Princesas, osos, canciones y sangre

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Habían pasado un poco más de tres semanas desde la muerte de Bang YongNam y desde que su hermano comenzó a vivir en la casa de la familia Choi. YongGuk logró acoplarse al ritmo de Zelo y su madre en tiempo record. Llegaba cada noche a dormir, estaba puntual en la cena –que era la única comida que Zelo y su madre se obligaban a compartir a diario–, ayudaba en los quehaceres y apoyaba a la señora Choi con las cuentas –aunque esta y su hijo se negaran, principalmente porque Zelo no tenía la más remota idea de cuál era su trabajo.

Su semblante había mejorado, ya no se veía tan pálido y enfermo como la primera noche. A veces sonreía y a la señora Choi le encantaba pasar tiempo con él.

JunHong comprendía que no quisiera hablar de su hermano, que recordarle lo deprimiera, pero no comprendía que hubiera cortado contacto con el resto de su familia. Natasha llamaba a su madre para tener noticias de él y Zelo llamaba a la señora Bang para saber de YoonSun. No le gustaba que fuera así de distante con su familia, pero tampoco se había detenido a tener una conversación decente con YongGuk como para compartir con él sus inquietudes.

Era día sábado nuevamente y había pasado el día sufriendo un dolor de cabeza casi insoportable –el anuncio de una gripe igual de atroz–, por lo que decidió quedarse en casa a pesar de la insistencia de KiBum por salir a un bar. Su madre, en cambio, tuvo una mejor idea: ver series y comer palomitas bajo una gruesa manta en la sala.

Se acomodó, como ya se había hecho costumbre, entre su madre y YongGuk frente al televisor.

—¿Qué veremos? —preguntó YongGuk mientras su madre programaba la serie. Apenas Zelo vio la imagen promocional, supo que no sería una buena idea.

—Yo creo que deberíamos ver Vikingos, o algo de acción, o me quedaré dormido —dijo empujando a su madre y buscando él la serie.

—¿Qué hay de malo con esa? —La mujer hizo un puchero al que fue apenas capaz de resistirse—. Dicen que es muy buena.

—Deberías complacer a tu madre —dijo YongGuk con la boca llena de palomitas.

—Leí el libro, es malísimo. —Realmente solo le leyó las primeras páginas y no le gustó. Después de que escuchó las críticas y conoció la trama, con menor razón la vería.

—¿De qué se trata que es tan mala?

—De una chica que se suicida y deja grabaciones a todas las personas que, de alguna forma, influyeron en su decisión de quitarse la vida —soltó rápidamente luego de suspira, haciendo clic sobre la imagen en miniatura de Travis Fimmel como Ragnar Lothbrok con la esperanza de que, al comenzar rápido el primer capítulo, no tuvieran tiempo para discutir nada más—. Si me preguntan, la idea de culpar o siquiera insinuar la participación de otras personas en un suicidio me parece egoísta y errónea. No defiendo el bullying, pero sí la capacidad de cada persona de decidir qué hacer con su vida. Prefiero ver a muchas personas asesinarse libremente y sin culpas.

Aunque estaba seguro de que observar los distintos comportamientos de los adolescentes algún día le serviría en el trabajo, ese no sería el día.

Ni su madre ni YongGuk dijeron algo, no supo si se debía a que la serie ya había empezado o a su opinión y la trama de la serie que tanto estaba llamando la atención. Él no estaba interesado en verla desde el principio y luego de la muerte de YongNam, la posibilidad de hacerlo se volvió imposible.

Durante las tres horas siguientes, apenas intercambiaron palabras, algún comentario por aquí y otra opinión por allá, pero nada que no estuviera relacionado con los bárbaros. Pronto se dio cuenta de que a YongGuk le estaba gustando la serie tanto como a él, por lo que se sintió feliz de haber conseguido distraer su atención. Cada cierto tiempo, su madre soltaba alguna exclamación de sorpresa, reía o expresaba en voz alta su fascinación por los personajes, en especial por Floki, que también era el favorito de Zelo, con toda su extravagancia y su aura oscura. No podía comparar esa serie con cualquier serie adolescente, pero Floki conseguía ser extraño y llamativo incluso en un contexto tan arcaico como la era vikinga.

Requiem [BangLo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora