Capítulo 57

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*Especial Jicheol/Parte 1* (Narrador omnisciente).

(Créditos por la idea a la perra de mi prima Eva_Rojas )

El sonido que era transmitido a través de las grandes bocinas era capaz de llegar hasta el rincón más escondido de todo  el bar, haciendo del ambiente uno más candente y atrevido. 

Las personas se encontraban unas sobre de otras, algunas bailando, otras tomando y uno que otro disfrutando de la "compañía" que ofrecían los trabajadores. 

No era muy común encontrar ese tipo ambiente dentro del local, sin embargo, aproximadamente cada mes las actividades de escenario se cancelaban por completo para dar una "atención" más exclusiva a los clientes. 

No se trataba precisamente de sexo, puesto a que si te oponías el bar no te obligaba a nada. Aunque es verdad que si estabas de acuerdo, podías recibir un pago extra por parte de los clientes y llegar hasta donde tú mismo/a lo permitieras, es por eso que incluso tenían algunos cuartos privados, para quienes se daban el lujo de ofrecer atenciones más "exclusivas". 

  — ¿Me puedes pasar esos tacones? — pregunta MingHao, a lo que JiHoon inmediatamente accede. 

Ambos se encontraban dentro de los vestidores, dando los últimos arreglos a sus trajes para poder salir y hacer finalmente su trabajo. Aunque ninguno jamás había aceptado ofrecer atenciones que conllevaran tener sexo con los clientes, estos siempre los buscaban.

Justamente por esa misma razón, esos días de trabajo se volvían el doble de cansados. No era que los clientes se volvieran más pesados o tuvieran conflictos, simplemente el bar se llenaba tanto, hasta el punto en el que era difícil caminar sin encontrarte con alguna chica o chico montando a alguien (puesto a que también se permitía tener relaciones abiertamente dentro del local si es que las habitaciones ya se encontraban llenas).

 Y a pesar de todo, los chicos no podían negarse, pues era trabajo y debían realizarlo, al modo en el que quisieran, pero debían cumplir las pautas. 

JiHoon normalmente no se demostraba afectado en días como estos, de hecho casi siempre lo hacía ver como cualquier otro día de trabajo, ya que él, como casi siempre, se dedicaba simplemente a la atención de clientes dentro de la zona de bebidas, es decir, las personas que se encargaban de llevar lo que el cliente pidiera a su mesa. 

Al menos así era la mayoría de los días, y extrañamente, ese día algo parecía andar mal. 

Su nerviosismo era bastante evidente, tanto que incluso los de seguridad le habían preguntado si se encontraba bien. No era normal ver a JiHoon mordiéndose los labios o con sus manos al rededor del borde de su falda. 

Aunque... él no podía evitarlo. 

Era cumpleaños de SeungCheol, obviamente no era un día como cualquier otro. 

No es que JiHoon se haya esmerado preparando alguna sorpresa súper cursi como regalo, de hecho, ni siquiera lo había pensado mucho, el lugar no se adaptaba para regalarle algún tipo de peluche o carta, como lo haría cualquier otra persona con un trabajo "normal". 

Pero el pensar que SeungCheol estaría presente en el bar esa noche, logró hacer que su corazón latiera a mil por minuto. No podía controlarse, estaba nervioso. 

Ni siquiera sabía el porqué había comprado un traje más llamativo de lo usual (en ese día del mes, los chicos y chicas no usaban uniforme, usaban simplemente lo que se les pegara la gana, siempre y cuando usando su gafete con identificación del bar), ni sabía por qué se había colocado su perfume favorito. 

No sabía por qué. 

Dejando de lado sus pensamientos, deslizó por última vez sus manos a través de la falda rosa palo para "alisarla" y darle un aspecto limpio. Tomó su choker blanco y lo colocó sobre su cuello, haciendo que las orejas blancas que adornaban su cabello lucieran aún más adorables. 

No hacía falta decir que en cuanto salió de la habitación, la mayoría de ojos se posaron sobre él. 

Lo sabía, era uno de los clientes más cotizados, sin embargo él no le daba mucha importancia. 

Sólo había una persona a la que quería impresionar, aunque no lo admitiera y era algo que jamás diría en voz alta. Sólo quería que SeungCheol lo mirara con deseo. 

  — Woozi, necesito que me ayudes con esto— dijo SeungKwan pasándole una bandeja con margaritas— tres son para la mesa cinco y una es para la cuatro. 

  — ¿Por qué no las llevas tú?— no era por grosero, sin embargo él seguía concentrado en buscar a SeungCheol con la mirada, en lo cual no tenía éxito.

 — Aún tengo que llevar esto a la mesa del segundo piso— le contestó mientras dejaba ver una botella de vodka sobre su mano izquierda. 

  — Bien — suspiró. 

— Te debo una, preciosa— se burló mientras pasaba a su lado, sin dar cuenta a que él también parecía chica con el vestuario que tenía puesto, a lo que JiHoon respondió simplemente rodando los ojos.  

Dejando su búsqueda de lado, afirmó la bandeja cobre sus manos y fue primeramente a la mesa cinco, encontrando en ella a un grupo de adultos mayores, quienes a pesar de su edad, lucían bastante felices con las vistas que tenían a su disposición. 

Se encargó de entregar las bebidas y se retiró, no sin antes rechazar la oferta de uno de los señores para "pasar" el rato con él. 

Rápidamente tomó rumbo a la mesa cuatro, pensando en dónde se había metido Cheol, ya que no lo veía por ningún lado. 

Todas sus dudas quedaron resueltas en cuanto se topó con él, quien portaba una chaqueta de cuero negra a la par de sus pantalones de tela negra y una camisa blanca escondida debajo de todo esto. 

"Por todos los cielos" pensaba JiHoon mientras le entregaba la margarita. 

La razón era desconocida, sin embargo pareciera que los ojos de SeungCheol incluso eran de una tonalidad más oscura de la que comúnmente mostraba. Sus labios eran más rojos y apetecibles, lo cual sólo hacía estallar la mente del rubio con pensamientos bastante indecentes. 

  — ¿Tan pronto trabajando?

— ¿Vienes solo?— dijo el más bajo, ignorando la pregunta anterior.

  — Sólo vengo a verte— le regaló una sonrisa coqueta. 

— Estoy trabajando— dijo lo más indiferente que pudo, a pesar de que no movía ni un solo dedo para poder moverse de ahí.

— También soy un cliente, ¿no es así?

— Técnicamente— rodó los ojos. 

 —Y es mi cumpleaños—añadió, aún sonriendo— ¿les molesta si te sientas un momento?

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En unos minutos subo la segunda parte <3

I'm back 7u7

You are my kitten. [Verkwan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora