El desastre de Ty |Payson 3|

21. Tu voz para dormir.

N/A: Holaaa, antes del capítulo quisiera avisarles que he abierto un apartado para los capítulos extras de la saga Payson, están todos los que se encuentran regados por las historias y también uno nuevo que escribí recientemente sobre Reed y Dom ¬u¬ lkdjfdk también habrán más, quiero escribir alguno sobre Mahony y Declan, así que ya veremos. No olviden comentar y votar en los extras viejos para que cuando los quite de las demás historias no extrañe tanto los comentarios. El apartado se llama "Erase una vez en Payson... [Capítulos Extra]", apare también publico fanarts allí, así que si alguien quiere enviarme uno para que se encuentre en la lista, son bienvenidos. 

¡Y otra cosa! empecé un nuevo libro BL/Gay/ChicoxChico, el título es "Quisiera conocerte | Quisiera 1|", es parte de una trilogía (no ambientada en Payson) y los protagonistas del tercer libro serán nada más y nada menos que Chase y Owen, de quienes ustedes tanto me pidieron una historia cuando aparecieron en este libro xd pues tendrán libro, por fin. 

¡Eso es todo! Ross out. 

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Ty.

Despierto a mitad de la noche porque hay un sonido molestándome, doy vueltas en mi cama hasta que abro mis ojos y me percato de que mi celular está brillando en la mesa de noche. Estiro mi mano y lo tomo; es una llamada de Eric. Deslizo mi dedo por la pantalla mientras me dejo caer sobre las sábanas y hablo en cuanto puedo escucharlo respirar al otro lado de la línea.

—¿Qué sucede, cariño? —pregunto—. ¿Otra pesadilla?

—Sí —murmura él, habla muy bajo, probablemente para no despertar a sus compañeros de piso—. Te extraño.

—Yo también te extraño, hyung —murmuro, pensando en lo mucho que eso es cierto—. Payson no es lo mismo sin ti aquí, se siente... como se sentía cuando llegué, antes de conocerte, todo es aburrido, todo es lo mismo, te extraño tanto.

—Oírte decir eso me hace sentir mejor —puedo escuchar la sonrisa en su voz, pero luego escucho un suspiro tembloroso—. Dios, me gustaría que me abrazaras en este momento... necesitaba escuchar tu voz para dormir.

Su voz se quiebra; he aprendido que las noches son las más difíciles para Eric a veces. Él puede haber superado muchas cosas pero hay algo en él que se rompió y tardará mucho tiempo en recuperarse y aunque funcionar bien sin ello, era importante, siempre tendrá esa falla mientras no deje del todo el pasado atrás. Normalmente tiene ataques de ansiedad cuando está solo, piensa demasiado y la soledad no le ayuda con eso. Me rompe el corazón, me causa estrés e impotencia no poder estar ahí para él, pero ¿Qué puedo hacer? Él tenía que ir a estudiar. Ugh, maldita sea, me siento tan inútil.

—Cariño... —susurro cerrando los ojos, tragándome mis lágrimas porque no puedo deprimirlo más de lo que está, así que sorbo mi nariz y trato de mantener un tono de voz ameno—. Oye, hablemos sobre algo.

—¿De qué?

—Cuéntame cómo van tus clases de coreano.

Su universidad ofrece como electiva clases de coreano, así que Eric se apuntó, él dice que quiere aprender mi idioma por si algún día decido llevarlo a Corea —cosa que probablemente haga—. Yo por otro lado, estoy tomando clases de español con su madre todos los miércoles, ella es convenientemente una profesora de español, entre muchas otras cosas que enseña.

—Van bien —lo escucho un poco mejor—. La profesora me recuerda a ti.

—¿Otra vez con lo de todos los asiáticos se parecen? —levanto una ceja.

—No es eso, a ella le gusta la moda —Eric suelta una pequeña risa—. Tú no eres cualquier asiático.

—Soy tu asiático.