Cap. 16 Orson y Karla.

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-Ah~ mo~, ¡el estúpido profesor de matématicas dejó demasiada tarea!

El ojicarmesí de cabellos levemente levantados a la altura de su nuca volvió a quejarse de sus deberes escolares mientras caminaba por los pasillos de la universidad hasta toparse con unos orbes bastante parecidos a los propios.

-Otosan en la escuela...

-¿Ja?

Miro al mayor moviéndose lentamente de adelante hacia atrás y dando brinquitos desapareció del lugar.

-¡Oye!

Siguió a la menor perdiendo a esta entre la multitud hasta dar en medio de las personas que componían ese círculo que observaba como un chico de camisa a cuadros se movía con gracia y facilidad en medio de estos junto a un chico de lentes 3D la música techno resonaba en el lugar pero sus orbes carmesí no le quitaban la mirada de encima a aquel ser de ojos azules escondidos tras unos gruesos lentes de pasta negra, la música era un remix donde las posiciones cambiaban, el estilo de baile también, pero siempre manteniendo un estilo sensual en su baile definiendo las curvas que su cuerpo poseía.

-Vamos a bailar Orson.

La que el mismo denominaba su chica ideal lo estaba jalando hasta la pista improvisada de baile, se movía entre la multitud de gente que se había formado pero tratando de que el chico que había iniciado aquel baile en el patio de la universidad no desapareciera de su vista y un extraño sentimiento lo embargo cuando lo vio bailar mucho más apegado al de enorne sonrisa.

-¡Ey~! ¡Orson! ¡Estoy aquí!

De manera brusca la castaña lo tomó por las mejillas para clavar la mirada rojiza en su persona.

-Lo, lo siento Totoko.

Solo unos minutos bastaron para que un pequeño grupo de personas compuesto por su mejor amigo, el nerd de lentes rosas, el chico de lentes 3D y el de camisa a cuadros ya estuviesen bailando en conjunto moviéndose de forma aleatoria mientras que el de ojos azules llamaba a uno de los chicos más callados del colegio, Itchi.

-Tch, púdranse.

Eso lo pudo leer a la perfección de los labios del menor y entonces algo que saco completamente al ojicarmesí de sus casillas fue ver al chico de auriculares acercarse con una sonrisa coqueta al gótico y que este reaccionara sonrojandose.

-¡Bailemos juntos my friend!

Y tomando las manos del ojiamatista las posó en sus caderas para formar así una cadena que se movía al ritmo de una famosa canción llamada Macarena, una canción de origen español. Alzando los brazos ante los sonidos agudos de la canción riendo divertido con aquellos chicos que apenas había conocido ese día siendo el de camisa amarilla y mangas su primer amigo autodeclarado.

-Al parecer esta vez el reto es Okasan.

La pequeña de ojos rojos miro a todos los participantes en aquella extraña junta para bailar todos juntos desde el segundo piso del edificio, eso sería difícil ya que podía ver que su "padre" tenía esos ojos de cachorro que siempre le ponía a su madre pero el de lentes negros parecía mucho más entretenido en estar con aquellos geeks y la nueva enemiga de vestido salmón no estaba contemplada.

-Ellos siempre triunfaran, siempre.

Declaró antes de desaparecer en los salones de los alumnos buscando en sus mochilas las carteras de estos.

OsoriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora