Capítulo 14:TETTARESKAIDEKA

19.4K 1.9K 206
                                    

"Even a White rose has a dark shadow"

"Incluso las rosas blancas tienen una sombra oscura"

POV Veronica.

Parpadee incrédula mientras los ojos mortíferos de Hades me prometían una muerte dolorosa.

Sentí mi corazón acelerase pero me mantuve en mi cuerpo humano. De alguna manera después de haberme acostado con Poseidón me sentía mas en dominio de mi forma monstruosa, lo que era ridículo considerado la deplorable situación.

Poseidon hizo aparecer dos latidos de agua que sonaron con un chasquido que me hizo dar un salto.

- Cariño, ve con Tritón, ahora. - me ordenó sin despegar la vista de su hermano.

Esto no podía estar pasando, tenía que haber otra manera de solucionarlo.

- Pero...

- ¡Ahora, maldita sea!

Me levanté como un resorte y agradecí que Poseidon hubiera pensado en volver a ponerme ropa.

Poseidón se movió en advertencia cuando Hades hizo ademan de seguirme.

- Esta pelea no es contigo, hermano.

- Se razonable, Hades. Podemos recuperar a Perséfone.

- Si, y tu mujer es la moneda de cambio.

- ¡Tritón, sácala de aquí! 

Sentí unos brazos tirar de mi hacia afuera del cuarto, intente quedarme pero Gale era demasiado fuerte y pronto estaba arrastrando hacia los aposentos del rey.

- ¡tienes que  ayudarlo! - le grité en cuanto tome consciencia de donde estaba. Anfí estaba en una bata blanca delicada y su pelo casi rubio estaba revuelto mientras se incorporaba, su amante estaba acostado en la cama de Poseidón, era un hombre de apariencia joven y tierna, con pecas y ojos azules. El joven se incorporo ruborizándose y yo sentí la furia paralizar mis rasgos. No me importaba con quien Anfí se acostara, incluso agradecía que Poseidon y ella no fueran mas que amigos, pero había limites y que ese enclenque se creyera con derecho de estar en la cama de Poseidón...

Mantuve mi cuerpo y cara de apariencia humana, pero cuando hablé el titán salió a relucir.

- Sal de aquí. - dije siseando y con un tono demoniaco. El hombre perdió color y comenzo a agarrar sus ropas, era un uniforme del palacio. Oh, esto tenía que ser una broma.  - ¡Ahora!

- ¡Veronica!  - me regaño Anfítrite mirando como el hombre corría espantado.

- ¿en serio, Anfí? - espete molesta, volviendo a usar mi tono de voz normal. - Ten algo de clase, no lo invites a la cama de tu esposo, ¡usa otra!

Y entonces sus ojos se ampliaron mientras  veía el cuarto. Su tez palideció.

- No me di cuenta...

- Silencio. - nos corto Gale. Su mano alzada mientras asomaba su cabeza. Mi padre va necesitar ayuda, la ultima vez que pelearon estos dos necesitamos la ayuda del Todopoderoso Zeus y unas esposas especiales hechas por Hefesto, y ahorita no tenemos ni una ni la otra.

- ¡Entonces, ve! - grité frustrada - ¡ayúdalo!.

Gale me fulminó con la mirada.

- Lo haría. - dijo sarcástico. - pero algo me lo impide, digámosle "instinto de autoconservación"

Bufé molesta y le enseñe mis colmillos. Ahora me sentía más controlada, como si pudiera cambiar por voluntad propia la apariencia de mi cuerpo.

Enamorando A Poseidón. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora