treinta y tres.

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Mis ojos están tan hinchados, mi cabeza que no para de dar vueltas, mi cuerpo frío y toda mi atención va hacia la nada. Mi aspecto era desagradable, tenía ojeras que se podían notar a kilómetros, mi ropa oscura y mi pelo alborotado.

Señorita Morton...señorita Morton.—la voz de la preceptora hizo que saliera de mis pensamientos—. Preste atención, estamos a días de la entrega de diplomas y medallas, es muy importante.

Lo siento.—contesté cabizbaja.

Seguimos con el ensayo que en mi parecer se hizo eterno, el lado positivo es que no tuvimos clase y menos mal ya que no iba a cazar nada en ninguna materia.

Al terminar y salir del establecimiento nos encontramos con Ashton que amablemente nos pasó a buscar.

¿Cómo están las futuras egresadas?—preguntó mientras caminábamos.

Bien, un poco nerviosa,pero bien. Hoy Alex me va a acompañar a elegir los zapatos.—contestó Sabrina con entusiasmo. Ashton me quedó mirando esperando mi respuesta y le negué con la cabeza.

En el camino los hermanos siguieron hablaron mientras yo los escuchaba,no emitía sonido alguno. Cada tanto me miraban,pero no me preguntaban nada, creo que es más que entendible el momento que estoy transitando.

Me dejaron en la puerta de mi casa y al terminar de saludarlos Jack apareció con las manos metidas en sus shorts. Sabrina y Ashton también saludaron al rubio y así se marcharon, dejándome cara a cara con Jack.

Hola.—me sonrió.

Hola Jack.

— Quería venir a pedirte disculpas por lo de anoche y preguntarte si querías remediar la salida.

— También te pido disculpas, no debí contestarte así. Y con respecto a la salida...no estoy de ánimos.—suspiré.

Lo sé, me contó Sabrina, no hace falta que me expliques. Y con más razón tenes que salir,hay que cambiar el clima.

No tengo ganas de nada.

Vamos, dale. Y después podemos pasar por una disquera.

¿Dónde quieres ir?—pregunté.

Abrieron una rotiseria cerca de casa hace unos días y la comida es riquísima, podemos ir ahí y comer en un parque o a donde gustes.— acepté aunque muchas ganas de comer no tenía.

Compramos una hamburguesa para cada uno, fuimos al parque que quedaba a unas cuadras y comimos tranquilos ahí.

Son mejores que las del burger king.— comentó Jack.

Decir eso es como traicionar a tu amiga.

Admití que son más grandes y más ricas.

Nunca.

Reímos y terminamos de comer las hamburguesas para así caminar por el parque y bajar lo recién comido.

Hablamos de su trabajo, de su abuela que tuvo que hacerse un estudio y que por suerte salió todo bien, como así también de Luke y su casi nueva novia.

Como nos aburrimos de estar en el parque marchamos hacia otro lado. Comenzamos a caminar sin saber bien a dónde íbamos, hasta que nos topamos con una estación de servicio y supimos que estábamos en el centro de Sidney.

Jack aprovechó y fue al baño de ésa mientras yo lo esperaba afuera de brazos cruzados.

Mi mirada se centró en una persona bastante familiar, hasta que al forzar un poco más la vista pude ver a Michael salir del hospital que estaba frente de donde me encontraba. Él, al verme, se acercó con una sonrisa y al verme me abrazó.

verdad o reto || cthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora