Sabor a lágrimas

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Sentí un dolor en mi pecho cuando vi cómo sus lágrimas cubrían lentamente sus mejillas.
No era la primera vez que la veía llorar, pero esta vez se sentía cansada de tanto hacerlo.
Sólo mi abrazo le pude brindar, mi corazón se arrugó; aunque mis ojos no lloraban, mi mente si le pedía al cielo que todo se solucionara.
Lo único que quiero es que no sufra más, que su vida prospere, que sus sueños siempre estén guiados bajo la voluntad del Creador.
El orgullo se apoderó de su alma, la debilidad emocional ahora es su compañera, ¿Qué puedo hacer para  levantarle el ánimo?
Las horas pasaron, fue una larga noche, una en que le pedía a Dios fuerza para ella.
Hay noches eternas que saben a lágrimas, ayer fue una de esas.
"Me quiero morir", dijo, y les aseguro que sentí que mi mundo se nubló.
"Soy lo peor" me repetía, y con un nudo en la garganta le daba miles de razones para que ella se diera cuenta que ha sido una de las bendiciones de Dios en muchas personas. 
Quiero verla sonreír, llena de estusiasmo como siempre se ha caracterizado.
Ella ha sido un gran motivo para dar gracias a Dios, hoy pido que no hayan más noches así, que sus noches no tengan sabor a lágrimas.
Y como Dios le ayudó a Daniel en el foso, le pido que la proteja a ella en la vida diaria.

#YKBO

Pdta:  El nombre original sería otro, lo cual lo notarán en el escrito.

Gracias a los que me leen y los que por whatsapp me apoyan.

¡¡Bendiciones!!
¡¡Bendiciones!!

Escritos Sin TintaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora