¡Hola amigos! ¡Qué tal!
he decidido utilizar este espacio para agradecerles. Seguramente se preguntaran ¿Agradecernos? Si, así es, justo como leyeron.
Primero que nada, quiero agradecer a la señorita Gabriela Díaz por ayudarme a realizar la edición y publicación de esta anécdota, ella fue quien me impulso, desde un principio, a dar a conocer este escrito; estoy seguro que la señorita Gabriela puso todo su esfuerzo, dedicación y pasión en este trabajo y mucho muy agradecido me encuentro con ella por tomarse la dicha de acompañarme en cada capítulo y hacerlo llegar hasta ustedes.
Por otro lado, por supuesto he tenido altas y bajas expectativas, muchas veces deseaba ya no continuar mi trabajo y solo dejar al aire las cosas, pero es aquí en donde entra una persona sumamente importante para mí, una persona que siempre confió y me ayudo en múltiples ocasiones a superar las barreras que constantemente obstaculizaban mi camino, estoy sumamente orgulloso de ella y con todo mi cariño, afecto y sinceridad me gustaría agradecer de todo corazón a la señorita MELANY IVETTE CUELLAR MEJIA, quien, sin esperar nada a cambio, me ayudo y me impulso a continuar con mi vida y no obstante a eso, siempre me motivo a alcanzar lo mejor de mí, ayudándome constantemente a superarme como persona.
Por ultimo queridos amigos, lo que me llevo a escribir esta obra fue simple casualidad, lo único que buscaba era poder plasmar mis sentimientos, mis alegrías, mis tristezas, mis frustraciones, en una hoja de papel. Con el tiempo poco a poco (sin darme cuenta) se fue forjando una historia, una anécdota que con el paso de las horas a agradado a muchos de ustedes; es aquí donde, espero, hayan disfrutado de la magia que nos brinda la lectura y con altas esperanzas espero continúen utilizando ese mundo tan increíble y fantástico llamado imaginación, en verdad amigos; me pongo de pie y hago una reverencia a ustedes, agradeciéndoles el tiempo que se han tomado en leer el fruto que me ha llevado varios meses cosechar, con el corazón en la mano y lágrimas en los ojos, quiero agradecerles infinitamente la paciencia y la tolerancia de todos y cada uno de ustedes.
Gracias a ustedes mis lectores, espero, que como yo, hayan reído, llorado y disfrutado cada capítulo que he compartido con ustedes.
Sinmás que decir se despide de ustedes su servidor Juárez Caliz Abdi, autor yamigo.
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Del Amor Al Odio
RandomDicen Que Del Odio Al Amor Solo Hay Un Paso, Pero Del Amor Al Odio Cuantos Habrá?... -Una Historia Escrita Por Abdi Juárez Cáliz.-