El mensaje del bosque

Capítulo 15 - La última esperanza

- ¿Qué te propones, Darien?- le preguntó Rosalynn entrecortadamente, no habían dejado de correr.

- Sólo hay una posibilidad de que todo lo que hemos hecho no haya sido en balde...- y dicho esto, empujó las puertas del aula de informática y entraron con violencia, interrumpiendo a todo el club de diseño gráfico, sobresaltándoles.

- ¿Qué hacéis aquí?- les preguntó el presidente.

Rosalynn le enseñó la acreditación de audivisuales.

- Es una emergencia.- dijo ella.

Darien ya se había hecho con el primero ordenador que vio libre y lo había encendido sin pedir permiso. El presidente del club se encogió de hombros y volvió a sus quehaceres, mientras los tres se habían agolpado alrededor de Darien, que ya había conseguido entrar en internet, aunque iba muy lento. Tecleó algo en la barra de direcciones y le dio a enter. Ante ellos apareció una página web que todos reconocieron.

- Greenpeace...- murmuró Brenda.

- Exacto... si hay alguien que pueda detener a Dawson, son ellos...-

- ¿Cómo haremos para ponernos en contacto con ellos?- preguntó Bruno.

- Les mandaremos un e-mail, estoy seguro de que la dirección está por aquí en alguna parte...-

Y se pusieron a abrir y cerrar menús de la página web hasta que lo encontraron. Brenda lo apuntó en una libreta.

- Será mejor que vengáis todos a mi casa a escribirlo, porque al ordenador de nuestro club no llega la conexión a internet  y ya hemos molestado bastante aquí.- dijo Rosalynn. Todos estuvieron de acuerdo, apagaron el ordenador y les pidieron disculpas a los del club de diseño gráfico por haber interrumpido así sus actividades.

Volvieron al club, ya habían llegado los otros miembros, y estaban todos ansiosos por empezar... aunque al verles legar tarde con esas expresiones de preocupación en sus rostros, se inquietaron.

- Lamentamos mucho el retraso.- dijo Rosalynn sonriendo un poco para tranquilizarles.

- Siento deciros que tenemos una mala noticia que daros...- empezó Brenda.- No quisiera ser yo la que os lo comunicara, pero es mi deber como presidenta...- hizo una pausa y miró a sus amigos, como si les pidiera ayuda.- ... mucho me temo que el alcalde... le acaba de conceder el permiso a la empresa de mi padre para talar el bosque y edificar ahí.-

Todos ahogaron exclamaciones de horror e indignación.

- ¡Pero eso es injusto!- exclamó Irina.- ¿Es que no ha servido de nada las diez mil firmas que recogimos?-

- Al parecer no, Irina... pero no vamos a quedarnos con los brazos cruzados y ver cómo Dawson destroza nuestro bosque...- dijo Darien.

- ¿Y qué podemos hacer si ya tiene el permiso?- preguntó un chico.

- De momento seguir protestando...- dijo Bruno.

- Sí, y vamos a enviarle un e-mail a Greenpeace para pedirles ayuda...- dijo Brenda.- Con un poco de suerte nos contestarán...-

El club se sumió en un silencio muy pesado, estaban todos cabizbajos, tratando de asimilar lo que acababan de decirles. 

- Pero no queremos desánimos...- añadió - Más que nunca ahora tenemos que alzar nuestras voces y poner todo nuestro empeño en detener esta locura. Mañana, martes haremos otra protesta por la tarde, y si es necesario seguiremos protestando el resto de los días hasta el viernes, que es el día de la tala...-

- Venga, no pongáis esas caras, Brenda tiene razón.- dijo Darien y ella lo miró, sorprendida de que le apoyase.- Hemos perdido una batalla, pero no la guerra... y vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para salvar el bosque.-