Capítulo VI: Marchito

176 22 2
                                    

     Capítulo VI: "Marchito"

     Extrañamente me quedé de pie en el comedor, saboreando las palabras de Andrea, reflexionándolas.

     Salí de mi trance al romper el vaso, no intencional, este simplemente resbaló.

     ¿Acaso él había pensado algo como; "y murió el puto amor y la puta conmovida que me había llevado a darle el puto abrazo"?, ¿o algo así? ¿desde cuándo pensaba así?, joder que sólo llevaban casi dos días de conocerse, ¿qué era eso entonces?, ¿calentura?, pero ¿y los latidos en sus oídos cada vez que el hijo de perra le besaba? ¡No podía ser cierto!

     Desechó la idea de estar enamorado, era estúpido, él ya estaba enamorado, claro que sí, de un niño que le había roto el corazón y el alma, pero aún sentía amor por ese niño; Nan. No podía estar enamorándose de otro tipejo sin siquiera conocerlo. Era tonto e ilógico.

     Me agaché a recoger los vidrios, sólo con mis manos. Luego de dejar el piso limpio y haber lavado mis manos para que las heridas se limpiaran, porque me hice daño.

    Suspiré y me dirigí al salón donde estaban todos conversando animadamente, Andrea estaba en una esquina enfrascada en una discusión con Demian. Yo me acerqué a Valentino.

    —¿Está bien? —Pregunté, por Andrea.

    —Sí, está mejor, dejó que le cure sus heridas. —Rio —fue graciosos ver como intentaba aguantar el dolor.

    Lo imagino, ella puteando a todo el mundo.

    —¿Te sientes tú mejor? —Pregunté esta vez por él. Me sonrió.

    —Sí, gracias por escuchar.

   —Estoy para servir —Dije.

    —Entonces, ¿te pondrías un mandil, obviamente sin nada abajo, y bailarías para mi? —Rodé los ojos y un tic se instaló en mi ojo derecho.

    —¡Te mato, ahora sí que te mato, hijo de perra! —Me lancé sobre Demian, intentando golpearlo, él ágilmente tomó entre sus manos las mías y las alejó de su rostro.

    —Cuidado, juguetito —Sonrió.

    —¡Juguetito tu abuela, malnacido! —Le grité en su cara, él sólo rio.

    Sentí las carcajadas a mi alrededor.

    —Son tan románticos —Escuché a Marlene. Bruja.

   Al momento de escucharla decir eso me solté, o por lo menos lo intenté, pero, obviamente, fue en vano.

   —¡Ya déjame! —Volví a gritar.

   —No, no lo haré —Sonrió con malicia, le observé en silencio. Sus ojos me transmitieron una ligera paz y creí sentir el olor a campo.

   ¿Qué tendrán sus ojos?, ¿Qué será?

   —¿Nos hemos visto antes? —Pregunté más calmado, él me abrazó y juntó su boca con mi oreja.

    —¿Estás coqueteando conmigo? —Preguntó juguetón, estuve a punto de propinarle una patada, cuando escuché un débil "tal vez".

    —¿Dónde? —Volví a preguntar.

    —Lo descubrirás con el tiempo, juguetito, pero si de verdad quieres saber, te daré una pista —Susurró, se acercó aún más a mi cuerpo. Todos nos observaban, pero pareció no importar —canción de cuna.

    ¿Canción de cuna?, ¿Qué diablos tenía que ver una canción de cuna en esta relación?, ¿relación?, ¿Qué relación?

    —Estás divagando —Sonrió, lo miré extrañado y me soltó, de pronto me sentí vacío, como si me faltara algo, Andrea nos observaba silenciosa, con una pequeña sonrisa orgullosa, esa maldita sabe algo.

    Demian nuevamente se fue a conversar con Andrea y yo me quedé de pie, como un idiota, pensándolo. No me cabía en la cabeza la frase.

    —Iremos a revisar las barreras, lo más probable es que tengamos que cambiarlas —Anunció Andrea —o que nos tengamos que ir de aquí —agregó. Todos asentimos.
    
    Desaparecieron por unos pasillos y Marlene se acercó a mi persona.

    —¿Sucede algo? —Pregunté.

    —Conocía a Andrea — Me interrumpió. La observé interesado —Se había enamorado de un humano, lo amaba con todo su ser, pero su familia no lo aceptaba, como a ninguno de los humanos y los separaron, al chico lo asesinaron frente a sus ojos, sin poder salvarlo. Fue horrible. Yo era bruja unida con un hermoso humano, y estando tantos años con él sanó mi corrupción, me volvió humana, cuando él murió, me pidió que cuidara de su alma, del pedazo de alma que me concedió y eso es lo que estoy haciendo —Sonrió melancólica —Demian, él no es muy abierto con las personas, a pesar de su actitud, pero estoy segura de que le sucedió algo similar.

    Un peso se instaló en mi pecho y un nudo se formó en mi garganta.

    —Dijo que aún seguía perdidamente enamorado de esa persona —La observé, el dolor en mi pecho de repente se me hizo insoportable, intenté sonreír.

     —¿Enserio? —Pregunté —¿y qué sucedió con ella?

    —Él, mi niño, él — Afirmó, oh, genial — Demian dijo, o por lo que me contó Andrea, que tuvo que dejarlo ir, que sufrió todo este tiempo y que ahora se encontraban más cerca que nunca —no quería hablar, de alguna estúpida manera quería llorar y Marlene no parecía darse cuenta de que me estaba rompiendo por dentro —y que estaba buscándolo para protegerlo, ya que al igual que Andrea y yo, su enamorado es un humano. Dijo haberlo encontrado y que estaba dispuesto a cualquier cosa para permanecer con él.

      Mi corazón se detuvo en ese momento, y sólo un sentimiento se instaló en él: Traición.

     No quería admitirlo, pero ya era tarde, cada célula de mi cuerpo, alma y corazón me lo gritaba: "Completamente enamorado de ese hombre", y ni siquiera sabía por qué. Recordé las palabras de Andrea: " Puedes engañar esto, —Apuntó mi cabeza — porque siempre es fácil confundirnos, pero ni a esto —Esta vez apuntó a mi corazón —ni a tú alma los puedes engañar, porque ellos tienen más poder sobre ti, que tú propia conciencia"

    Y nada tuvo tanto sentido como esas palabras en este preciso momento. Y lo entendí.

    Me sentía jodidamente ilusionado, traicionado y decepcionado, todo en un solo huracán de sensaciones. Deseaba largarme a llorar como mi hermana pequeña y que alguien acaricie mi cabello mientras me duermo.

     —Permiso —Dije de manera ahogada y cuando estuve a punto de marcharme a mi cuarto una voz llamó mi atención.

     —¡Hay que salir de aquí! —Gritó Andrea.

     Todos juntos nos dirigimos a paso acelerado al portón del lugar. Demian abrió cuidadosamente y dio algunas indicaciones, para pasar desapercibidos.

     Comenzaron a salir de a uno, yo no presté atención, Andrea fue la primera en salir junto a Valentino, yo salí último junto a Demian.

    —¿Te encuentras bien? —Preguntó despacio, no lo miré, no me giré, no hice ningún movimiento que indicara que le presté la más mínima atención —Dylan —siguió.

    —Hay que salir de aquí —Fue lo único que dije. Avanzamos por entre algunos escombros.

     Habían tantos cuerpos regados por todas partes que comenzaba a temblar.

     Mi vista se posó en un cuerpo en especial, mi cansada anatomía ya no aguantó los temblores y caí al suelo, me arrastré hasta aquella pequeña silueta y rocé sus rubios cabellos con la punta de los dedos.

    —Lau.

    💞💞💞

 
    ¡Y se acabó el VI capítulo!

    Nunca pensé llegar tan lejos XD, espero que la historia les esté gustando y que la disfruten tanto como lo hago yo.

Almas a color /BL [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora