X. Confesiones

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Luego de la actuación inicial en el campeonato de China, la emoción de Victor no había terminado y eso implicaba que tampoco había dejado de felicitar y alabar la actuación del nipón

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Luego de la actuación inicial en el campeonato de China, la emoción de Victor no había terminado y eso implicaba que tampoco había dejado de felicitar y alabar la actuación del nipón.

—Yuri, ¿qué tienes?

Al salir del recinto, el menor había tomado una actitud un poco extraña a pesar de haber ganado el primer lugar del programa corto, claro, eso no significaba que tenía asegurado el oro pero estaba un paso más cerca de llegar al GPF y su actitud no parecía denotar ni rastro de alegría.

—Yuri, ¿escuchaste lo que dije?

—Perdón, Victor, no escuché —atinó a responder un poco sorprendido mientras entraban a la habitación del hotel—, ¿podrías repetirlo?

—Yuri —dijo en un quejido—, ¿qué tienes? ¿Acaso no estás contento por tu resultado?

El menor dejó sus cosas en una silla que estaba junto a un escritorio y se sentó en la cama, pensativo y sin responder.

—Yuri, de nuevo no respondes, ¿acaso tú, estás enfermo? —Cuestionó nuevamente el mayor ante la falta de respuesta de su alumno—. ¡Yuri! —Exclamó preocupado.

—Perdóname, Victor, es que... —dudó— me preocupa mi resultado.

El ruso se acercó hasta él y se sentó a su lado un poco confundido ante la declaración final del japonés.

— ¿Preocupado? ¿Por qué? —cuestionó nuevamente—. Tuviste un desempeño impresionante y además, quedaste en el primer lugar del programa corto, ¿por qué eso habría de preocuparte? —. Estaba confundido pero al hacer esa última pregunta comprendió—. ¡Oh! Entiendo, tienes miedo de no poder replicar tu resultado en el programa libre, ¿no es así?

El menor no contestó.

—Yuri, mírame —pidió ante el silencio del nipón—, entiendo que estés preocupado y que sientas que no podrás hacerlo o que decepcionarás a todo el mundo si mañana no consigues el oro.

—Gracias Victor, tus palabras me ayudan mucho —confesó sarcástico ante las palabras del mayor.

—No, Yuri, perdón, no quise sonar así pero... —pausó para tomar el mentón del menor para que lo viera a los ojos—... debes tener fe en ti mismo, incluso más de la que yo te tengo —sonrió al ver que la mirada dura y preocupada del menor se suavizó—, no es justo que luego de esta increíble actuación de hoy te tengas tan poca fe y decaigas de nuevo por inseguridades que sabemos que no te hacen bien, por favor Yuri, hemos llegado muy lejos como para que dejes que te dominen justo ahora.

Yuri simplemente lo observó y escuchó todo lo que dijo, intentaba no llorar y procesar adecuadamente todas y cada una de las palabras que Victor decía así que sólo asintió y sonrió.

— ¿Qué te parece si salimos a cenar? —cuestionó animadamente luego de sentir que Yuri se tranquilizaba.

— ¡No! —Exclamó separándose bruscamente del mayor y levantándose de la cama—. No me malinterpretes pero no quiero que vuelva a suceder lo de anoche.

Sasha |YOI| [Victuri] ||En Pausa||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora