NUEVE

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"Si fuese una mujer... probablemente aceptarías tus sentimientos hacia mí"

LuHan había empezado a odiar a su estúpido corazón. Latiendo cómo loco cada vez que divisaba a SeHun o cada vez que recordaba aquellos besos que le había robado.

SeHun no volvió a hablar con él, tampoco a insultarlo o siquiera aparecer frente a él. Pero cuando menos cuenta se daba era observado por este. Aunque algunos días la mirada era dulce y llena de afecto, había otras que eran de odio y repulsión.

LuHan empezó a perder nuevamente las esperanzas de entablar relación alguna con el menor y empezó a mentalizarse que debería dejarlo ir. Puede que SeHun se haya convertido en el bipolar extraño que era ahora debido a su culpa.

Después de todo era su último año, se graduaría y no vería más al chico. Siempre había buscado excusas para quedarse en Corea... ahora todo lo que quería era alejarse de ahí.

Era una lástima que su corazón no pensara de la misma forma.

Debe admitir que algunas noches llora hasta quedarse dormido. Su corazón aún duele, aún late esperanzado pero LuHan no puede hacer nada para remediarlo. ¿Es este acaso su primer amor?

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No podía entender que le pasaba. ¿Que es lo que tenía?

Por algún extraño motivo no podía sacar de su mente a LuHan y todo empeoraba cuando Miranda iba hacia él pidiéndole atenciones, que claramente al ser su novia debía cumplir, pero ¿porque ya no sentía esa intensidad y ansias de tenerla cerca y disfrutar de ella?

Aún no podía sacarse de la cabeza esos dulces, suaves y esponjosos labios rosas. Demonios, mentiría si dijera que no quería volver a probarlos. Se había sentido como un abusador y violador. ¿Porque simplemente no pudo parar?

LuHan había estado tan frágil, lo había apartado y hasta golpeado, debía haberlo dejado ir ¿No era eso acaso lo que quería? ¿Que no debió sentirse alegre al escucharlo decir que lo dejaría en paz?

SeHun simplemente no podía encontrar respuestas, no había respuesta a eso que le sucedía, no tenía lógica alguna.

Pero tal vez... definitivamente NO!

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LuHan había empezado a pasar más tiempo con sus amigos, claro que aparte de Lay y Xiumin el tenía más amigos. Ho-seok, más conocido como J-hope, era uno de ellos; ese muchacho era tan agradable que no podía evitar pasar momentos divertidos y entretenidos con él y sus otros compañeros.

Por otra parte y felizmente se encontró con Jackson, un antiguo compañero de colegio. LuHan había sido su tutor al estar en último año y el pequeño Jackson en primer año de secundaria. Pero el niño era maduro e inteligente y fácilmente congeniaron. Que grato era volver a verlo.

Jackson había hecho costumbre el visitarlo a su aula y como en los viejos tiempos, ambos se reunían en la biblioteca de la universidad cuando podían para brindarle consejos e información que pudieran ayudar a Jackson en su nuevo recorrido.

LuHan realmente evitaba ver a SeHun y pensar en él. No valía la pena. Ya nada podía hacer. Si el menor quería hablar de lo sucedido con él lo haría. Hasta entonces LuHan esperaría, el no volvería ir tras SeHun a pedir atención. Pero si eso no sucedía... si él no le daría una explicación... Dios... rogaba que lo hiciera pronto.

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Y ahí estaban otra vez. ¿Quien carajos era ese niño con el que LuHan pasaba tanto tiempo?

Era la tercera vez que SeHun los veía tan animados juntos, sonriéndose uno al otro y el pequeño bribón ese se tomaba tantas libertades con LuHan que le ponían los nervios de punta.

¿Que LuHan no se daba cuenta de la mirada cargada de emociones y sentimientos que le brindaba ese niño cuando le veía a los ojos?
SeHun lo había atrapado varías veces ya mirando a LuHan con tanta Adoracion y cariño cuando este le explicaba algo, escribía en su cuaderno o leía un libro. SeHun no pasó ni una de esas miradas por desapercibido, pero hoy había ido demasiado lejos.

El pequeño infeliz le había dejado un beso a LuHan en la mejilla, lo que hizo que LuHan se sonrojara violentamente y le brindará una enorme sonrisa.

¿Que carajos? No le había golpeado y empujando repetidas veces a él por besarlo sin autorización? ¿Como era entonces que ahora a este le sonreía?

No pudo aguantarlo más y se dirigió hacia ellos tomando a LuHan de la muñeca y mirándolo a los ojos. Ven conmigo -le había dicho y LuHan tardó al rededor de un minuto para reaccionar.
Miro a SeHun extrañado y sonriendo al otro se disculpó, tomó su bolso e iba a arrancar su mano del agarre de SeHun para tomar sus libros por lo que SeHun los levanto por el sin soltarle, sin dejarlo ir.

Básicamente lo arrastró hasta el primer salón vacío que encontró y lo empujó para entrar. Cerró la puerta y vio a LuHan sobándose donde lo había agarrado.
¿Porque tenía que ser tan brusco con su mayor? ¿Porque se sentía como un animal desenfrenado junto a él?

Y a ti que te pasa? -preguntó LuHan con el ceño fruncido. ¿Porque no podía brindarle una de esas sonrisas que le daba a el insoportable niño ese?

Se molesto aún más y tomándolo de la nuca beso la mejilla en la que el otro lo beso, quería dejar sus labios marcados de ser posible. LuHan soltó aire ruidosamente, tal vez asustado o sorprendido. O tal vez ambos.
Inevitablemente fue bajando y dejando besos hasta llegar a sus labios donde ambos se besaron, no dulce pero tampoco exigente. Era un beso extraño. Era como sentir que se contenían pero que no podían evitar hacerlo.

Después de algún tiempo ambos estaban jadeando.
LuHan se apartó y lo miro serio pero con la ceja levantada. ¿Que se supone que significa esto? -preguntó.

Pero SeHun no podía responder... ¿que era eso?

No lo sé- le dijo- pero no quiero que vuelvas a acercarte a ese niño. -le dijo con la mirada sería.

Y una mierda, yo hago lo que yo...-y no hubo más, otro beso comenzó dejándolo sin palabras. ¿Qué había estado diciendo? LuHan lo olvido todo para dejarse caer en las emociones, tan malo... tan jodidamente malo.
Tan bueno.

If I Were a GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora