You are my kitten. [Verkwan]

Capítulo 29

Maratón 1/4 👗👠🐈

*Narra SeungKwan*

Caminamos entre toda la gente, tomando zonas separadas para lograr atender a los clientes de manera adecuada.

Por suerte, a mí no me tocó la mesa donde se encontraba Vernon, en realidad todo lo contrario. Me encontraba repartiendo y tomando pedidos del lado izquierdo del local, un poco alejado de ellos.

Sabía que Vernon no dejaba de mirarme, sentía su mirada a donde sea que caminara.

Pero no le daría más importancia, a pesar de que era una extraña sensación.

Respiré hondo y dejé que mi cuerpo se relajara. No podía estar tenso y tratar mal al resto de clientes sólo por culpa de él.

Miré atrás y noté que al que le había tocado fue a JiHoon y me arrepentí al instante de no haber tomado esa mesa.

No quería hacer enojar más a Hoonie, él ya se encontraba muy sensible y ponerlo a atender aquélla mesa era la peor idea del mundo.

JiHoon puede ser muy agresivo cuando se lo propone.

Regresé mi mirada a las mesas que me correspondían y continúe trabajando.  Debía dejar de distraerme o WonWoo me regañaría un día de éstos.

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Estaba de camino a los vestidores para preparar el show junto a Woozi, hasta que una mano sobre mi hombro me detiene y me hace girar.

— He.. SeungKwan...  — dijo en voz baja.

— Lo siento señor, pero debería llamarme Kitten  — contesté cortante.

— No. Necesito hablar con SeungKwan un momento. Por favor  — suplicó.

No seas débil frente a él... No dejes que lo vea, no puede verlo o se aprovechará de nuevo.

Quise girarme de nuevo y seguir mi camino pero Vernon me abrazó por la espalda, impidiendo mi ida nuevamente.

Sus brazos rodeaban mi cintura a la perfección, tanto que me daba miedo el pensar que nuestros cuerpos fueron hechos para estar juntos. Para encajar uno con el otro.

— Por favor... Quiero hablar con SeungKwan, tan sólo un minuto  — susurró.

— ¿S-SeungKwan?

— Así es.. Por favor, déjame hacerlo  — enterró su rostro en mi cuello.

— Lo siento, eso no va a ser posible  — contesté también en un susurro al igual que él.

— ¿Eh?  — levantó su cabeza y miró mi nuca con confusión.

— Lo mataste.

Cerré mis ojos con fuerza y quité sus manos de mi cuerpo, caminé rápido, evitando que me detuviera de nuevo. No podía estar más tiempo con él o me dejaría caer, como lo he hecho ya mil veces en el pasado.

Llegué hasta los vestidores y cerré la puerta con seguro una vez estuve adentro. Me daba un poco de miedo que Vernon o alguien más entrara mientras nos vestiamos.

Me acerqué a las puertas y noté que Woozi ya estaba adentro de una de ellas. Podía escucharle cantar "the real" de N.Flying.

— meorieseo jongi ullyeo dingdongdaengdong  — cantó Woozi.

— jinjjaga natanatta  — lo interrumpí.

Asomó su cabeza y comenzamos a reír fuerte, y yo más aún en cuanto noté que tenía puesta una clase de tanga extraña con la cara de un elefante drogado.