{ Lucas }
Nada me emociona más que tener la razón y menos cuando se trata de ganarle en algo a Justin. Tan pronto como descubrí que estaba en lo correcto acerca de Xavier, mi día de mierda se convirtió en algo no tan malo después de todo. Mi cuello incluso deja de doler tanto.
Ahora que descubrí la verdad no tengo que quedarme aquí platicando con este niño, podría irme a hacer algo de provecho o manejar a la ciudad para conseguir a alguien que me ayude con al menos una mamada, pero aunque suene extraño... no tengo ganas de irme.
Xavier es tal vez el hombre más tierno que he conocido en mi vida. Y ni siquiera es femenino o algo, solamente tiene un aura de dulzura que me provoca apretarle los cachetes. Y si voy a sacrificar una mamada por quedarme aquí platicando con él, es porque en serio me cae bien.
—¿Entonces... es cierto que atacaste a tu padre homofóbico y por eso estás aquí?
—¿Qué? —suelta Xavier, completamente confundido por mi pregunta— claro que no, nunca he atacado a mi papá. Solo estoy aquí en un intento de su parte para mandarme por el buen camino de la heterosexualidad.
Esa pequeña pelirroja mentirosa es una amenaza para la sociedad.
—Oh, lo siento. Crystal me dijo eso —ruedo los ojos hacia mí mismo porque ahora me parece ridículo que en serio creí que Xav es violento. La parte de misterioso es correcta pero lo de violento es simplemente estúpido— supongo que no está funcionando ¿no? Digo, no es que tu sexualidad sea extremadamente obvia o algo, pero sé que eso no se puede cambiar aunque te metan a un campamento militar.
Si tuviera que adivinar, no pensaría a primera vista que Xavier es gay, a pesar de que soy bueno para identificar ese tipo de cosas. Lo que sí adivinaría es que es un tipo con un montón de problemas, solo por esa cara de melancolía que tiene todo el maldito tiempo. Incluso ahora.
—No está funcionando y no va a funcionar —levanta una pierna para descansar un brazo sobre ella. El músculo de su bicep resalta y mis ojos se ven atraídos a esa parte de su cuerpo— pero estoy harto de que mi familia piense que deben tratarme como un discapacitado solo porque me gustan los hombres. Tal vez si llego "curado" dejarán de ser tan raros a mi alrededor.
—Algunas personas solo no entienden —murmuro, levantando un hombro. Esta sería la parte donde yo expreso mis problemas con mi bisexualidad, pero la verdad es que no tengo ningún problema.
Mi padre intentó estar enojado cuando le conté, pero le dejé en claro que no me importaba su opinión y que yo iba a meter mi pene en lo que yo quisiera. Me dejó en paz cuando dije eso.
Y mi mamá lo tomó relativamente bien, lo único que me molesta es que piense que soy un estereotipo andando y me presuma con sus amigas como su hijo orgullosamente gay. Las pobres mujeres se ven increíblemente decepcionadas cuando me conocen y se dan cuenta de que no soy para nada floripondio o femenino, como mi madre me describe.
—Sí... um, así que... ¿tú eres? —pregunta, haciendo una mueca y sonando como si nunca hubiera estado así de incomodo en toda su vida por preguntar algo. Su cara de miseria me hace reír de nuevo y no puedo evitar poner una mano en su rodilla porque quiero tocarlo de alguna manera.
Si pudiera acariciar su cabeza y tenerlo agarrado en mi regazo como a un perro, lo haría. Xavier es así de adorable.
—Soy bi, pero suelo ir más por las mujeres —contesto con facilidad y le doy una gran sonrisa para tranquilizarlo un poco. Entiendo que es algo difícil e incomodo de preguntar.
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Dear Xavier
Teen FictionMi verano en este desierto hasta el momento se puede describir en cuatro palabras: mosquitos, sudor, llanto y dolor. ¿Y qué fue lo que hice para estar aquí? Nada. He sido bueno toda mi vida, pero mi padre espera que este campamento me convierta m...