Kiss Me

capitulo 28- el final

Al día siguiente de la prueba del vestido las chicas se fueron de compras al centro comercial mas grande de la ciudad, y ahora se encontraban en una heladería sentadas y contándose sus cosas.

-Aqui tienen el pedido que lo disfruten- dijo el camarero con una sonrisa espectacular en la cara.

Al alejarse un poco de las chicas Elena empezó a hablar.

-Uuii Layah ese bombón te estaba desnudando con la mirada, porque te vas a casar que si no la antigua Layah lo hubiera echo suyo en la barra sin importarle la gente que hubiera delante.

-No seas tonta, el chico solo ha sido amable, y como tu has dicho me voy a casar.

-Bueno siempre hay tiempo de un buen amante- dijo Karen

-No digáis tonterías, amo a Zeky

-Bueno nosotras solo te hemos dicho lo evidente, mira ahí está otra vez devorándote con la mirada.

Miré para atrás y efectivamente no dejaba de mirarme, cuando se dió cuenta de que yo también lo estaba mirando me dedico una preciosa sonrisa, dios como me hubiera gustado pasar mi lengua por esos dientes tan blancos y perfectamente alineados, ¿pero que estoy diciendo? eso no debería ni de haberlo pensado, en casa tengo a un hombre bueno, cariñoso y guapísimo y que esta dispuesto a pasar el resto de mi vida conmigo, no puedo permitirme el lujo de fantasear con otro, ¡joder! pero es que miralo parece un puto dios griego, con ese cuerpo ese pelo que parece de seda negra, me encantaría perder mis dedos por aquel sedoso cabello, dios otra vez, deja de mirarlo ¡deja de mirarlo.

Giré la cabeza y mis amigas estaban hablando animada mente sobre sus vestidos de dama de honor.

- Para mi gusto todas deberíamos ir con el mismo vestido- dijo Vicky

-Me parece bien, y el color me gustaría que fuera un rosa palo- dijo Karen

-No, no y no, mejor verde agua, el rosa está ya muy visto- replicó Elena.

Yo seguía absorta en mis pensamientos y me sobresalté cuando aquel culto a la belleza se acercó y con sumo cuidado deposito una servilleta doblada por la mitad, y se fue a atender otra mesa.

-Abrelo ¡abrelo!- soltó Karen

Con cuidado desdoblé la servilleta y ponía:

                       Daniel

                   653927049
   A tu entera disposición las 24h

Me quedé alucinada ese bombón me había pasado su número de teléfono.

Elena me quito la servilleta de un tirón y lo leyó.

-Uuuiii “a tu entera disposición las 24h" dijo leyendo lo ultimo que ponía.

Todas empezaron a aplaudir y a reir., yo me giré para verlo, y allí estaba otra vez, le dediqué una sonrisa y nos fuimos pagando la cuenta.

Al llegar a casa Zeky no estaba y la servilleta quemaba dentro de mi bolsillo del pantalón vaquero, la saque y guardé su numero en mi teléfono, pero por si las moscas le puse Elena2 por si Zeky le entraba la vena curiosa y le daba por mirarme el móvil.

Al poco rato llegó Zeky con cara de pocos amigos, y el enfado se le notaba hasta en los ojos.

- ¿Qué te pasa cariño?

-Un gilipollas, te iba a comprar un ramo de rosas y el dependiente me dijo que si eran para mi novia, yo le dije que eran para mi prometida y .e dijo que eras muy afortunada, y yo le dije que aparte de eso eras hermosisima y le enseñé una foto tuya y me dijo con voz de cerdo monumental año ser chico menuda jamelga, si la llego a tener delante le clavo la polla hasta la garganta" ¿como se atreve a decir eso delante mía?, y nos hemos pegado, el muy hijo de puta no dejaba de decir que quería tu culito entre sus manos.

-Cariño, tu sabes que eres el único que puede tener mi culo entre sus manos- dije un poco bromeando para que se tranquilizara.

-¿Enserio Layah, enserio?, yo no se si el día de mañana me vas a engañar con alguien y me vas a dejar el corazón inservible.

-Como puedes decir eso, yo te amo Zeky.

-Muchas mujeres empiezan amando a sus maridos y terminan teniendo un amante en cada esquina, además tu eres una mujer muy apetecible, y cualquier tío que quieras lo vas a tener, se perfectamente que me vas a engañar con otro, porque al fin y al cabo todas sois unas putas.

Eso cayó en mi corazón como una daga hirviendo, no lo aguante mas y salí de casa corriendo y dando un portazo, sin saber donde ir y viendo todo borroso a causa de mis lágrimas, y creo que esto me escocía verdaderamente en el alma porque había fantaseado con otro hombre, ¡Daniel! es verdad tenia su numero, Si Zeky quería una guarra la iba a tener, ese capullo no sabia lo que era capaz de hacer.

Marqué su numero y me contestó al segundo tono.

-¿Si?

-Hola soy Layah, me diste una servilleta con tu número y me ponías que estabas a mi disposición las 24h

-Aah si ya me acuerdo de ti, la belleza del helado de turrón 

La verdad que sin quererlo me había puesto roja.

-Si, esa misma, ¿puedes quedar ahora?

-Claro, tengo la tarde libre dime donde estas y te paso a recoger.

Mientras tanto Zeky

Soy gilipollas ¿como podía haberle dicho eso a la mujer que amo?

Le daré tiempo seguro que esta con alguna de sus amigas o Ricardo.

Espero que no le haya echo mucho daño, solo tenia miedo de perderla y las palabras salieron solas de mi boca, mi Layah es incapaz de hacerme eso porque me quiere.

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Espero que les guste, el final es abierto porque me estoy pensando hacer segunda parte.

Pero de momento no lo tengo muy claro, cuando podáis pasados por mis otras novelas.

Un besito, os quiero.

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