Harry Potter || One Shots

L U C I U S [XXIV]

Advertencia: -

Sus pasos eran lentos y cansados, la práctica de Ravenclaw había sido extremadamente tediosa y extrema, pero necesitaban ganar e próximo partido contra Gryffindor, así que ni ella ni los demás se quejaron ante tanta exigencia. Para su mala suerte los leones tenían un nuevo cazador y era el mejor que habían visto en años, un tal Potter. De todas maneras, su equipo no era malo, pero sí tenían que darlo todo la semana entrante y demostrar que no solo eran buenos en los estudios.

Adelaide bostezó ampliamente sin molestarse en cubrirse la boca y sonrió para sí misma al saber que ya podría irse a dormir, tal vez más tarde o al otro día comería algo, en aquel momento no tenía fuerzas y un descanso le haría bien. Y en el instante en el que iba girar por uno de los pasillos para llegar a su torre, unas grandes manos la tomaron por detrás y la pegaron contra su anatomía, el pánico se apoderó por un momento en los ojos de la chica hasta que al bajar la mirada notó un característico anillo en aquellas manos y cuando se zafó del agarre, escuchó una risa grave y burlona.

—Me asustaste, Malfoy —Le reprochó golpeando su pecho sin causarle daños, sólo jugueteando, de todas maneras le miró con el ceño fruncido que no duró mucho tiempo ya que el peliblanco la tomó de la cintura firmemente, y al ser ella considerablemente más baja que él sus pies quedaron colgando en el aire. —¡Lucius! —Colocó sus brazos al rededor de los anchos hombros ajenos y le besó la nariz, sacando una media sonrisa al chico, que ya de por sí no sonreía demasiado, y aquello por más mínimo que fuera la hacía feliz.

—Te extrañé —La miró unos segundos a los ojos, admirando la belleza de su amor prohibido y luego la besó con necesidad, apretando un poco más su cintura, cerrando los ojos lentamente. Poder besarla, estar con ella le relajaba por sobremanera, dejar de fingir le hacía bien.

—Yo igual —Le respondió sonriendo en medio del beso, y ni bien tocó el suelo, ella lo besó repetidas veces. —Pero muero de sueño, Lu... —Dijo rompiendo las ilusiones ajenas de poder cenar solos junto al lago. Y como era de esperarse, él rodeó los ojos como el terco que era y con cuatro simples palabras enojó a Adelaide; "Siempre es lo mismo".

—¿Entonces es mi culpa? ¡Lamento estar cansada, Lucius! —Se alejó de él y cuando iba a hablar, ella no lo dejó, sino que soltó todo lo que tenía dentro. —¡Yo no soy la que te esconde! ¡No soy la que te tiene en segundo lugar! —Y quiso que la tierra lo tragara cuando empezó a gritarle, pero él no era de las personas que iban a soportar una escena así, por lo que la chica se sorprendió cuando él la tomó del brazo y la arrinconó contra la fría pared y la miró serio, Él no iba a dañarla, ambos lo sabían, no podría ni aunque quisiera.

—¿Piensas que yo quiero esto? —Sus blancas perlas estaban tan apretadas que Lucius sintió punzadas en su cabeza, sin embargo, no dejó de hacerlo. Estaba furioso, quería destruir todo pero no por ella, sino por él, por ser tan cobarde frente a su padre, frente a su amor. —¿Que me gusta no estar contigo?

Adelaide lo miró con los ojos al borde del llanto, aquel tema siempre terminaba con ella llorando cual niña pequeña porque el no demostrar su amor los destruía y el saber que jamás estarían juntos los mataba. Y sin pensarlo, Lucius correspondió al instante cuando la chica lo abrazó fuertemente comenzando a llorar sobre su pecho, tenía que entenderla. Y así pasaron los minutos, así también algunos alumnos de Ravenclaw que miraban todo aquello extrañados y hasta susurrando, sin embargo a ninguno les importó, no en ese momento. Se sintió aliviado cuando de a poco la castaña dejó de llorar y pasó a simplemente abrazarlo, a sntir los latidos de su corazón que latían por ella.

—Nunca dudes de lo mucho que te quiero, Ade —Con semblante serio y sus manos frías se deshizo de las lágrimas de su amada y la miró a los ojos pero ella sólo agachó la mirada y se alejó de él.

—No, vete —Negó con su cabeza pasando las manos por su rostro que se encontraba rojo y algo hinchado, y aún así a él le pareció hermosa. —Narcissa debe estar buscándote, y ya nos vieron algunas personas, vete.

—Perdóname —Pero de nuevo se alejó cuando este se acercó con la intención de besarla, la verdad era de que ya no podía soportar aquello, simplemente lo ignoraba porque cuando, el año entrante, su estadía en Hogwarts termine ellos no iban a verse nunca más. —Adelaide...

—Iré a dormir, hasta mañana, Lu —Y como pudo y trató, le regaló una sonrisa que hizo sentir mejor al chico a pesar de saber que seguía mal, ellos estaban mal.

—Te amo.

Y sin más, ella desapareció por los pasillos dejándolo sólo y con ganas de desaparecer por siempre.

N/A:

¡Hola! Ya estamos por llegar a las 4000 lecturas, ¡Qué locura! En fin, ¿Qué les parece si hago una mini maratón? Ustedes sólo tendrían que comentar qué quieren acá abajo.

*Familia Potter.

*Familia Malfoy.

*Familia Weasley.

*Merodeadores.

*Seguir algunos One Shots en los cuales me hayan pedido segunda parte.