoyados en sus rodillas y sus manos juntas sosteniendo su cara con la mirada fija en él. Y entonces recordó todo lo qué pasó ayer, su mente comenzó a revivir con exactitud el momento en el que Richard le decía que lo quería, después de tanto esperar por fin salió un "te quiero" de sus labios, aún no podía creer que aquello pasara.

—Chris, hola...—dijo Richard levantando su cabeza de sus manos al ver que Christopher despertó.— ¿Cómo estas?

—Hola... estoy bien.—despertó Chris, limpió sus ojos con sus manos y lentamente se sentó en la cama.

—Te traje una pastilla para la resaca.—miró al lado de la lámpara donde estaba una pastilla y un vaso de agua— Después de lo de ayer supongo que no te sientes bien.

—Estoy bien, gracias.— habló el chico tranquilo, se sentía nervioso cerca de Richard.—Ayer...

—Podemos hablar de eso después si quieres, necesitas un baño y cambiarte para ir a una entrevista. Renato vino hace una hora, no quería despertarte así que le dije que los alcanzaríamos después.

Christopher sintió un poco de enojo al ver que evitaba el tema, mentiría si dijera que no pensó que al final todo terminaría siendo "Lo que dije ayer no era real" pero no podía estar más lejos de la verdad. El castaño solo asintió, se puso de pie con algo pereza y Richard se percató de esa actitud.