verdad o reto || cth

cinco.

Martes.

Mi hermano me levantó a almohadazos debido a que se me estaba haciendo tarde para ir al colegio,sinceramente no tenía muchas ganas de ir,pero lo que si tenía era frío y hambre.

- Te preparé waffles, pero dudo mucho que llegues a degustarlos, vaga. - y otra vez el mismo almohadon  chocó contra mi cabeza. Que lindo hermano que tengo.

- Agh, que pereza. - me senté para luego estirarme y verle la cara a mi hermano. - ¿Qué tanto me miras -

- Hay humedad y tu pelo lo sabe. - hizo un chasquido con sus dedos para señalarme, yo sólo lo fulminé con la mirada.

- Me tomaré un baño y luego voy a probar tus waffles, espero que no esten envenenados. - me levanté de mi cama y agarré la ropa que usaría después de tomar una cálida ducha.

Jean azul, buzo morado y unas Converse en tono negro, así me alisté para ir al colegio,también me coloqué un poco de maquillaje, ya saben,lo básico.
Se preguntarán por los waffles,bueno, los terminé comiendo en el transcurso del camino, para ser específica en el auto de mi hermano, ya que él (a veces) me acompaña al colegio.

- Cuídate perezosa. - me saludó mi hermano desde su Siena gris.

- Adiós. - sonreí. - Por cierto, ricos waffles. - le hice una seña levantando mi pulgar mientras caminaba hacia la puerta de entrada. Todo muy normal hasta que choqué con alguien y mis apuntes se  desparramaron en el suelo.

- Mierda. - susurré - Mis apuntes de Proyecto - negué con la cabeza mientras recogía las hojas escritas a puño y letra, con dedicación y esfuerzo, todo para que se estropeen en un charco de agua sucia o con la mugre del suelo.
Vi como unas manos agarraban la misma hoja que estaba por agarrar, pero mi dirección cambió a unos brazos bien formados, una boca bien carnosa y unos ojos como el café puro. Una persona, Calum.

- Lo siento, no te vi - se incorporó y me tendió algunas de las hojas que pudo recoger. - Mejor dicho...no te vimos. - El moreno desvió su mirada a una niña con trenzas muy bien hechas.

- Oh,hola Calum - me incorporé.- hola... - me quedé en silencio por unos minutos, debido a que no sabía cómo era el nombre de la pequeña.

- Anabella. - contestó la niña que al sonreír se notaba que le faltaban dos de sus dientes.

- Hola pequeña. - acaricié su mejilla y ella se rublrizó.

- Es mi hermana menor. - soltó Calum, con la mochila de su hermana colgada en su hombro.

- No sabía que tenías una hermana menor. - sonreí sin sacar mi mirada de la niña. Es muy hermosa y súper dulce.

- Calum ¿es tu amiga? - preguntó incrédula Anabella. - como esas que traes a casa y por un momento te olvidas de mí. - se cruzó de brazos con el ceño fruncido.

Lo deschavó.

- Eh... - Calum se rascaba la nuca.- Vamos Anabella, se te hace tarde. - quizo apurarse el moreno.

- Pero ¿es tu amiga? - siguió insistiendo.

- Nos conocemos por unos amigos que tenemos. - le contesté a Anabella, brindandole una sonrisa.

- Ah... ¿y vendrás a mi casa? - me preguntó parpadeando muchas veces,luciendo unas largas y delicadas pestañas. Ésta niña el día de mañana no necesitará rimel, créanme.

- Anabella, basta. - dijo Calum tomando su mano. - Lo lamento, ella es así siempre. Nos vemos luego y perdón por tus apuntes, si quieres después te los paso en limpio.

- No hace falta Calum. - sonreí.- Nos vemos Anabella, un gusto haberte conocido. - estreché mi mano con la de ella, nos separamos y vi como se iban hacia la primaria que estaba a la vuelta de la secundaria.

Mi día en el colegio se pasó muy lento, demasiado. Sabrina no asistió ya que tenía un ataque al estómago, en mi opinión, todo esto es a causa de una cosa que Sabrina nunca va a dejar por más que éste le arruine la vida, el chocolate.

Cuando llegué a mi casa, me preparé una sopa de sobrecito y empecé a hacer la tarea que me habían mandado. Estaba haciendo mi gráfico para matemática pero hago una pausa y miro mi celular, debido a una notificación en Instagram.

@CalumHood ha comenzado a seguirte.

Antes de comenzarlo a seguir opté por stalkearlo, tenía muchos likes y comentarios, a decir verdad es un buen candidato.
La foto que más me gustó fue la que posteó para el cumpleaños número siete de Anabella, ambos abrazados y sonriendo, me pareció super dulce, Anabella sin algunos de sus dientes de leche, mostrandolos sin miedo,es más, con orgullo.
Subí arriba de todo y apreté "seguir" sin pensarlo demasiado.

No pregunten por qué, pero me acordé del reto que tenía que cumplir, ya saben, el del chupón en el cuello de Calum. No tengo la menor idea de cómo hacerlo,ni la situación, NADA. Con respecto a la reacción de Calum pienso que no le va a afectar, muchas chicas le deben hacer uno que otro todos los fin de semanas. Supongo por lo que dijo Anabella eso que lleva "amigas" (con muchas comillas) a su casa y a ella no le presta atención. Ahora llego a la conclusión de que Calum es el típico mujeriego que no se conforma ni con una,ni con dos y está en todo su derecho, digo, está soltero.
Está soltero ¿no?