You were red, and you liked me because I was blue
And you touched me and suddenly I was a lilac sky
And you decided that purple just wasn’t for you-Colors, Halsey
Al otro día, luego de arreglar todo con su novia, Josh fue a trabajar dispuesto a hablar con Tyler.
Cuando llegó no recibió el recurrente “hola compañero”, en cambio, Tyler se limitó a mirarlo y volver a concentrarse en la cafetera.
–Hablé con Debby –le informó mientras limpiaba un par de utensilios.
–¿Ah sí? –preguntó con las cejas levantadas, completamente desinteresado.
–Sabe… lo de nosotros. Pero no le dije exactamente que eras tú con el que-
–Gracias, que amable –dijo con sarcasmo.
–No podemos-
–Lo sé, Josh, lo sé. ¿Qué vas a llevar? –Le preguntó al cliente.
En el descanso del almuerzo Tyler salió de la tienda y se quedó en la acera fumando y tecleando frenéticamente en el teléfono.
–¿Está todo bien? –Le preguntó Josh mientras volvían a trabajar.
–¿Por qué no habría de estarlo?
–Porque te conozco lo suficiente para saber que algo te sucede.
Tyler lo miró con los ojos llorosos. –¿En serio no te das cuenta? –Preguntó en un murmuro.
–¿De qué?
Tyler rió, porque si hacía cualquier otra cosa probablemente iba a llorar.
–Tyler, ¿de qué no me doy cuenta?
Tyler vio detrás de él y sonrió mientras saludaba. Josh se giró con una ceja levantada y observó a un chico con el cabello azul y ojos del mismo color que miraba a Tyler, ruborizado y sonriente.
–¿Quién es él? –Preguntó receloso.
–Alguien que espero que no sea virgen –se arregló el cabello y se fue en el instante en que Dallon entró.
Esa noche Josh y Debby salieron a cenar y después pasaron por la casa de Ashley a tomar cerveza y hablar.
–Me alegro que todo esté bien entre ustedes, chicos –dijo Ashley mientras les entregaba las cervezas.
La puerta de la habitación se abrió y un muchacho sonrió al grupo antes de salir. Tyler salió después con el torso desnudo, bostezando y encaminándose a la cocina para servirse café.
–¿Y Dean? –Le preguntó Ashley.
–Se fue como una hora antes que este chico.
–Oh, parecía agradable, me hubiera gustado hablar con él.
–El bastardo me mordió el labio.
Ashley rió. Josh se quería golpear a sí mismo por sentir celos.
–¿Qué tal chicos? ¿Todo bien? –le preguntó Tyler a la pareja.
–Sip –contestó Debby mirando a Josh con una sonrisa.
–Qué lindo.
El timbre sonó.
–¿A quién más invitaste? –Preguntó Ashley.
–A mi amante –contestó Tyler mientras abría la puerta–. ¡Mi amor!
Brendon se abalanzó hacia él y lo abrazó por la cintura, levantándolo en el aire. Lo bajó y tomó su rostro, mirándolo fijo a los ojos. –¿Estás bien?
