(Post Rain)
—Y... ¡corte! ¡Buen trabajo chicos, excelente escena!
Una sonrisa de suficiencia aparece en mi rostro con esas últimas palabras. Era la mejor en lo que hacía y eso, realmente me encantaba.
Con pasos decididos me dirigí hacia mi camerino a quitarme la ropa de esta escena. Dios, vaya que era incomoda y de mal gusto.
—S-señorita Mendes —y esa era la estúpida de mi asistente... cuál era su nombre? ¿Rosie? ¿Marie? Bah, tampoco es como si tuviera importancia— e-el resultado de la sesión de fotos q-que hizo ayer ya está.
—¿No puedes hablar sin tartamudear por una vez en tu vida? —blanqueo los ojos.
—Y-yo solo...
—No importa, haz que lleven el resultado a mi casa y... —observo su atuendo— cómprate nueva ropa, la necesitas.
—O-okay.
—¿Algo más? —enarco una ceja.
—No.
—¿Entonces que esperas para marcharte? ¿Una invitación?
—Ya déjala —Dylan Martin señoras y señores, mi mejor amigo— la pobrecita ha sido la asistente que más ha durado.
—Y aquí vamos.
—Deberías tratarla mejor, no seas tan mala con ella.
—¿Mala? Jah, no... simplemente muy sincera.
—¡La pobre va a terminar enferma de los nervios contigo!
—Eh... disculpen que los interrumpa, ¿ya me puedo retirar?
¿Acaso tenía memoria a corto plazo? ¡Ya le había dicho que si!
Agg, acababa con mi paciencia.
—Si, ya vete.
—Con permiso.
Y sin más, se retiró.
—En serio, Rain... deberías tratar mejor a las personas.
—Okay okay —suspiro— lo tendré en cuenta.
—Más te vale —sonríe y mira su reloj— ya es tarde, ¿te llevo a tu casa?
—Sí, vamos.
Al salir del estudio, los paparazzis y fans me recibieron, lo cual pasaba todos los días. Ya estaba acostumbrada.
Cuando eres la mejor, todos te aclaman y la sensación de ser el centro de atención era... magnífica.
—¡Rain, por aquí, mira a la cámara!
—¡Rain, ¿nos puedes dar un adelanto de la película?
Y como esos, muchos comentarios y flashes me acompañaron hasta el auto de Dylan.
—Uff, esto es sofocante.
—Si claro —rió— a ti te encanta.
—Mmm... si, tienes razón —sonrió y le guiño un ojo— ser el foco de cámaras y...
—¡Hola Rain! —visualice al chico de aproximadamente 16 años, corriendo hacia mi con su teléfono. Era obvio, quería una foto—. Oye... soy tú fan número uno, ¡amo todas y cada una de tus películas y me preguntaba si...!
—Lo siento, cariño —le digo mientras abro la puerta del auto— voy algo apurada.
—No te tomará mucho Rain, por favor.
Blanquee los ojos ante la insistencia, ¿que parte de voy algo apurada no entendía?
—Mira niño, no tengo tiempo para tomarme una foto contigo, en serio, ya márchate.
La siguiente mirada que me dirigió no fue igual a la primera. La admiración había pasado a ser odio y decepción. ¿Un fan menos tal vez? Bah, no importaba. Tenía millones más.
—Perra.
—Disculpa, ¿que dijiste?
Dylan, quien había estado viendo la situación en silencio.
—Le dije perra porque eso es lo que es. Una perra sin corazón que trata como basura a sus fans, ¿sabes? Por nosotros estás donde estás.
—No cariño, si estoy donde estoy es por mi talento.
—¿Talento? —ríe— de seguro te acuestas con los directores para que te den los papeles y...
Ya fue suficiente. Ese niño había colmado mi paciencia y yo, no me quedaría de brazos cruzados.
Mi mano impacto con fuerza en su rostro.
—Nadie, escúchame bien mocoso, nadie le habla jamás así a Rain Mendes, ¿quedo claro?
—Si, zorr...
Y antes de que dijera cualquier otra cosa, lo empuje haciendo que perdiera el equilibrio y cayera encima del auto de al lado.
Luego, lo único que sentí fue el flash de una cámara y el sonido de una fotografía.
Demonios.
...
—¿Qué es esto?
Mamá suelta la revista enfrente de mi escritorio. Perfecto, no me bastaba con mi aparición, para nada grata, en casi todas las revistas del país, si no que también tenía que aguantar las quejas de mi madre.
—Una revista —contesto obvia.
—No seas idiota, hablo del artículo.
~Rain Mendes, ¿el ángel o el demonio de la gran pantalla?~
Bufé al leer el enunciado de "The Billion".El acontecimiento de la noche anterior había creado millones de rumores sobre mi, mi comportamiento y mi fama.
Las cosas no podían ir peor.
—Mamá, fue culpa de ese mocoso, yo...
—¡No, Rain! Sabes perfectamente que no fue culpa de ese chico, ¡él solo quería una foto! —rechistó— ¿y tú que hiciste?
—¡Yo solo le dije que no tenía tiempo!
—Me estoy cansando, de ti, de tus malcriadeces y de tu mal comportamiento —bramó— yo no te he enseñado eso.
—¿Mal comportamiento? —reí— tienes que estar bromeando.
—No, no lo estoy haciendo. ¡Te estás comportando como una diva!
—¿Y acaso no es eso lo que soy? ¿La más reluciente y talentosa? Mamá, el dinero nos llueve gracias a mi. Deberías estar agradecida.
Me levante de la silla y camine hacia la puerta, no me quedaría a escuchar sus quejas.
—Alto ahí, ¡ni creas que te escaparás de esto!
—No me estoy escapando, mamá, solo no quiero escuchar estupideces.
Mi madre abrió la boca sorprendida, la había faltado el respeto y de eso estaba segura.
¿Qué si me importaba? Lo siento, pero no... hace tiempo que había dejado de hacerlo.
—Tienes que cambiar, hija... no eres la misma chica de antes.
—¿Cambiar? —enarque una ceja— ¿volver a ser corriente y vulgar?
—¿¡Tener valores es ser corriente y vulgar!?
—Me hace ser de nuevo la chica del pasado, mamá y te aseguro... que no quiero volver a serlo.
Mi hermano, quien al parecer llevaba rato escuchando la conversación, entró a la habitación con un claro gesto de desagrado.
Genial, más quejas.
—¿Por qué no quieres volver a serlo? —habló— ¿por qué en ese entonces no vivíamos en una mansión? ¿O por qué en ese entonces si éramos una verdadera familia?
—Ah, ¿disculpa? ¿Quien te dio derecho a meterte en nuestra conversación?
—Rain, déjalo.
—Lo siento, se me olvidaba que el idiota de mi hermanito es el único que nunca rompe un plato, que hace todo bien —reí— es cierto.
—Hija...
—Ya mamá, déjala. No vale la pena.
—No los soporto.
Y con esas últimas palabras, abandonó la habitación dando un portazo.
Justo ahora, todo era un caos.Rain en la galería
CRÉDITOS PARA MI HERMOSA AMIGA:Sofia Castillo😍
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Dead Wings
FantasyElla era fuego, pecado y avaricia. El odio, resentimiento y dolor. Dos mundos distintos, una misma solución.