Cazadores

Puntos claros

Amaneció y Nicolás despertó y sintió un tipo de felicidad jamás experimentada, su mate dormía sobre su pecho. No fue un sueño Eleonor era suya y la había marcado, acarició suavemente su marca. Ella se movió incomoda hasta abrir sus ojos y mirarlo a los ojos. ¿Te duele aún? Solo un poco. Ya pasara. Ella fue a pararse algo apenada por su desnudez pero él la detuvo. Ya estarán por llegar. Aún hay tiempo. La atrajo hacia él y metió su cara en su cuello y aspiro su aroma. Ella comenzó a reír por las cosquillas que eso le causaba. Hueles muy bien. ¡En serio! Sí. Ambos reían. Tienes mi olor mezclado al tuyo y es lo mejor que he olido. Es algo extraño lo que dices. Pues ya te acostumbrarás. Ella fue hacia el baño y él la siguió y allí bajo la ducha volvieron a amarse. Tiempo después escucharon la camioneta estaban desayunando, su padre entró junto a Paul quién sonreía algo apenado. Din observaba algo extrañado de la reacción de Paul. ¿Qué te pasa? Paul no dijo nada pero decidió salir. Iré con él. Dijo Nicolás dejando a solas a Eleonor. ¿Todo bien? Eleonor golpeó a su padre en el brazo. ¡Oye! Soy tu padre me debes respeto. Dijeron riendo ambos. Gracias. No podía dejar que arruinarás tu vida dejando pasar el verdadero amor que es la fuente de nuestra fuerza. Din abrazó a su hija cuando Paul y Nicolás entraron. Din creo que no deberías tocar mucho a Eleonor por ahora. Din lo miró confundido y Eleonor comenzó a reír. Nicolás fue con ella y la pego a él. Entonces Din comprendió el mensaje.¡Oh! Si claro, eh debo irme. Regresen pronto. Se marcharon. ¿Qué pasó aquí? ¿Porqué tu tío salió como alma que se lleva el diablo? Cuando un lobo se aparea con su hembra se emana un olor de apareó que es muy fuerte para el olfato de un lobo. Solemos ser muy posesivos con nuestras mujeres y cuando se está en apareamiento nadie puede acercarse, ni tocar a la mate. ¿Y cuánto dura eso? Mejor preocúpate por como reponer energías Eleonor porque somos insaciables. Beso su boca y comenzó todo de nuevo. Habían estado en aquella cabaña por dos semanas y era hora de volver. Faltaba poco para llegar. Deja de preocuparte. Fácil para ti decirlo cuando fui yo la que robe el prometido. Yo asumiré la culpa. Además no era secreto que yo había imprimado contigo. Tal vez pero cuando creíste que te había rechazado corriste a buscarme reemplazo. Eso sonó a celos. Como digas. Nicolás comenzó a reír ante el puchero de su amada. Me gusta que me celes, significa que te importo. Pues en todo caso te diré lo siguiente. Agarro su miembro. Si este amiguito se mete en algún lugar indebido sufrirá graves consecuencias. Le apretó un poco. ¡Ok mujer! Me vas a dejar sin hijos. Además somos hombres de una sola mujer. Eso espero. Tranquila Eleonor es nuestra naturaleza. Y también somos fieras por nuestras hembras así que mantén distancia entre los hombres por su bien. ¿Tanto así? No querrás averiguarlo Eleonor, sería muy mortal para el que se atreva. ¿Eso te pasó cuando David me abrazó, y cuando tus primos me miraron? Sí. ¿Y que hiciste? Con David aguantar pues es humano, pero derribe varios árboles del coraje. Con el atrevido de mi primo le di su lección. Con razón no me mira. Es algo que no podemos evitar. Me siento mal por Gina. Soy horrible. Eleonor, Gina sabía que esto podía pasar. ¿Porqué lo hiciste? En realidad no lo sé, creo que fue por orgullo lastimado y pues ella siempre estaba ahí, insistiendo que solo paso y no sé ni cómo me metí en el lío. Sabes qué mejor viremos y no volvamos. Eleonor no podemos hacer eso. La manada me necesita, nos necesitan a ambos. Llegaron y todos les recibieron felices por la pareja pero las sonrisas y felicitaciones se empañaron al ver que Sam se acercó a Nicolás y sin previo aviso le propinó un buen golpe. Nicolás no respondió pues entendía su coraje. Será cosas de lobos según ustedes pero fue cobarde el haber huido sin tan siquiera darle cara a mi hermana. Es por eso que estoy aquí. Sam miró a Eleonor con mucha ira pero no le dijo nada solo siguió su camino. Teza les recibió en la casa con un abrazo. ¡Al fin! Grito. ¡Oh! Lo siento, sé que debo sentirme mal por Gina pero no puedo evitarlo. Ahora eres mi hermana. Nicolás comenzó a reír y Eleonor solo estaba con la boca abierta y algo confundida. Bien ahora deberemos preparar la boda. Dijo su tía. Claro está cuando aclares y rompas con Gina. Creí que ya eso había sucedido. Dijo Eleonor. Ella no acepta que te fuiste. Se lo dijimos pero se niega a creerlo. Dijo Teza. Eleonor sintió pena por ella. Debemos proceder con la boda lo antes posible. Dijo su tío. Pues dadas las circunstancias creo que sí. Contesto su padre. Debo hablar con ella. Le dijo Nicolás a ella. Lo entiendo, ve. Nicolás fue en busca de Gina y le hallo sentada en río ella al verle llegar corrió hacia el y le abrazó. ¡Al fin llegas! Que bueno es poder volver a verte. Ven siéntate, estoy pensando en el color que usaremos para las mesas. ¿Cuál es tu color favorito? Nicolás sintió pena por ella y de pronto noto que no era tan fácil como pensó, pero su imprimación era más fuerte que él mismo y no podía escapar de ella. Gina sé que sabes lo qué pasó. No has contestado mi pregunta Nic. Gina, no habrá boda. ¡Si habrá boda! Dijo molesta. Dime el color querido. Espero que no vuelvas a ir en misiones tan largas. Se notaba desencajada de la realidad. No fui de misión Gina fui por Eleonor. De pronto dejo de mirar las muestras de telas y se levantó. ¡Eleonor; Eleonor! ¡Siempre esa maldita mujer! Cuida tu lenguaje Gina. ¿Porqué? ¡No sé que le ves! ¡Eso de la imprimación es solo un espejismo ella te rechazó, te voto! No te merece, yo sí. Te daré hijos fuertes y valientes como tú. Amaré por ambos. No Gina eso no sería justo para ti. ¡Diste tu palabra! Gina sabes muy bien que quién forjó todo eso fuiste tú. Siempre fui sincero con mis sentimientos, sabías que podía pasar. Entonces ella le abofeteó. Solo espero que ambos sean muy infelices. Dicho esto se marchó.