Te habías vuelto tan frío
que solías explotar después de un te amo.
En cambio, yo tenía miedo
...porque tú ya no eras el mismo hombre del cual me había enamorado
en medio de la oscuridad.
Te perdiste y me estabas perdiendo, y nada de eso te importaba.
Yo no lo quería aceptar.
No deseaba que me estés botando así de tu vida.
Me costó mucho saber qué quería estar en ella para que tú hicieras eso.