el malo del cuento ✧ fede ❬fnafhs ; fhs❭

Capítulo 8.

—¿Una... Fiesta? —habló inseguro el rellenito mientras observaba a su mejor amigo—. No lo sé.

—Oh vamos Feffy, quiero que vayas —sonrió animado Felix mientras lo tomaba sus manos—. Sé que está organizada por Meg y Puppet, pero estaré junto a ti todo el tiempo y además también irá Abby y Lily.

Fede desvío la mirada nervioso mientras que Felix esperaba ansioso una respuesta, sin embargo, el más bajito se dedicó a suspirar resignado y regalarle una sonrisa.

—Si comienzo a sentirme incómodo, me iré de ahí —advirtió divertido.

Felix festejó con un abrazo y con unas grandes carcajadas mientras que Fede correspondía el abrazo y trataba de esconder su notable sonrojo a causa de la vergüenza.

¿En serio es buena idea ir a aquella fiesta?

[...]

Towntrap yacía en un pupitre revisando algunas hojas de menor importancia mientras tarareaba una melodía desconocida para su albina novia.

Meg llegó y lo abrazó por detrás, ambos soltaron una pequeña risa y la de mechón rosa besó la mejilla del pelinaranja.

—Mira, los invitados —Meg retiró las hojas de la mano de su novio y colocó la que ella tenía—. ¿Estás de acuerdo, Towntrap?

El antes nombrado comenzó a leer y a observar quienes estaban invitados a la "pequeña" fiesta, pero se detuvo al leer las cuatro letras que formaban el nombre de la persona que no deseaba ver ni en pintura.

—No quiero que vaya a la fiesta —habló en un tono serio y colocó las hojas sobre el escritorio de madera.

—Felix deseo que fuera y por ese motivo decidí agregarlo —Meg se sentó a un lado de Towntrap—. Sé que tu también aprecias a Felix tanto como yo, él no nos a pedido absolutamente nada —pausó por un momento y después continuó—. Así que por favor Towntrap, déjalo.

El pelinaranja miró los ojos ámbar suplicantes de su novia, soltó un gran suspiro y se sobó la sien para después soltar una pequeña risa.

—¿Dónde quedó la Meg amargada y gruñona? —se quejó, la albina rodó los ojos y se levantó del asiento.

—Cállate y prosigue con lo tuyo —caminó hacia la salida con ambas manos sobre las caderas—. Te amo.

Antes de que Towntrap pudiese contestar la joven corrió rápidamente para evitar las burlas por el notable rojo en su rostro.

Era increíble como Meg había cambiado al estar junto a él, eran una pareja totalmente única.

Nada comparado cuando estaba junto a Eak.

[...]

—Toma, es para ti —Puppet le entregó la invitación a la chica que estaba junto a ella.

—¿Cumpleaños de Towntrap? —se cuestionó ella misma al mientras leía el contenido de la invitación—. Me lo imaginaba, como su antigua amiga tuve que aprenderme su fecha especial, ahora el idiota me odia.

—¿Por qué?

—No lo sé, yo tengo más motivos para odiarlo que él a mi, se hasta el más profundo secreto de Town —la joven caminó al casillero de su víctima a la cual nombró "Malo del Cuento" y colocó el sobre con la carta de odio—. Si yo lo deseo puedo perjudicarlo y arruinar su imagen de león bueno.