Capitulo 8

4.1K 326 15
                                    


Toda la clase lo estaba viendo, hasta el maestro se le quedaba viendo y él no los culpaba, se maldecía mil veces por no haberse saltado la escuela ese día, pero todo iba muy bien hasta que su mamá le dio los buenos días con una "grandiosa noticia" según ella, no supo cómo reaccionar se sentía raro. Pero su rareza se produjo después en bochorno y de ahí en... no supo en qué, pero ahí estaba ese sentimiento que no se iba y eso que todavía no acababa ni la primera hora (que para empeorar el día era matemáticas) Y todo por culpa de una persona, que era la culpable de todo

Porque cuando el maestro dijo hay un nuevo estudiante todos se voltearon a ver a esa persona y empezaron a cuchichear

-Mi nombre es Alice Mo...- de repente todos vieron como a la chica se le ilumino el rostro mientras se apagaba su voz dejando su presentación a medias y salió corriendo hacia una dirección en especifica -¡GUAN!-

Ahí fue donde el mundo (o mejor dicho el salón) se paralizo porque de repente vieron como una chica de trenza rubia había tirado al suelo a un pelirrojo mientras lo abrazaba efusivamente y el otro no trataba de pararla, hasta sus ex malas compañías del salón se sorprendieron.

Después de algunos segundos que la chica se despejo de él, se acomodó de algún modo delante del pelirrojo (el recordaba que había un chico adelante el cual misteriosamente ya se hallaba en la otra punta del salón) pero nada volvía a la normalidad se sentía el salón tan tenso que quería salir de él, pero si lo hacia la rubia le haría un numerito y ya no quería soportar nada más en ese día (o por lo menos lo que quedaba para el cambio de maestro) gracias a eso las horas pasaron muy lento, pero por fin sonó la campana del descanso y por primera vez Mo se lo agradecía a la divinidad, salió casi corriendo en cuanto todos rodearon a su conocida, para bombardearla con mil preguntas.

Pero cuando pensó que había salido de una, entro en otra.

No supo ni cuando paso, estaba comiendo su sándwiches escondido del mundo, pero al parecer el demonio lo había olfateado (el cual se llamaba He Tian) porque cuando menos lo espero ya estaba en un partido de básquet y aun se seguía preguntado en que maldito segundo había pasado eso, después de un partido equipo contra equipo volvió a su salón solo para encontrar algo que tal vez ya se esperaba.

Se fue a sentar a su lugar –Me dirás en la salida que paso, y no quiero que lo esquives ¿entendiste?- susurro.

No recibió respuesta de la rubia que temblaba.


¿Porque yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora