Un viaje de verano, cuyo objetivo es cambiar de ambiente para conocer lo que hay en otro lugar desconocido, y en el que predominará la diversión. Sin embargo, toda diversión trae consigo un resultado. Este puede ser positivo como negativo, que afect...
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🇧🇷
•Jinyoung•
—¿Irás o no?— Pregunté a Jaebum, quien se encontraba acostado en el sofá.
—Tal vez te alcance luego. Quiero dormir un poco.—Contestó cerrando los ojos.
Negué con la cabeza par de veces, y salí rumbo a la playa.
Antes de llegar al lugar me detuve unos minutos en el bar a pedir algo de tomar, pues la temperatura está alta. Al recibir lo ordenado caminé hasta mi destino. No tardé mas de un minuto, y al llegar caminé hasta un grupo de personas jugando Voleibol.
—Voy tras quién pierda.— Pedí mi turno. Como ya había jugado varias veces, conocía como logras entrar al juego.
No tardó mucho en que saliera uno, es decir que me tocaba entrar a jugar. Me quité el polo que traía puesto y fui hasta el lado que me tocaba entrar, el cual era el contrario al que estaba parado. Cuando me coloqué donde debía estar, cubrí un poco mis ojos porque me molestaba el Sol, y al hacerlo de lejos vi una figura que se me hizo conocida.
— ¿Sooyun?— Murmuré y sonreí levemente.
—Deja de mirar traseros, y lanza.—Escuché decir a un chico al lado mío, causando que yo volteara a mirar. Él me miraba con una sonrisa pícara, y yo solo reí e inicié el juego.
Jugamos tres juegos antes de yo perder, y cada chance que tenía mi mirada se desviaba hasta dónde estaba Sooyun. Si, por estarla mirando perdí.
Salí del cuadro, permitiéndole la entrada a otro jugador. Busqué mi suéter, me lo puse y me dirigí hasta donde estaba Sooyun.
—¡Acábala!— Escuché gritar el chico que me había hablado antes, y volteé a mirarlo, y él reía.
Negué con la cabeza repetidas veces, y dirigí nuevamente mi mirada hasta mi destino. —Eso quisiera yo ahora mismo.—Murmuré y dejé salir una risilla.
Últimamente, cuando estamos trabajando me fijo mucho en ella. ¿Como no sentirme atraído a ella? Buen cuerpo, brillante personalidad, bonita sonrisa, algo escandalosa, pero eso es lo de menos.
Ayer cuando nos besamos no cabía dudas de que quería agarrarla y acabarla. Ganas no me faltaban. Pero no era el momento ni el lugar.
Reí levemente al recordar lo que me dijo anoche. ¿En serio creía que Jaebum y yo éramos pareja? Espero haberla sacado de la duda. Pues desde hace tiempo tenía ganas de besarla.
Llegué dónde ella antes de los esperado, pero ella no lo notó. Murmuraba algo mientras se acomodaba en su toalla, pero no logré a escuchar.
—¿Hablando sola?— dije, causando que se espantara. No pude evitar reír al ver su reacción.
