Del Amor Al Odio

Paso 4: Noviazgo

"Las luces de la habitación están apagadas, en medio de la habitación una cama, en esa cama, dos cuerpos, cuyo deseo y pasión alcanzan su máximo punto. "

***
Entrando en la habitación Rebeca y yo nos observamos, la noto muy exaltada, la tomo por sus manos, le están sudando y trata de fingir su histeria con una pequeña sonrisa; avanzamos y beso su mejilla tratando de tranquilizarla un poco, nos sonreímos; llevo a Rebeca hasta la orilla de la cama y la invito a sentarse, ella accede, se sienta y comienza a temblar. Noto sus nervios, camino hasta un tocador que esta frente a la cama, tomo mi teléfono y lo dejo sobre esté, me giro e intentando "romper él hielo " trato de establecer una conversación:

-No te notas muy cómoda Rebeca, ¿Quieres Que Nos Vayamos Cielo?

-Para nada Eduardo, discúlpame por favor corazón.

-¿Nerviosa?

-En lo mas mínimo amor, ¡Emocionada! ¿y tu?

-Pasmado bebe y debo confesar, inquieto.

Rebeca me lanza un beso y con un movimiento de mano me invita a sentarme justo al lado suyo, camino y me siento, la tomo de su rostro con ambas manos y la miro a los ojos, es tan hermoso, aun no puedo creer que este con ella, lo que comenzó como un sueño, una ilusión, ahora es la realidad y no importa lo que suceda jamas dejare que esta realidad termine.

-Rebeca.

-Eduardo.

Cierro mis ojos y comienzo a besarla, dejo que la tranquilidad de la habitación me envuelva y me dejo llevar, Rebeca responde a mi beso y me abraza lentamente por la espalda, acercamos nuestros cuerpos y nos dejamos caer en él colchón; caemos juntos uno sobre él otro, nuestra pasión incrementa con cada segundo que pasa; nos acercamos hasta las almohadas, tomo una y la acerco para que Rebeca se pueda recostar sobre ella.

-Así estarás mas cómoda.

Ella se recuesta sobre la almohada y yo paso a colocarme encima de su cuerpo, continuamos besándonos, mi excitación aumenta rápidamente y en pocos segundos estoy al límite, ¡Quiero estallar! Rebeca empieza a agitarse cada vez mas y mas, tensa sus piernas y aprieta sus manos contra las mías; bajo hasta su cuello y comienzo a besarlo, mis manos comienzan a desvestirla y sin dificultad alguna comienzo a desabotonar uno a uno los botones de su blusa, con cada botón que sale beso poco a poco su pecho semi desnudo, bajo por su estómago hasta llegar al botón de su pantalón, lo desabrocho y seguido bajo él cierre de este, me deslizo un poco más y retiro sus zapatos, con un jalón prácticamente perfecto retiro sus pantalones y la observo, ahí recostada frente a mi, se encuentra ella semi desnuda:

-Por favor Eduardo, deja de mirarme así me estas apenando.

Rebeca mueve sus manos y trata de cubrirse un poco, su cara esta colorada y visualizo que sus brazos y piernas no dejan de temblar; me acerco y la beso, ella me abraza y con un movimiento rápido me recuesta sobre la cama para colocarse sobre mi, me quita la playera con extrema facilidad y comienza a besar mi cuello, baja hasta mi pecho y continua besando. ¡No solo soporto mas! Abrazo a Rebeca y desabrocho su sostén, su piel y la mía están a un centímetro del tacto y aun así puedo sentir él calor que se despide de su cuerpo, es tan impactante; Rebeca esta muy exaltada sus respiraciones se agitan cada vez mas con cada momento que pasa; hago a un lado a Rebeca, me levanto de la cama y me retiro él cinturón para después retirar mi pantalón, Rebeca solo me mira asombrada; tomo un preservativo y lo coloco con un poco de torpeza, comienzo a preocuparme, ¿De verdad estamos listos?

-Deja de pensarlo tanto Eduardo, adelante ambos estamos preparados para esto bebe.

La voz de Rebeca invade mi mente, estoy impactado, su voz me da la confianza suficiente para continuar; me acerco a la cama y nuevamente comenzamos a besarnos, mis manos bajan hasta su cadera y quito su ropa interior; ambos nos miramos fijamente y nos sonreímos con una sutil gentileza.