Trente Trois.

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Al poco tiempo de que la relación de Hoseok y YoonGi avanzara, decidieron vivir juntos para aprovechar cada instante que tenían con el otro.

Y, Hoseok sabía que uno de los momento más inolvidables de ese primer día viviendo juntos, fue ver al chico azulado dormir.

Cuando YoonGi dormía, sus mejillas tomaban un color azul marino como cuando se avergonzaba, pero unas pequeñas lucecitas lo iluminaban simulando pecas al rededor de su rostro.

Hoseok creyó que podría haberse pasado toda la vida mirando sólo esa escena.

Aunque claro, cuando YoonGi despertó, el chico anaranjado se dio la vuelta rápidamente y fingió dormir con su mascota a un lado.

El de cabellos caramelos era bastante feliz, excepto el día que conoció a Jimin. Su corazoncito le decía que él era la persona por la cual había sufrido.

Pero a Hoseok no le gustaba estar enojado con las personas, así que rápidamente lo perdonó.

-Hoseokie, pienso que esto te quedaría muy bien.- Jimin le mostró una camisa azul con estrellas bastante bonita.

-Oh, me encanta ¿Es para mi?

-Por supuesto, creo que es de tu talla.

El chico gris le dio la prenda y puso una de sus manos en la mejilla de color naranja de Hoseok.

La imagen que vio, fue la de un capullo de flor de tipo Margarita en medio de un jardín. La única, estaba sola.

Luego vio a Hoseok y YoonGi esperando, para ver que cuando la flor se abriera, un pequeño de un color parecido al del kiwi pero más claro, apareciera entre destellos y luces de color azul en medio del verde pasto.

-' Colours ♡ yoonseok '-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora