Capitulo 11

141 21 13
                                    

¿Celoso?
¿De que?
¿Donde estás cerebro cuando realmente te necesito?
-Eso es algo ilógico, ya que, ¿de quién podría estar celoso?,Karol con los únicos con los que interactúa es contigo y él.- opina Ana
-Yo estoy de acuerdo con ella amor, ¿no te dijo nada más?- interviene Katja
-Yo solamente sé eso, es lo único que les puedo decir- habla James.
-Aunque revertiendo los hechos, Karol si hablo con otro chico, ¿pero de que tendría que estar celoso?- habla ahora Katja.
- ¿Que chico?-  digo despertando del confuso cerebro, que estaba totalmente confundido en este momento .
-El tal ¿Luca?, si, así se llamaba -afirma
-Pero el es mi primo Katja, ¿recuerdas?, no veo sentido de que Ruggero se molestara por eso.- concluyo.
-Chicas, acaba de pasar algo de último momento con el equipo, y necesito ir rápido a la oficina del entrenador- dijo James dándole el último sorbo a su milkshake y al mismo tecleando en su teléfono, se levanta de la silla, toma su abrigo y se lo pone- No intenten investigar, así es Ruggero, ahora les aseguro de que ha de estar bien dormido en su cama, es mi hermano, lo conozco perfectamente, mañana se le va a pasar- finalizó.
Se despidió de nosotras con un beso en la frente, y se retiró del lugar.
Doy otro sorbo a mi milkshake mientras desbloqueo mi teléfono, hubo un mensaje que llamo completamente mi atención.
Mamá:
Karol, no sé nada de tu hermano desde ayer en la mañana, le he escrito en su teléfono, y no ha leído mis mensajes, lo he llamado, y me manda a buzón,  estoy preocupada, si te puedes comunicar con uno de sus amigos más cercanos y preguntarles acerca de él, no te olvides de comunicarme
- ¿Pasa algo ?- pregunta Katja
-Es Leonardo , mama me ha mandado un mensaje diciendo que no ha ido a dormir a casa, y no sabe nada de él , y como yo dormí con ustedes, recién me entero de que no llego a casa- respondo.
-De seguro tuvo alguna fiesta, y se olvido de avisar- habla Ana.
-Eso es imposible Ana, por más que yo no tenga una buena relación con Leonardo, él estima bastante a mamá, y siempre avisa, aunque sea al día siguiente.- habló antes de marcar a su número, que rápidamente me manda a buzón - Llamaré a James a preguntar, si lo vio hoy en el entrenamiento-dijo acto seguido llamar a James.
-James,(....), si sé que estás ocupado, solamente será un segundo, ¿viste a Leonardo en el entrenamiento?(....), bien, está bien, (....), mamá está preocupada, es todo, adiós.
- ¿Y?- pregunta Ana.
-No lo vio, dijo que iba a preguntar a su grupo de amigos-respondo- voy a casa, ¿me acompañan? .
-Me encantaría amiga, pero mamá me está esperando, hoy llega familiares, y quiere que esté presente en la mesa-dijo Ana- y justamente estoy llegando tarde,mamá me va a matar.
-Lo siento Gerchi, quede con James después de la reunión que él tenía- sus ojos demostraban preocupación y arrepentimiento -pero si quieres le cancelo y le digo que mejor salgamos mañana- finaliza Katja.
Desde que pasó esa noche, en la cual estuve a punto de ser violada, me han estado acompañando a casa, si no era Katja, James me llevaba en su auto, o a veces Ana iba conmigo caminando, hasta Ruggero me acompañaba.
Desde hace hace dos semanas que no caminaba sola para regresar a casa, ya que ellos se encargaban de que eso no suceda.
-Tranquilas chicas, creo que ya es hora de ir superándolo- dije levantándome de la silla para estar frente a frente de ellas dos, las envolví en un abrazo,y ellos gustosas me lo devolvieron.
-Cuídate ¿si?, me mandas un texto a penas llegues a casa, nos vemos mañana- dijo Ana, tomando su bolso, y saliendo del lugar.
-Llegas a tu casa, agarras tu maldito celular y me mandas un texto, lo primero que tienes que hacer es eso, ¿ok?, lo siento mucho, no poder acompañarte, sabes que te amo- dijo dándome otro abrazo, y saliendo del lugar, tal y como Ana lo hizo anteriormente.
Sacudí mi ropa, y me coloqué el grueso abrigo sobre mi cuerpo.
Estaba haciendo demasiado frío, y no estábamos en época de invierno.
Salí de la cafetería, en dirección a mi casa,.
Empecé a caminar a pasados apresurados,y observando a cada lado, mientras movía mis piernas rítmicamente, unas frías gotas empezaron a tocar mi cabello suelto, y a mojar el abrigo que llevaba, de pronto esas gotas, se estaban volviendo en una estruendosa tormenta.
Otra tormenta..
Descansé mis piernas en un banco que estaba entechado, me senté ahí durante unos dos minutos, relajando mi respiración, y los latidos de mi corazón, que estaban totalmente descontrolados.
La calle en la cual me encontraba, al pasar los segundos, se deshabitada de gente, que estaba corriendo, para que las feroces gotas de agua, no lleguen a provocar daño alguno.
Y la mayoría de gente, estaba con un paraguas.
Ahora entiendo, el porque Katja y Ana cargaban uno en su bolso.
Creo que fui la única que no se enteró, de que se acercaba una gran tormenta...
Mi teléfono empezó a vibrar en la parte trasera de mis pantalones,  pero no quise contestar, ya que, literalmente, si sacaba el celular, podría ser súper peligroso.
Me levante del banco en el cual estaba sentada momentos atrás, y empecé a correr, lo bueno de todo esto, era que mi casa no estaba tan lejos.
En ese momento, no tenía ni la mínima precaución, de que con el piso en esas condiciones, totalmente mojado y enlodado, podía provocarme, uno horrible y terrorífica caída.
Las gotas de agua, provocaban que las pocas hebras de cabello que se encontraba a los costados de mi cara, se peguen a mi rostro, y que cada vez sienta, como mi cuerpo se estremecía por el siempre tacto de estas.
Estaba haciendo un frío de los mil demonios, y empezaba a sentir como mis dientes rechinaban por sí solos, y unas ganas inmensas de tener un poco da calor me desesperaban.
Mi teléfono volvió a sonar, pero de nuevo decidí ignorar el molesto sonido que provocaba incrementará mi miedo .
A solo pocas calles de mi casa, vi un rostro muy familiar.
En sus ojos podía descifrar que estaba sumamente preocupado y una pizca de temor también abundaba en ellos.
Su rostro se giró para poder conectarse con mi mirada.
Mi cuerpo estaba reaccionando por sí solos, pero tuve que mantener el control de correr hacia el, y recibir un abrazo de su parte.
Pero sucesos sucedidos estás últimas horas, vinieron a mi mente.
¿Celoso?
Él sabe que entre nosotros abunda una confianza muy grande, entre los dos.

Intentó pasar por su lado, sin decirle una palabra, pero su mano agarra mi brazo, provocando que quede completamente frente a él.
-¿Estas bien?- pregunta examinándome con la mirada.
-Muy bien Pasquarelli, ahora sí me permites, tengo que entrar a mi casa- respondo.
-Necesito hablar contigo- dice el apartando los rebeldes cabellos que estaban en mi cara.
-Y yo necesito entrar a mi casa, estoy temblando ¿te das cuenta?- digo yo deshaciendo su mano que apretaba mi brazo.
-Anne me dio las llaves de tu casa, dijo que la habías olvidado hoy, así que, entrare contigo.
Mamá, tendré que hablar muy seriamente contigo...
-¡Que emoción!- digo usando un tono sarcástico.
Se limita a reír y tomar mi mano para dirigirme a mi casa.
La tormenta estaba muy fuerte, eran a penas las cinco y media de la tarde, y ya estaba totalmente oscuro.
Claramente Ruggero Pasquarelli, es más bipolar que una mujer en sus días.
Literalmente no entiendo su estupida actitud, y el hecho de que lo deje entrar a mi casa, es porque ya lo ha hecho antes, y porque para mi mamá es como un hijo más, tal y como son Ana, Katja y James.
Abre la puerta, y el olor hogareño inunda mis fosas nasales.
Empiezo a subir las escaleras para llegar a mi habitación.
-¿Puedo..?- pregunta inseguro.
-Ya lo has hecho antes, no deberías preguntar- respondo abriendo la puerta de mi habitación.
-Iré a secarme, espérame aquí, y hablaremos Pasquarelli- dije en un tono cortante.
El se limitó a asentir.
Entre y empecé a hacer mi trabajo.
Cepille ml cabello, y salí del baño.
El estaba acostado en mi cama, mirando hacia el techo, con sus das brazos detrás de su cabeza.
Sintió mis pasos y se levanto de la cama.
-Linda tormenta ¿no?- pregunta
¿Que...?
-Sabes bien que detesto las tormentas Ruggero- afirmo.
- Que rara, a mi me encantan, me traen, buenos recuerdos, buenos momentos, con buenas personas...- declaró.
- ¿A que quieres llegar con esto?- pregunto
-Vine a disculparme por lo que paso hoy- dijo cambiando de tema.
-¿Eso es todo?, en serio, no entiendo las actitudes estúpidas que adaptas a veces- reclamo
- No estaba en un buen día Karol, tienes que entenderme- reprochó
-Bien, está bien, si no tienes más que decir-  digo acostándome a su lado, en posición de que mi cabeza está a lado de sus pies, y mis pies a costado de su cabeza.
-Estas muy enojada conmigo, ¿verdad?- pregunta
-¿Quieres que te lo demuestre?
-Creo que no quiero eso- responde.
-Nena, ¿donde está la más linda?- interviene un chico abriendo la puerta de mi habitación.
Los músculos de Ruggero que estaban completamente relajados se empezaron a tensar en cuanto mi primo, se acerca a la cama y me abraza.
-¿Recibiste mis chocolates linda?- susurra Luca en mi oído.
-Creo que debo irme Karol- habla antes de levantarse de la cama.
-Espera, espera- lo detengo levantándome de la cama también, e impidiendo que salga de aquella habitación.
Antes de hablar, un suspiro sale de mis labios.
-Luca el es Ruggero, un amigo. Ruggero el es Luca, mi primo- los presento.
La sonrisa de Luca se agranda, mientras cada músculo del cuerpo de Ruggero y sus puños que estaban cerrados, se van relajando y abriendo lentamente.
Creo que ya entendí...

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 24, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

"The Purpose In Love " |Ruggarol|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora