N/A: Muchas gracias a todos por leer y comentar... Último capítulo de la primera parte... Aunque la segunda parte es corta, tardaré una semana en organizar las ideas y ver como seguir... Siento dejarlo así...
CAPÍTULO 10: EL ADIÓS
Las semanas pasaron demasiado rápido para Blaine y Sam y, antes de que se dieran cuenta, era su último día juntos. Como todos los días, quedaron en la piscina para decidir qué hacer. Sin embargo, el ambiente era diferente. Ya no lucían sonrisas capaces de iluminar el lugar y ya no reían como los días anteriores. Eran conscientes de que, en unas horas, su relación habría terminado.
El primero en irse de Sundream sería Anderson. Su vuelo salía a las siete de la mañana del día siguiente. Por su parte, Evans volvía a su casa a las dos de la tarde. Podría haberse quedado dos días más, pero no quería estar allí son el chico del que se había enamorado.
A pesar de todo, los dos adolescentes se dieron un beso nada más verse y se tumbaron en dos hamacas para, como todas las mañanas, charlar un rato antes del primer chapuzón del día.
–Te voy a echar de menos. –El rubio comentó casi en un susurro, como si temiese que al decirlo en voz alta fuera más real.
–¿Qué vamos a hacer? Hay mucha distancia... –El moreno preguntó.
–Me encantaría decir que podemos llevar la relación a distancia... Pero son tres años. Es imposible que podamos ser fieles y seguir enamorados después de tanto tiempo. –El más alto explicó.
–Tampoco es realista que los dos condicionemos nuestro futuro a estudiar en la misma ciudad. Tenemos que seguir nuestros sueños. Dentro de tres años no vamos a poder recuperar lo que tenemos ahora. –El joven de Ohio añadió.
–¿Eso significa que cuando te subas a ese avión nuestra historia de amor habrá acabado para siempre? –Sam quiso saber.
–Me temo que sí. –Blaine respondió, conteniendo las lágrimas. –He estado pensando...
–¿Sobre qué? –El rubio estaba intrigado, sobretodo porque podía notar el rubor de las mejillas de su amado, algo que siempre le encantaba. Parecía tan adorable y dulce.
–Mis padres y mi hermano se van a una excursión y la cabaña va a estar vacía toda la tarde... –El rojo de las mejillas del moreno aumentó.
–¿Me estás proponiendo...? –El más alto se extrañó. Sí era cierto que en alguna sesión habían estado a punto de dejarse llevar por la pasión, pero los dos eran vírgenes y habían decidido esperar. Sin embargo, Blaine sabía que quería compartir esa primera vez con la persona que estaba junto a él.
Probablemente tendrían muchas parejas en el futuro, algunas hasta más importantes que ese amor de verano. Sin embargo, en ese momento parecía lo correcto, lo que debían hacer. Entregarle el cuerpo a esa persona a la que ya le había entregado el alma y el corazón.
–Sí, yo estoy preparado... Si tú lo estás... –Anderson propuso.
–Será como el broche final perfecto para nuestra historia. Supongo que tendremos que ir a por lo necesario. –Evans intentó recordar dónde había visto una farmacia o un sex-shop para ir a comprar.
–No será necesario. Tras la reconciliación con mi familia, mi hermano me dio la charla y todo lo que había comprado. Lo escondí entre mis cosas. Podemos buscarlo todo y dejarnos llevar. Hasta donde lleguemos.
Blaine y Sam iban a dormir juntos esa noche, en casa de los abuelos del rubio. Las familias entendían que quisieran pasar todo el tiempo que pudieran juntos. Las normas eran que no podían cerrar la puerta y que tendrían que portarse bien. Obviamente ellos aceptaron las condiciones, aunque esa noche fue más dura de que lo ellos planearon.
Después de haberse entregado en cuerpo y alma por primera vez, deseaban más. Había sido perfecto y, aunque estaban seguros que con algo de práctica disfrutarían más, lo habían disfrutado inmensamente. Había sido dulce y romántico, simplemente dos cuerpos demostrándose su amor.
Sin embargo, no podían hacerlo esa noche porque los adultos confiaban en ellos y no podían traicionar esa confianza. Además, con la norma de la puerta abierta, no querían arriesgarse a que los abuelos los descubrieran desnudos, haciendo el amor.
Lo que sí pudieron hacer, fue dormir abrazados. Algo que era nuevo para ellos pero que a la vez se sentía como lo más natural posible. Estuvieron besándose hasta que cayeron en los brazos de Morfeo. Estaban tan centrados en el otro que ni siquiera supieron que Kate los vio con los labios juntos y la lengua en la boca ajena.
Lo más difícil de todo fue despertarse. Era muy temprano porque Blaine debía ir al aeropuerto, pero eso no impidió que Sam se levantara con él. El equipaje de mano del joven estaba junto a la mesilla, a la espera de meter la ropa y las últimas pertenencias del adolescente. El resto de sus cosas las llevarían sus padres.
Desayunaron en silencio, pero dirigiéndose miradas tristes. Los dos contenían las lágrimas, no sabían qué decir. En cuanto el moreno saliera por la puerta de los abuelos, la más hermosa de las historias de amor tendría su fin. Después de eso, esperaron a los padres de Anderson compartiendo besos.
Kate se había levantado, pero al ver a los chicos, se dio cuenta de que necesitaban esos últimos segundos a solas. Por eso volvió a su habitación, pero no se durmió porque tenía la intención de consolar a su nieto en cuanto se fuera el otro joven.
–No voy a prometer que estaremos en contacto o que nos volveremos a ver. No quiero hacer promesas que luego no voy a poder cumplir. –Blaine susurró.
–Lo sé, hay que ser realistas. Al principio nos mandaremos mensajes a todas horas y nos llamaremos todos los días, pero poco a poco nos distanciaremos... –Sam lo sabía, aunque no hacía que doliera menos.
–Te amo. –El moreno dejó que las lágrimas comenzaran a caer por sus mejillas.
–Yo también te amo. Confiemos en el destino, confiemos en que algún día nos volveremos a ver y que será el momento ideal para estar juntos. –El rubio añadió.
–Hay una cosa que sí te puedo prometer. Siempre te llevaré en mi corazón y recordaré estos días como unos de los más especiales de mi vida. El cariño que te tengo y lo especial que me has hecho sentir no se me olvidará jamás. –El más bajo lo besó.
–Siempre serás la persona que me permitió conocerme y que me mostró que me enamoro de las personas y no de su sexo. –El joven de Nashville sonrió de manera triste.
–Siempre serás mi primer beso y mi primera vez. –Blaine se apoyó en el hombro del otro. –Me acordaré de ti cada vez que toque la guitarra.
Los Anderson llegaron y llegó el momento de la despedida. Por mucho que se negaban a decirse "adiós", no tendrían otra oportunidad. Compartieron un último beso, una última despedida, deseando volver a verse pronto, deseando encontrar un final feliz para su historia de amor.
Tan pronto como Blaine salió por la puerta, Kate corrió a consolar a su nieto. Ojalá las cosas hubieran sido muy diferentes, pero ellos no podían controlar el destino.
Por su parte, el moreno se dejó consolar por su madre. Había cambiado tanto su relación con ella en esos días, en gran parte gracias a Sam. Una cosa estaba clara. Sus vidas habían cambiado para siempre.
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SOUL MATES (Blam - boyxboy)
FanfictionCuando dos personas están predestinadas a estar juntas, las dificultades sólo consiguen demostrar la fortaleza de su amor. Sam y Blaine están predestinados a estar juntos, pero las circunstancias que los rodean pondrán a prueba sus verdaderos sentim...