El día menos inesperado Damian Wayne, un chico de 13 años que se hace pasar por Robin ya que su padre es Bruce Wayne "Batman", se da cuenta de que uno de sus peores enemigos se va a vivir a su preciada ciudad Gotham. El chico perfecto en Metrópolis...
Vamos a ver tengo que aclararme. ¿Me gusta Damian? Esque no lo se... si me hace sentir cosas que no siento normalmente, me hace sentir cosas... Distintas... Extranñas... Pero me gustaban. Entonces supongo que si... Pero Jon también estaba ahí y él también me hacía sentir cosas estranñas y distintas pero que también me gustaban... Estaba hecha un lío, ¿qué iba a hacer? De momento tengo que ver... no se... esperar a que algo pase, no lo se... todo es tan complicado... Mañana tengo una cita con Damian y al siguiente día una con Jon. No se lo que me espera en ninguna de ellas.
·Damian·
¡¿Pero qué pretendía Grayson dejandome... digo dejandonos aquí e irse a solas con Angie?! Estaba enfadado y muy enfadado. ¡Asaber lo que le ha podido decir de mí! Maldito grayson... En cuanto supe que ya habían llegado me posé en la puerta de Grayson, allí lo esperaría y allí me lo explicaría. Al cabo de un rato apareció.
-Hey enano, aparta, tengo que pasar. -Me pidió sin siquiera mirarme.
-Quiero explicaciones Grayson, explicaciones. -Le ordené yo levantando una ceja con un tono enfadado.
-¿De qué se supone que quieres explicaciones? -Me preguntó ingenuo levantando una ceja.
-¿Tu de qué crees? -Le cuestioné yo amenazante.
-¡Aaaah! ¡Siiii! ¡Ahora me acuerdo! -Hizo una pausa. -Entra. -Fue lo último que dijo metiéndome en su habitación y mirando a todos lados del pasillo. -Sientaté y escucha atentamente. -Me comentó muy muy serio.
-Bien... -Me interrumpió Grayson con un dedo en mis labios.
-Le he conseguido a Angie mucha información. -Iba a decir algo pero Dick me volvió a interrumpir. -Le gustas Damian. -Me soltó de repente demasiado serio, esto me dejo en shock. ¿Le gustaba? ¿De verdad le gustaba? La verdad es que me emocioné un poco y he de decir que me sonrrojé derrepente. -Damian, ¿me has escuchado? Le gustas, eso es muy difícil de conseguir. Por favor Damian no la cagues. Y que sepas que estas en una guerra eterna con Jon. A ella se le nota que también le hace tilín. -Me explicó llevandome a la salida. -Ya puedes estar preparandote bien esa cita. -Me echó de su cuarto con esas últimas palabras.
Tenía mucho que preparar mañana será un gran día especial. Se va a enterar ese Jon quien manda aquí. ____________________________________________________________________________________________________________________________
·Angie·
Tras una larga noche pensando por fin caí en las redes de un profundo sueño. Por fin llegó la mañana y desperté con un largo vostezo. Me dí un largo baño de burbujas en mi jacuzzi y tras eso me vestí, la verdad esque me vestí bastante elegante ya que hoy era la cita con Damian. Me puse unos pantlones cortos de una tela seca y tiesa y un poco holgados por el final. Eran blancos y tenian finas líneas verticales añil y bocadillos y cosas típicas de los comics, eran muy bonitos y tenían un lacito en la parte de enfrente. En mi torso me coloqué una camiseta de manga corta de croché que justo para taparme mi pecho tenía el número 11 en un estampado añíl de flores. Me puse unos zapatos rojos con un poco de tacón y una felpa a juego con los zapatos.
-Perfecta. -Susurré mirandome al espejo con una sonrrisa. Me dirigí a la puerta para bajar a desallunar cuando por el filo inferior de la puerta corrió un sobre con un sello de cera roja para sellarlo. Lo cogí, lo abrí y leí la carta que llevaba dentro.
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(Nota de Damian)
Al leer la carta pensé "Valla que tarde vamos a quedar" pero luego pensé enlo que dijo Dick "Será algo muy especial" Entonces me tranquilizé. Abrí la puerta y bajé las escaleras hasta llegar al comedor. Allí estaban todos, Bruce desallunando en un extremo de la mesa, Jon y Damian discutiendo uno enfrente del otro y Dick con el móvil a un lado de Damian. Yo me senté al lado de Jon el cual sonrió triunfante a Damian y este lo miró con enfado. No entiendo nada. Al minuto, Alfred aparecía con un plato con tres tortitas con sirope de chocolate encima y un cubito de mantequilla para decorar el cual me plantó justo en frente mia.
-Que a probeche, señorita. -Me dijo él amablemente.
-Gracias Alfred. -Le resspondí yo cortés y con una gran sonrisa.
-El agradecimiento es mio por su alegría. -Dijo con una pequeña sonrisa y guiñandome un ojo. Y se retiró. yo empecé a comer aquellas tortitas que había preparado Alfred que tenían tan buena pinta.
-Y bien Angie, ¿qué tienes pensado hacer hoy? -Me preguntó Dick pícaro. Ya sabía de que iba esto. Estaba molestando a Damian.
-Grayson. -Le respondió Damian antes de que yo pudiera articular ni si quiera un mísera palabra.
-Damian, le he preguntado a ella. -Volvió a decir Dick.
-Graaaaaysoooooon. -Repitió Damian pero esta vez con un crujimiento de sus nudillos. Yo terminé de desallunar y me retiré de la mesa.
-Estaba todo exquisito Alfred. -Le alagué a Alfred retirandome de la mesa sin dirigirle la palabra a ninguno delos que estaba en la mesa. Y ahora a esperar a la tarde.
