Predestinación °~тaeнyυng~°

Capítulo 25

–Nadie se dio cuenta de que fingías... y que yo recuerde, no eras muy buena ocultando tus emociones

Bajó la mirada triste y avergonzada, luego de pensarlo unos segundos, me sentí mal, la había hecho recordar sobre lo que pasó el día del accidente.

–Lo siento, no quise decirlo por eso

–No, tienes razón –soltó inmediatamente–. Yo tampoco entiendo como es que lo oculté... pero, ahora que lo sabes, ¿seguirás sin hablarme?

Mis labios se sellaron, no sabía que hacer, quería estar junto a ella de ahora en adelante, pero tenía miedo de lo que pasaría si lo hacía. Ella me ha confesado sus sentimientos, pero, ¿qué siento yo por ella exactamente?

–¿TaeHyung?

La miré mientras ella esperaba angustiada una respuesta, seguía sin saber que decir.

–Yo...

–¡Chicos! ¡Los encontré!

Ambos levantamos la vista sorprendidos para observar a un YoonGi agitado, apuntándonos con su linterna ya que era de noche.

–¡Si querían ducharse se hubieran ido a los baños! ¡Hay regaderas y están separados hombres de mujeres!

Reí incómodo mientras ella bajaba la vista sonrojada; maldito Min YoonGi, no puedo culparlo porque no sabe nada al respecto, pero siempre comentaba cosas en el momento menos apropiado, era como un don.

YoonGi, JungKook y NamJoon bajaron a ayudarnos, me pusieron una chaqueta y a ella la taparon más cómo era debido. Subimos para encontrar a Hoseok con su novia, Jimin sostenía las linternas para alumbrarnos el camino, al llegar, Jin fue corriendo a Hye como toda una madre preocupada. Antes de emprender el camino a casa, le devolví su cámara.

Y la última mirada que me dio fue tan triste, como si fuera una despedida, otra despedida.

–¿De verdad estabas aquí solo con ella? –preguntó YoonGi con curiosidad

–Me dijo que le gusto...

Susurré antes de observar a YoonGi con la boca abierta, tan sorprendido e impactado. Debe ser complicado si hace que él tenga este tipo de reacciones.

–Tienes que contarme todo

Me tomó del brazo y comenzamos a caminar para alcanzar a los demás.

(...)

–Ahora sí tienes que contarme

Me coloqué el cinturón de seguridad mientras YoonGi encendía el auto. Miré la ventana mientras el auto en el que iba ella avanzaba, suspiré preocupado por la situación en la que estábamos.

–¿Y bien? –preguntó, avanzando

–No sé por donde empezar...

–Dijiste que ella confesó sentimientos hacia ti

–¿Que YonHye confesó qué?

Di un grito por el susto que me ocasionó JungKook mientras giraba a verlo.

–¡¿Qué te sucede?! –cuestioné con la respiración agitada

–Lo siento, se me olvido decirte que el niño viene con nosotros

–No me digas así... abuelo –susurró JungKook

–¿Qué dijiste niño? –le miró, enojado–. Mejor abróchate bien en tu silla para bebé

Reí a carcajadas mientras ellos se dirigían miradas asesinas, luego voltearon a mirarme de peor forma por tomarlo de juego. Dejé de reír, aclaré mi garganta y desvíe mi mirada.