Lleg* * Capítulo Nueve * *
Llegamos a casa y la chica se había cambiado. Era de noche, casi las ocho. Salió del cuarto vestida con unos shorts negros, un polo azul marino con un ancla de flores, una chaqueta negra y sus Vans negras. Se tiró a mi lado en el sofá. Estaba jugando en la XBOX.
-. ¿Tienes hambre? –pregunté-
Asintió con la cabeza.
-. Llamaré a la pizza y comemos algo o…
De pronto mi celular comenzó a sonar. Contesté.
-. ¿Hola?
-. Soy Sarah, cariño –dijo ella-
Me paré y caminé hacia mi cuarto, dejando a Memphis sentada.
Una sonrisa se formó en mi rostro al escucharla de nuevo.
-. ¿Vienes hoy?, estoy aburrida y tú sabes, podemos…
-. Allá voy –le dije de inmediato-
-. Okay, te espero…
Colgó y rápidamente me cambié un polo y agarré mis llaves. Salí a la sala.
-. Vuelvo más tarde, Memphis –le anuncié-
-. Pe-pero…
Era tarde, ya estaba bajando las escaleras a toda velocidad.
* - * POV MEMPHIS * - *
Bufé y me eché en el sofá.
¿Dónde se iba siempre con tanta prisa?
Humano imbécil.
Cuando venía después traía un desagradable olor a mujer y hombres, hombres que no eran él.
Cambié de canal. Bostecé. Tanía hambre. Apagué la televisión.
Me paré y fui hacia la cocina a revisar si había algo. Nada, absolutamente nada.
Maldije en voz baja. Me asomé por la ventana del departamento. Entonces sentí un agradable olor. Olisqueé. Volteé y salí del departamento, corriendo a toda velocidad hacia la calle.
Rubén no era el único que podía irse, además no le pertenecía, no era su mascota y… ¿era su mascota? Sacudí mi cabeza mientras el aire fresco chocaba contra mis mejillas. Agradable sensación.
Comencé a caminar siguiendo el olor. No era la primera vez que caminaba sola en las calles. En mi forma de gato ya había recorrido toda esa zona y aún más.
Olisqueé una última vez. Volteé la esquina, seguí de frente y volteé otra esquina. A lo lejos un cartel grande que decía ‘Pizza Hut’. Mi estómago emitió un gruñido, reclamando comida. Palmeé mi plano estómago y continué caminando. Al llegar me asomé por la ventana. Estaba lleno de personas. Pasé mi lengua por mi labio inferior al ver una pizza de pepperoni.
Sí, sabía todo eso porque pasé casi unos ocho años al cuidado de la señora Harrington, una amante de los gatos. Al descubrir mi caso, de que me podía convertir en humana, me adoró más. Me enseñó a leer, hablar, matemáticas, letras, ciencia, como comportarme, esas costumbres de humanos, etc. Me fui de su casa ya que era una gran carga, y ella no podía ni consigo misma. Pero siempre la quise como una madre.
Suspiré. Volteé a la derecha y me percaté de una mirada inocente sobre mí. Un pequeño humano me observaba con curiosidad. Bueno, hasta ahora todos me miraban con curiosidad o repulsión. Le dediqué una sonrisa leve.
Me sorprendí al no verlo acompañado de alguien mayor, los niños siempre estaban con sus padre o familiares adultos, no solos a las ocho de la noche y con tantos peligros además…
-. Qué bonita… -dijo la criatura pequeña en un susurro-
Pestañeé mientras me ponía de cuclillas.
-. Gracias –le dije- ¿qué haces sólo, niño?
-. Soy Jay y uh… estoy trabajando
Niño… trabajo… noche… peligro… ¿huh? No tenía concordancia.
-. ¿No deberías estar en tu casa?
Tenía una pequeña y colorida caja en sus manos y sus ropas estaban rotas.
-. Así es la vida –murmuró- hasta luego, señorita…
Sacudió su mano en el aire mientras se alejaba. Me saqué la chaqueta y corrí hacia él.
-. Hey, hace frío…
Sus ojos miel se iluminaron.
-. ¡Gracias!
Revolví sus cabellos negros azabache y me despedí de él con un beso en su frente. Se fue corriendo.
Jay…
Los humanos podían llegar a ser muy… um… adorables.
Algo en mi pecho mandó un choque eléctrico que me sobresaltó. Bufé y decidí volver a casa, además no tenía dinero. Demonios.
Aquí está el capítulo nueve, casi nunca escribo al final algunos comentarios, pero quiero agradecerles todo :3
Prometo hacer maratón en un tiempo :D
Gracias de nuevo y saludos, ojalá tengan un buen y bello día ♥
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Cat Girl (Rubius) (En edición)
Fiksi PenggemarFanfic de Rubén Doblas Gundersen, en edición porque los primeros capítulos están horriblemente redactados.