🔥👑15👑🔥

749 98 19
                                    

Aún no amanece pero yo he perdido el sueño, y debo aprovechar que casi nadie ha despertado para atender mis deberes en paz. Me duché, vestí y arreglé en pocos minutos, luego me aseguré de que todo mi equipaje haya sido perfectamente acomodado con cada cosa donde debe estar, y finalmente salí para ocuparme de lo que más me interesa en éste momento...

Cuando el Rey Frío dispuso todo para el "obsequio" para la Princesa, yo me aseguré
de que todo estuviera listo aquí también. Le pedí permiso a Mss. Dahlia para construir
un pequeño "congelador" en su invernadero para las margaritas, ella nunca me confirmó nada porque no hubo tiempo para recibir una carta de respuesta, pero yo estaba seguro de que ella no podría negarse, estaba seguro de que se encargaría de poner manos a la obra al instante.

Mi primera ocupación de la mañana fue supervisar la construcción de ese congelador, y para mi gran sorpresa, ya estaba listo, incluso se encargaron de acomodar la tierra negra de Wintery, o mejor dicho, la Baronesa de encargó de prepararlo todo. No me cabe duda de que ella se tomó todo el trabajo y las molestias de ayudarme en esto. Pronto se lo agradeceré. Luego, fui a buscar la margarita que el Rey me dio la cual estaba guardada dentro de una caja de hielo, mis hombres se encargaron de protegerla tal como les ordené, se encontraba perfecto estado dentro del congelador de la cocina donde Messier Gallois ya se encontraba preparando el desayuno como todas las mañanas.

— ¿Necesita algo señor? –preguntó al ver mi interés en lo que se encontraba oculto dentro de la caja y la cerré de inmediato...

— No Messier, solamente estaba comprobando que un objeto de valor de mantenga en perfecto estado, gracias por su interés...

No puedo romperlas así como si nada, debo consultar una vez más el libro, podría cometer un error. Con respecto al tiempo que necesita para florecer, no tengo ningún apuro porque sé que, a diferencia de otras plantas, es bastante rápida. Bastan 2 días para que el tallo aparezca...

— Retiro lo dicho Messier. Sí lo necesito, necesito pedirle un favor de suma importancia –dije. Sé que puedo confiar en él.

— Por supuesto mi señor. ¿Qué puedo hacer por usted?.

— Es muy importante que ésta pequeña caja se mantenga congelada o de lo contrario el contenido podría sufrir daños y es de sumo valor para mí. Solamente debe cuidarla por un par de horas. Pronto vendré por ella...

— Como usted desee mi señor, yo me encargaré de que nadie se acerque a ella. Puede confiar en mí –me confirmó y yo asentí levemente.

— Se lo agradezco, con permiso –me despedí antes de retirarme.

Volví a mi habitación en busca del libro, y una vez que lo encontré, saqué mis anotaciones para asegurarme de qué debo hacer y qué tener en cuanta. Primero debo asegurarme bien de la temperatura en la que se encuentra el Invernadero/Congelador... Invernador. ¡Ha! No suena mal, no sabía que tenía la habilidad de ser tan cómico. En fin, volví al invernadero para controlar todo y me encontré con la Baronesa charlando con sus plantas como lo hace normalmente por las mañanas. Supongo que esa debe ser una
costumbre de Verdinos...

— ¡Oh, Mss. Dahlia! Lamento interrumpir su... ocupación –me disculpé al interrumpir su "charla" pero ella me sonrió amable y se
inclinó ante mí.

— Buen día Príncipe Harold, que agradable sorpresa verlo aquí. Debo suponer que viene a encargarse de sus "planes" –comentó. Ella es consiente de mis intenciones.

— Eso mismo pienso hacer y le agradezco mucho su colaboración Baronesa. Espero
no haberle causado ningún contratiempo debido a sus ocupaciones diarias...

IGNITER. The prince's version (Skaði)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora