Capítulo 1

2K 116 25
                                    

-Kuroko...

-Hola Kise.

Escuchar su voz me volvió a lastimar. Estaba enojado, dolido, irritado. No quería ver como su vida era un encanto mientras yo vivía un infierno.

Que sentido tenía esto? Solo era un vil masoquista en medio de una historia trágica de amor. Solo fui un medio de diversión para todos.

-No puedo hacer esto- solté las palabras con odio -pense qué lo había superado, pero esto sigue siendo horrible. Yo me largo.

-Espera Kise!

-Que? Acaso otra mentira?

-No... no yo...

-Kuroko, cualquier cosa que pasara entre nosotros, acabo.

-Escuchame vale...? por favor.

-No. Esta vez no quiero ser yo el que seda, no quiero ser yo el que termine rogando, no quiero volver a ser lastimado. No pienso arriesgarme de nuevo por ti.

-Lo se... lo se- comenzó a llorar, algo que me sorprendió. Kuroko a pesar de todo, nunca se expreso libremente, tenía un rostro estoico, eran muy raras las ocasiones donde se expresaba, pero llorar. Nunca- te lo ruego.

-No puedo.- me mantuve fuerte en mi decisión.

-Deje el basketball... no he vuelto a ver a nadie de la secundaria. Yo... yo no puedo hacer nada bien desde que te fuiste, por favor... solo escucha.

-Mira. Si quieres mi perdón esta bien. Solo... no quiero que nos volvamos a ver.

-Kise, por favor. Te necesito... te lo ruego...

-Kuroko. Yo... te ame y te ofrecí todo lo que tenía, a pesar de ser destinados, quería ganarte a ti y no solo a nuestros instintos, pero... a pesar de todo, solo te pedí una cosa y...

-Lo se, lo se... fue un error. Él era mi mejor amigo y fue curiosidad, se que traicione tu confianza, se que no merezco tu perdón, pero te lo suplico. Estoy solo... no puedo seguir de esta manera, te he buscado desde ese entonces y... por favor.

Los sollozos se volvieron en llanto y los susurros en gritos ahogados, sentía el miedo transpirar por su cuerpo y la desesperación viendo su rostro.

-Porque yo? Ellos también pueden ayudarte.

-Te digo la verdad, perdí el contacto con todos... desde...

-Desde?

-Perdi todo, lo digo en serio. Si no me perdonas, por lo menos escúchame, te prometo que si aun así no me quieres a tu lado... yo desaparecere.

-Mi decisión sera absoluta.

-Si... esta bien.

-Bien, vamos...

Salimos de la escuela. Ese día era el reencuentro de ex estudiantes y la verdad rogaba por que no viniera, pero al final terminamos en esta situación.

Llegó al salón algo exasperado y trate de evitar el contacto, pero el se acerco de manera firma hacía mi. Y por no hacer un escándalo después de escuchar el como insistió en hablar conmigo, nos fuimos a un lugar más solitario.

Había visto solo a Midorima y a Momo, así que irnos sin despedirnos no me causaba inconvenientes y además me ahorraba el problema de los otros 3.

Lo lleve a mi auto y en silencio el subió. El camino fue de igual manera, ninguno decía nada. Llegamos a mi departamento y el de igual manera me siguió.

Hora Dorada (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora