|| AVE MARÍA ® || Min Yoon Gi || TERMINADA

CUATRO

Era 29 de noviembre y mañana en la mañana comenzaría el novenario. Mis Hermanas y yo comenzamos a decorar la capilla. Telas por todos lados y flores de todo tipo decoraban la entrada y el altar de la capilla. Y con el estilo gótico de la capilla, se veía aún más hermosa.

Todas estábamos felices por adornar la capilla, excepto Haneul, que se la pasó haciendo berrinches como una niña.

- No seas así.- le dije a Haneul que me ayudaba a poner unas flores en el altar.- Lo hacemos para nuestra Madre del Cielo.

- No llevo ni una hora y ya me he golpeado tres veces.- bufó.

Reí al verla. Se portaba como una niña, espero que siga así.- Ya que estamos quejándonos.- volvió a hablar.- Me atrevo a decir que por la madrugada escuché unos sonidos extraños en la habitación de Min Ah y Sun Hee.- volteó a verlas.- Se escuchaban unos grititos agudos.

Miré hacia mis dos Hermanas que estaban colgando telas en las paredes. Entonces, recordé lo que Min Yoongi me dijo "... estoy seguro que la mayoría de las religiosas de esta congregación ya se follaron unas con otras". Sacudí mi cabeza y traté de pensar en otra cosa, pero Haneul no paraba de hablar.

- Seguro que tienen escondido un teléfono celular y por las noches se ponen a ver videos prohibidos.

- ¡Haneul!- grité, haciendo que las demás chicas voltearan.- Deja de levantar falsos.- susurré.

Haneul siguió decorando el altar en silencio.

[...]

El primer día del novenario comenzó. Las ancianas esperaban afuera de la capilla a que la imagen de la Virgen de la Inmaculada Concepción saliera a hacer la peregrinación. La mitad de las Hermanas de la congregación, se quedaron en la capilla a hacer los arreglos para la misa de 7:00 am, mientras que la otra mitad, estaríamos en el rosario de aurora.

La imagen de nuestra Señora, ayudado de cuatro hombres que se iban turnando con otros más, salió a recorrer las calles de Suncheon. Cada que se terminaba un misterio, cantábamos una canción de alabanza.

Me di cuenta que en la peregrinación se encontraba Min Yoongi, junto con su secretario. No me quitaba los ojos de encima. Lo que menos quería era topármelo cuando estuviera sola.

Dimos el recorrido por las calles dichas y volvimos a llegar a la capilla. Mis Hermanas encargadas del coro, tocaron una melodía maravillosa y entramos. El sacerdote Hoseok inició la misa.

[...]

Caminaba por un camino empedrado. Los árboles con hojas verdes, habían desaparecido. Los cielos se tornaban grises y cada vez hacía más viento. Necesitaba respirar por un momento y olvidarme de Min Yoongi. No quería estar en el convento o en la capilla porque podría encontrarme con ese hombre.

- Veo que no acata las reglas Hermana Kim.- me estaba prohibido maldecir, pero quería hacerlo.- ¿Por qué sale sin el previo permiso de la Madre Superior?

- No es de su incumbencia.- respondí.

- ¿Qué le dije sobre hablarnos con formalismos?

Lo ignoré y seguí caminando.- Me gustan las chicas difíciles.- comentó.- Pero sobre todo las puras.- me paré en seco. No iba a dejar que ese hombre me ofendiera más.

- Se lo diré sólo una vez.- lo encaré.- Deje de ofenderme y váyase.

- ¿Se ofende cuando alguien es sincero con usted?- caminó despacio hacia mi.- Entonces tendré que mentir.

Tragué saliva y di pequeños pasos hacia atrás.- Usted es el mismo demonio.

Min Yoongi hizo una mueca.- Sí eso soy para usted Hermana Kim, entonces debería de haber un motivo, ¿no cree?

Me tomó de la cintura y comenzó a besarme, tratando de meter su lengua en mi boca. Trataba de zafarme, pero él me tenía bien sujeta.

Mi cuerpo comenzó a ceder y poco a poco fui abriendo mi boca para dejarle paso libre a su lengua. En el silencio de la madre naturaleza, se podía escuchar los chasquidos de nuestros besos. Min Yoongi puso una mano en mi pecho y la masajeó. Un gemido salió de mi boca.

- Sé que le gusta Hermana Kim.- la voz de Yoongi sonó ronca.- Vivir la vida de la carne no es mala.

Siguió moviendo su mano en mi seno y su lengua lamía el contorno de mis labios.- No entiendo porque tienen que llevar esa putada en la cabeza.- dijo.

- Toca*- corregí.- Quítalo si te molesta.- dije agitada.

Min Yoongi me miró sorprendido, pero no lo pensó tres veces y me quitó la toca. Pudo ver mi cabello corto, casi igual a la de él.

- Aún con el cabello corto eres tan deseable.

Nadie en mi vida me había dicho que me deseaba. Cuando cumplí 17 años, entré al convento y antes de que entrara, mis padres me prohibieron hablar con chicos de mi edad e ir a una escuela donde hubiera niños.

Sabía que había perdido la cabeza en cuanto me despojó de mi toca y dejé que metiera sus dedos debajo de mi hábito.

- ¿Cuanta mierda usan debajo de esto?- no respondí.

Llegó hasta mi intimidad y la acarició haciéndome sentir una sensación que nunca había experimentado. Como pudo, metió sus dedos bajo mis bragas y acarició mi clítoris. Saboreaba esta exquisita sensación que me regalaba. Metió su cabeza debajo de mi hábito y sentí cómo su lengua jugaba con mi clítoris. Otro gemido salió de mi boca. Mis piernas comenzaban a perder fuerza y me sostenía en la espalda de Daddy.

- Estas tan mojada preciosa.- dijo debajo de las faldas.- Como quisiera tenerte en mi cama ahora mismo.

Otra sensación de placer recorrió mi intimidad con sólo escuchar sus palabras. Siguió moviendo su lengua en mi intimidad, chupando mi líquido y saboreandolo. Una sensación de placer explotó dentro de mí y recorrió cada parte de mi cuerpo y feminidad. Volví a gemir, pero más que un gemido, era un grito. Me había corrido.

Yoongi subió mis bragas y acomodó mi ropa debajo de las faldas. Salió y me miró a los ojos.- Eres perfecta.- dijo. Tomó mi mano y la bajó hasta su miembro.- Me has puesto tan duro que te follaría en este lugar, pero fue suficiente por hoy.- me dio un beso en los labios y se retiró del lugar.

"No codicies su hermosura en tu corazón, ni dejes que te cautive con sus párpados".

Proverbios 6:25.

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*Toca (Vestimenta): prenda de tela o lienzo, en general blanca y fina, usado para cubrir la cabeza.