If I Were a Girl

OCHO

"Si fuese una mujer... probablemente serias más claro respecto a mí"

Ya había pasado al rededor de un mes desde que SeHun se había disculpado. Un mes que LuHan y SeHun no tenían la amistad de antes, pero si una extraña relación.

Incluso el mismo LuHan diría que no entiende que es lo qué pasa, SeHun tiene un comportamiento raro e inusual. No solamente lo insulta y ofende, pero algunas veces, y cuando no están sus compañeros o algún espectador cerca, SeHun se disculpa, le enseña una grata sonrisa e incluso podría llegar a abrazarlo y no dejarlo ir por unos minutos.

LuHan debe confesar que odia estás reacciones de el menor con él pero también se siente feliz y cálido cuando una cercanía como esas ocurre.

Su humor va mejorando progresivamente y ahora que Miranda no está cerca de SeHun se siente relajado.

Un día de esos, como cualquier otro, vio a SeHun caminando por los pasillos del receso, se veía tan preocupado y afligido que no pudo contenerse de ir a por él, esos días de cercanía le hacían creer que aún eran amigos, por así decirlo. Se excusó de sus amigos y siguió a SeHun hasta la biblioteca donde el menor se sentó en una de las mesas de el fondo del segundo piso, que estaba básicamente desierto.

Se acercó con cautela y se sentó junto a él. Estaba tan pensativo que ni siquiera se percató de su presencia, LuHan le tocó el hombro gentilmente y sonrió cuando el menor lo observó. Su cara afligida cambio a una de asombro para luego convertirse en una de molestia. LuHan no entendía nada pero le brindó una sonrisa más amplia y le acarició suavemente la mano apoyada en la mesa.

SeHun suavizó sus facciones para luego de manera torpe y rápida apartar su mano de la de LuHan. -No me toques asqueroso- le dijo.

LuHan lo tomo bien y volvió a sonreírle, no podía decir que las palabras no lo afectaban pero quería creer que no las decía enserio, había escuchado muchas de ellas en las últimas semanas. -¿Estás bien SeHun?- le preguntó de la manera más amigable que pudo. SeHun lo miró y luego soltó una risa.
-¿Que si estoy bien? ¿Crees que este bien si tengo que lidiar contigo todos los días?... -SeHun hablaba molesto y LuHan se sorprendió un poco pero trato de no mostrarse afectado.

-Lamento si me he cruzado demasiado contigo, no ha sido mi intención molestarte SeHun. - Se disculpó pero realmente ¿porqué?, ¿Que acaso no era mayormente SeHun quien lo abarcaba?

-¿No tienes dignidad?, te he dicho que tú sola presencia me enferma y tú te quedas aquí a disculparte y lamerme el culo ¿solo porque te gustó?

Eso había ido demasiado lejos, LuHan solo se había rebajado a ello porque pensaba que aún podía recuperar la amistad de el menor pero tarde se dio cuenta que no.

Se levanto con furia, su cara roja de enojo y lo miro a los ojos. -No creas que puedes jugar conmigo SeHun, yo no soy tu puta para aguantarte y aceptar todo lo que venga de ti, tarde me di cuenta que fue un gran error confesarme pero ya no más... -suspiró al borde de las lagrimas, ya no más, LuHan no aguantaría otra rabieta de el menor, ya no, su corazón estaba destruido por todas las horribles cosas que SeHun le decía y que poco había sanado con las disculpas y pequeñas muestras de afecto que el menor le brindaba. No, el no podría aguantar más, se quebraría y no deseaba sufrir el dolor de ser rechazado nuevamente.- ...No más, ya no quiero volver a verte, no me busques yo jamás volveré a aparecer ante ti, y si eso sucede ignórame. Ya no voy a aguantar una escena tuya, me he cansado ya SeHun.- lentamente se dio la vuelta y empezó a caminar.

Su velocidad fue aumentando mientras las lágrimas corrían por sus ojos. Jamás había odiado más a alguien.

De pronto y muy bruscamente alguien lo empujó a los estantes y un grito ahogado de dolor y sorpresa abandonó sus labios, vio a SeHun con horror e intentó soltarse pero entonces sintió unos labios que reclamaban su boca violentamente. Se recuperó de el estado de shock que se encontraba y con todas las fuerzas que poseía empujó a SeHun del pecho, quien solamente retrocedió un paso, y estrelló su palma en la mejilla del menor.

Pero antes de que pudiera hacer su camino nuevamente, fue tomado del brazo y nuevamente sintió aquellos labios en los suyos, trató de apartarlo pero recibió una mordida en su labio inferior que lo dejó en blanco. Y fue entonces que los pudo sentir, suaves, firmes y un poco salados debido a sus lágrimas. SeHun se apartó un momento y LuHan pudo respirar pero otro beso inicio y esta vez sí correspondió, sus brazos que se encontraban en el pecho del contrario, por tratar de apartarlo, fueron subiendo poco a poco hasta reposar en el cuello del menor. El beso se intensificó, hambriento, muy hambriento.

Para ser la primera vez que ambos se besaban no era dulce o tierno, sino salvaje y necesitado. Era como si ambos no pudiesen contenerse y ese fuera el único y último beso que se darían. Los brazos de SeHun se acomodaron al rededor de su cintura y lo apretó un poco a él.
Cuando ya no existía más aire en sus pulmones se separaron con respiraciones agitadas. SeHun tomo el rostro de LuHan entre sus manos con tanta delicadeza, que LuHan dudo si era ese mismo hombre quien lo acababa de besar de esa manera urgente. Sus dedos se deslizaron secando las casi secas lágrimas que había derramado anteriormente y dejando un beso en cada párpado se apartó de él.

LuHan seguía hecho piedra y sin mover dedo alguno e intentando recordar cómo se respiraba. SeHun se apartó de él lentamente y se fue, LuHan no pudo hacer nada para retenerlo.