Por supuesto que Su Min había reconocido esa mirada, y aquel rostro. Y aunque él no la estaba mirando, había algo que la hacía sentir descubierta, o como si alguien la estuviera observando. Sin embargo, no podía enlazar aquel sentimiento con el chico que se encontraba tan cerca de ella.
Uno de los chicos se acercó al desconocido.
—Uhm... esto está lejos, aunque no recuerdo cual bus debes tomar... —dice el chico de espalda ancha que se hacía llamar Jin. Se rascaba la nuca y desde donde pudieras verlo, lucia como un modelo posando. Era bastante guapo y atraía siempre la atención de quien lo mirara. —
Jungkook, ¿esta... esta no es la dirección donde vive la chica que te gusta?Jungkook frunce su ceño y voltea a ver al chico de ojos azules con una expresión severa. El se acerca y toma el papel que le extiende Jin y lee detenidamente la dirección. Manda con fuerza y siente algo de enfado al ver que la dirección si era de la chica que le gustaba, lo que no sabía era qué hacía el con su dirección.
—¿Por qué necesitas saber donde vive ella? ¿Qué eres de ella? –pregunta Jungkook pronunciando las palabras rápidamente y le estaba generando cierta molestia el tener aquel chico frente a él. Simplemente estaba celoso. Pero eso no lo volvió aun más loco de rabia, sino las palabras que fueron dichas por el chico de ojos azules.
—Esa información no es de tu incumbencia, niño.
El ambiente se hizo aun más pesado en un parpadear de ojos y aunque Su Min no estaba prestando atención atentamente de lo que decían por estar pendiente de la cara del desconocido, dentro de su ensimismamiento, la palabra niño le llamó la atención. Nadie llamaba niño a Jungkook, aunque eso fuera cierto, nadie, excepto su familia y sus amigos que podían llamarlo como quisieran pero cuando aquella palabra salió sin ninguna precaución de un chico al que ni sabían su nombre, la furia de Jungkook creció como un llama a la que le tiraron más leña.
—¿Qué dijiste, idiota? –su voz subió de tono al mismo tiempo en que dio dos pasos más cerca de él. Su voz se oyó fuerte y algo amenazadora. La rabia destellaba en ojos de Jungkook, las venas de su cuello sobresalían, al igual que la de sus brazos por la fuerte presión que hacía con sus manos al cerrarlas en un puño.
—Hey, cálmate hermano. –lo detiene Jin con una mano en su pecho, que en respuesta Jungkook le dedica una mirada llena de rabia, pero Jin sabía que solo eran impulsos innecesarios. Yoongi miraba atento y listo por si debía actuar para parar al más menor; Jungkook.
—Hyung. –Pronuncia Jungkook con sus dientes apretados, lanzándole una mirada dura sobre él. Una mirada que a cualquier mujer haría correr de miedo pero que a Jin no le causaba ni lo más mínimo pues ya estaba acostumbrado. Jungkook, al igual que Su Min, aunque no eran hermanos de sangre, compartían de alguna manera un gran temperamento.
Amigo, cálmate, yo solo quería llegar a su casa porque su familia se ha ofrecido a dejarme quedar. A diferencia de ustedes que parecen conocerlos, yo no, así que disculpen si he causado algo de confusión, pido disculpas. –El chico de ojos azules se inclina y muestra con su reverencia, que siente sinceramente el revuelo que ha causado.
—Explícate bien, ¿cómo que se han ofrecido a dejarte quedar? ¿Eres familiar de ellos? —
pregunta Jungkook con algo de sequedad y fastidio en sus palabras, pero ya descansando sus manos a los costados de su cuerpo.—Bien, vengo del extranjero, pero no tengo familia aquí y vi que ellos habían puesto un anuncio en una de las páginas donde la mayoría de estudiantes buscan alojamiento en casas familiares. Ellos me aceptaron, y aquí estoy. —explica con tranquilidad y al final parece provocar que Jungkook quitara su cara de "Quiero matarte" a una de "Uh, la he cagado". El chico de ojos azules sonríe, demostrándole que fue absurdo de su parte la pequeña escena de celos.
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ーwinter bird; pjm♡
FanfictionDos lágrimas diáfanas, lentas por sus mejillas resbalaron. Las palabras del ángel, sin ser pronunciadas pero que Jimin las había captado por la firmeza de su mirada, una realidad que le sacudió como un torbellino y sintió ser lanzado lejos de Su Min...