Capitulo 28.

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DEREK

Barbara era la chica más inusual que había conocido, solo ella podía ser feroz y tierna a la vez, inocente pero muy sensual, y me tenía a sus pies, me sentía casi como un cachorro comiendo de su mano, y lo mejor de todo era que me importaba un carajo, por fin había encontrado mi chica ideal y no veía la hora de llevarla conmigo de la mano a todos lados.

Deje a mi linda chica en su departamento, con la odiosa de su mejor amiga, me ofrecí a recogerla al siguiente día, quería llegar con ella a la universidad, pero Barbie dijo que se iría con Sindy, que no quería herir sus sentimientos... y a mí me importaba eso un carajo!.

Estaba bajando de mi camioneta en el estacionamiento de la universidad, aún no cerraba la puerta del auto y estire mi mano para tomar mi maleta, unas manos de mujer, lo supe por lo pequeñas que eran, cubrieron mis ojos y sonreí como idiota pensando en lo linda que era mi pequeña Barbie.

BARBARA

Sindy se estaba tardando, parece que las vacaciones la habían vuelto lenta para conducir y tuve que apurarla, quería tener al menos un pequeño momento con Derek antes de entrar a clase.

Llegamos a la universidad y el estacionamiento estaba atestado de autos, ella tuvo que dar algunas vueltas en el lugar para encontrar un espacio y entonces pude ver desde lejos el techo de una camioneta negra, yo conocía ese auto, era el auto de mi Derek.

Sindy estacionó su viejo Ford dos filas detrás de la camioneta de Derek, apenas ella apago el auto solté mi cinturón, me di vuelta para tomar mi maletín del asiento trasero y baje apresuradamente del vehículo.

-Ahhh el amor!-, Sindy lo dijo casi cantando y yo sonreí como idiota por lo que ella había dicho.

Camine en dirección al auto de Derek mientras planeaba la mejor forma de sorprenderlo y decirle que lo había extrañado la noche anterior.

DEREK

Tenia demasiadas ganas de darle un beso, ella estaba ahí, detrás de mi con su inusual jugarreta, pero yo estaba ansioso por mi Barbie, me di media vuelta sin siquiera verla y la bese en los labios.

Pero que sucedía con Barbara ese día?... esa forma de besar tan afanosa.. y desde cuando babearme medio rostro hacia parte de nuestros espectaculares besos???.

BARBARA

Me acerqué a la camioneta de Derek, tenía mi mejor sonrisa en los labios, ansiaba verlo y perderme entre sus brazos.

Iba a dos autos de diferencia cuando lo vi, estaba junto a la puerta de su camioneta... Y BESÁNDOSE CON CELESTE!!!!!!

-Derek!-, grite con todas mis fuerzas.

DEREK

El grito de Barbara diciendo mi nombre me descoloco... si ella está ahí gritándome, a quien se supone que estoy besando?.

Me separe rápidamente para ver que había estado besando a la fastidiosa de Celeste... pero que diablos?.

BARBARA

Derek se separó de Celeste al instante en que escucho mi aullido mortal.

-Que estás haciendo Derek?-, le pregunte histérica.

-Ehhh, yo..., yo....!-, el muy tarado se había quedado sin voz o que?... di algo por favor!.

-Que no viste Barbara?, nos estábamos besando y tú acabas de interrumpirnos-, si los ojos de Celeste pudieran lanzar llamas yo hubiera ardido en el instante.

-C-como?-, yo miraba a Derek, ella me importaba un carajo, pero necesitaba oír de su propia voz lo que estaba sucediendo ahí.

DEREK

Barbara estaba que echaba humo, por un instante había vuelto a ser la pequeña odiosa que me miraba con odio, así como antes, como antes de ser ella y yo.

Me quedé helado, por un momento volví a sentir el mismo malestar interno que sentía cada vez que Barbara me decía que me odiaba, mi corazón palpitaba fuerte y no encontraba las palabras para explicarle lo que había sucedido, necesitaba poder decirle que todo era un mal entendido, pero ella seguía ahí con sus acusadores ojos sobre mi impidiéndome articular palabra y sentí como si mis neuronas se hubieran congelado.

Celeste le dijo que nos estábamos besando y ella nos había interrumpido, y su rostro se transformó, Barbie paso de estar rubicunda a ser tan pálida como un papel.

-C-como?-, su voz se había escuchado débil y tambaleante.

-Barbara no es lo que piensas...-, hice el esfuerzo por empezar a hablar, mi voz sonaba igual que la de ella, temerosa, pero Celeste volvió a abrir su inmunda boca para terminar de arruinar las cosas.

-Si Barbara, no es lo que piensas, es aún mejor, sus besos son mejor de lo que puedes imaginarte-, esa arpia escupía veneno y Barbara, mi Barbie empezó a alejarse a la mayor velocidad en la que jamás la había visto correr.

Algo ardió en mi, el infierno se había desatado en mi interior, sentí como la rabia se apoderaba rápidamente de mi y algo se estalló en mi cerebro haciéndome actuar sin pensarlo.

Tome a la arpia venenosa que tenía enfrente por los brazos y la zarandee.

-Estas loca!-, le grite,
-que demonios pasa contigo?-, mi respiración se había agotado y Celeste mi miraba con expresión de horror,
-demonios!!!, tienes idea de lo que hiciste?, ahora ella me odiara-, mientras le gritaba la muy tarada había empezado a llorar, pero ya estaba harto de ella, harto de que me hostigara todo el tiempo, harto de decirle de mil formas que ella no me interesaba, harto de que siempre que estaba cerca me arruinara las cosas con Barbara.

-Que sucede contigo Hyles?, suéltala!-, me dijo Cameron dándome un fuerte empujón en el pecho.

La presencia de mi amigo me hizo volver en mi, libere a Celeste y la mire con odio.

-Aléjate de mi me entiendes?, no te quiero cerca-, le dije a Celeste mientras le apuntaba con mi dedo.

-Vete Hyles!-, me dijo Cameron dándome otro empujón.

Cameron es mi amigo, no podía enojarme con el y menos por ella, respire profundo, tenía que encontrar a Barbara, mire el reloj en mi muñeca y ya estaba llegando tarde a clase, estaba seguro que ahí encontraría a Barbara y fui a toda prisa hasta el salón.

SOLO POR TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora