Almas a color /BL [TERMINADO]

Capítulo XX: "The End"

      Canción del capítulo: "A veces"- Green Valley.

      Capítulo XX: "El fin"

      Veía en cámara lenta como Dylan iba cerrando los ojos, con una sonrisa cansada.

    Mis ojos se llenaron de lágrimas de coraje, no dejaría que se fuera así de simple, definitivamente nos salvaría y sacaría de aquí.

   Apreté los labios y me enderecé, soportando el dolor en mi interior. Lucharía hasta el final por esto.

   Por nosotros.

   Valentino se puso en posición y atacó, cruce los dedos y cree una barrera rápida. No era muy fuerte, pero era efectiva.

    Puse una de mis manos en el costado lastimado y congelé los huesos. Fue un poco doloroso, pero podía soportarlo.

   Comencé a correr a su alrededor con los dedos cruzados, generando una barrera anti-magia, encerrándolo ahí.

    Trató de salir, pero no lo logró. La barrera no duraría mucho, por lo que alzando los brazos conjuré;

    —Fuecbo, encerrac tocda macdad y quemac lo impureczas. —Unas enormes olas de fuego me rodearon y con confianza me acerqué a mi hermana, que me miraba como si fuera un extraterrestre. —Te soltaré —Susurré despacio.

   Ella asustada me hizo una mueca, lista para cualquier cosa. Al momento de soltarla, ambos nos pusimos derechos en el lugar y ella se lanzó a los otros brujos.

   Hice lo mismo con Black.

   Lo aferré a mi, siendo protegidos por mi fuego. Lo llevé a la puerta y ya en esta le dije.

   —Busca un lugar seguro, llama a las dos familias, diles que necesitamos de sus ayudas. —Asintió y desapareció.

   Volví a mi anterior posición y me giré hacia Valentino, esperé algún movimiento de su parte, pero él  sólo seguía mirándome.

   —¿Por qué haces todo esto? —Preguntó —¿Por qué arriesgarte tanto?

    —Porque quiero ser feliz —Respondí —Pero quiero serlo con él en mi vida.

    —¿Él?, ¿El chico que se muere a tus espaldas? —Preguntó extrañado y un tanto burlón. —¿Ese que acaba de desmayarse sin haber hecho NADA?

    —Sí, el mismo —Respondí furioso. No con él, sino conmigo, por no haber protegido mejor a mi pequeño juguetito. Por no poder repararlo.
 
    Ese pequeño sentimiento de debilidad provocó que la barrera se quebrara por completo, cayendo en trozos pequeños a nuestro alrededor.

   —Acua decpectra insomnios —Dijo fuerte —Limpia nuectras almas —Una enorme ola de agua se abalanzó contra mi, apagando mi fuego. —Vas a perder, Demian, junto con todos ellos.

   Tragué saliva, esto estaba siendo más difícil de lo que pensaba.

   Cerré los ojos y respiré, me concentré, escuché atentamente mi alrededor. Los brujos cayendo, la débil respiración de Dylan, a mi madre acercándose a papá. Los latidos de Valentino, todo eso lo escuchaba.

     Demian se abalanzó contra Valentino, sus pies se movían con agilidad, los hechizos que lanzaba estaban funcionando a la perfección. Por otra parte, Andrea se dedicaba a derrotar a los brujos que intentaban acercarse a su hermano. Debía resistir.

    Cuando ya acabó con todos ellos, se dirigió a su madre, esta al sentirla se levantó de donde estaba y enfrentó cara a cara a su hija.

    —¿Qué ganas haciendo esto? —Le preguntó. —¿Por qué no dejas que el odio te consuma y te unes a mi lado? —Intentó nuevamente.