Capítulo 15

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A las dos horas salimos de cafetería mi amigo Richy como siempre me tenía cogida de la mano y Vicky andaba muy pegada a nosotros, qué íbamos hablando bajito para que nadie se enterase.

- ¿No te parece que Sofía te miraba demasiado mal?- me dijo cómo sabiendo ya la respuesta.

-Si, pero bueno, es lo que tiene, a mi no me gusta ella y yo a ella menos- respondí sencillamente como si no me importara demasiado.

Richy se fue para su casa porque había ”quedado" con alguien cuyo nombre no me quiso decir, pero seguía viviendo conmigo, creo que necesitaba intimidad y la verdad es que lo entiendo porque entre Vicky y yo el pobre no tendría un minuto de paz.

Vicky se vino conmigo a mi casa y decidimos ponernos cómodas y ver una película tranquilamente pues se iba a quedar a dormir esa noche conmigo, como en los viejos tiempos, solo que ahora no estaban ni Elena ni Karen que eran nuestras dos mejores amigas, pero que desde hace un año Elena esta estudiando en Madrid (pues somos de España) y Karen esta con su familia que se mudo a Málaga.

Cuando llevábamos media película, soñó el timbre, pensaba que era Richy que ya volvía de hacer sus ”cosas", y me dirigí a abrir la puerta, juro que si no llego a tener la mandíbula de abajo pegada a la de arriba se me uniera caído al suelo, pues plantado delante mía estaba nada mas ni nada menos que .

-Si no cierras la boca te van a entrar moscas- me soltó divertido.

-Y tu si te acostumbraras a no llamar a las casas de las que se te echa la cosa a lo mejor te iría mejor- le dije del mismo tono.

-Mira Layah no he venido a discutir, solo quiero darte una explicación de porque Sofia se comporta así conmigo- me dijo en un tono demasiado serio.

¿¡Pero que!?, a mi este ser no me tiene que explicar nada, si ni si quiera es mi amigo, el café que se tomo le tiene que haber afectado a las neuronas.

-No tienes que...-

-Pero quiero explicartelo- me corto - ella se piensa que somos novios, pero no, yo solo la quiero como una amiga, no me gustaría hacerle daño por eso no le niego que seamos novios, pero para mi no lo somos, solo la quiero para saciarme cuando estoy necesitado ¿no se si me entiendes?-

-¡¡¡Seras desgraciado!!!, ¿¡¿¡a si es que eso es lo que las mujeres somos para ti?!?! simples juguetes a los que solo quieres para pasar un buen rato- no me gustaba Sofia para nada, pero no iba a permitir que hablase de una mujer así delante mía.

-No, para mi las mujeres no sois juguetes, pero ella si, ¿como quieres que yo la respete si no se respeta ni ella misma?, es verdad que desde que somos ”novios" no se acuesta con ninguno mas, pero se ha llevado a su cama a mas tíos de los que trabajan en su empresa.

Ese comentario me hizo gracia, pero no se lo dejare ver, es verdad que si quieres que te respeten te tienes que respetar primero a ti mismo, pero tampoco quería darle la razón a aquel cavernícola.

-Vale, pues ya me lo has explicado aunque yo no te he pedido explicación ni tampoco me importaba lo mas mínimo lo que hicieses o no con esa ”zorrita"-

-Mientes- me soltó con una voz muy ronca.

-¿Que?- le dije echandome para atrás.

-Que mientes, si te importa, si no no la llamarías zorrita, ni hubieras estado de ese carácter en la cafeteria- me dijo aproximandose - ¿Y sabes que?-.

-¿Qu...Que?- tartamudee.

-Tu también tienes unos labios muy suaves - me dijo abalanzándose encima mía por completo.

Me estaba besando salvajemente, con una fuerza que dolía, se las apaño para cerrar la puerta y a la vez sujetarme de la cintura, yo noble correspondía al beso y se aventuro con su lengua en mi boca, aahhh no, ahí si que no, y le mordi su lengua.

Se apartó de mi llevándose las manos a la boca.

-Largo de mi casa- de dije furiosa.

-Pero...Layah, yo...-

-¡Fuera te he dicho!- le grite lo mas alto que pude, seguro que me dañe las cuerdas vocales, pero me daba igual lo único que quería era que se diera cuenta de lo enfadada que estaba y que se fuera.

Sin decir nada mas y sin apartarme la mirada me acaricio la mejilla y deposito un suave y torno beso en mis labios casi sin rozarlos, ¿pero de que iba? le dije que se fuera y el se dedica a  y a besarme otra vez.

-Fuera...- dije casi en un susurro pues me había dejado shockeada por lo tierno que había sido.

Se alejo despacio de mi y se fue, sin decirme nada mas, no sabia que hacer, a lo mejor había sido muy dura, ¿voy detrás de el? ¡No! ¿¡pero que digo!? si fue él, el que cogió invadió mi casa y me beso otra vez sin mi permiso.

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Lo siento por no haber subido antes, pero es que me surgieron unos asuntos y me fue imposible, espero que me perdonen.

El siguiente capitulo tendrá el punto de vista de Zeky y lo que sintió para haberle dado aquel ultimo beso a Layah.

Gracias por leer mi novela, os quiero, voten y comenten por favor, quiero saber si les gusta mi novela de momento. Un saludo y hasta el lunes.

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