💍Mi única fantasía.

10.

De; Omma

✨Hola pequeño, sé que en estos momentos yo ya no estaré ahí para verte, no volveré a verte sonreír como de un niño pequeño se tratara, ni hacer estupideces contigo sin que tu padre se entere, pero sabiendo lo idiota que es él, y que lo más seguro es que no te dirá lo que duele el primer amor.

Duele mucho cuando cortas con él, pero te diré algo, “no cambies por nada ni nadie” no lo hagas, eso es lo peor que puedes hacer, sigue siendo el mismo estúpido que lo único que quiere hacer es reír a tu hermano. JuHo, tu mente es frágil, no te hagas influenciar tan fácil.

Sé...sé que no he sido la mejor, ni nunca lo seré, pero no quiero que te hagan daño, ni que te lastimes por esa gente que no sabe valorar lo que en verdad eres.

Para mi, siempre serás mi pequeño ángel.

Te quiero.✨

[…]

YoungBin ha decir verdad ya no sabía con exactitud si sus ojos le estaban dando una mala pasada o si su subconciente ya estaba demasiado loco como para ver una persona con el mismo rostro que JuHo.

Rascó sus ojos frustrado mientras bufaba, bien, ya estaba lo suficiente loco como para ver personas con el rostro de JuHo, ¿qué seguía ahora? ¿Escuchar aquella voz grave pero dulce de gente que no era él? Entonces estaba seguro de echarse ya tirarse un tiro.

—JaeYoon, ¿puedes venir un momento a casa? Creo que me estoy volviendo loco, y necesito terapia.— Habló cuando se sentó en el sillón de su casa tiritando, hacía bastante frío por el simple hecho de haber sido lo suficiente idiota como para salir como si fuera de verano.

—¡No soy tú psicólogo! ¡No soy psicólogo! Además, tú ya estás demasiado loco como para que ahora te lleguen a curar, y más que un psicólogo, lárgate a un psiquiatra, ¿¡sabes el frío que hace ahora en la calle!?— Rodó los ojos, claro que lo entendía ¡acababa de salir, y en ropa de verano!

—Tú solo ven ya, ¿está bien? Te daré chocolate caliente joder, ven ya.— ¿Él decir palabrotas? Sí, era como su manera fina de hablar.

—Vale, al igual que 10,000 wons, los necesito, y además, estoy con TaeYang y YoungKyun.— Se tensó bastante cuando escuchó el nombre del menor y la cantidad de wons que el estúpido tenía, es decir, sabía que los wons eran de mentira, pero YoungKyun a pesar de ser estúpido le daba bastante miedo.

—¿La boca de la verdad vendrá? Da igual, vengan.— Colgó el móvil despeinando su pelo para mirar a la ventana, dos casas más atrás podía ver el departamento de JuHo, con las luces apagadas desde hacía ya dos años, un día, cuatro horas, veinte minutos y cuarenta segundos.

¿Pero él loco? No, todavía no.

[…]

Todos miraron a YoungBin cuando había dicho “vi a un chico igual a JuHo y otro a su hermano” YoungKyun suspiró, ¿si le decía lo que pasaba y que JuHo estaba en Seúl, este lo odiaría? ¿YoungBin lo mataría a preguntas mientras lo observaba para que contestara rápido? ¿Se arreglarían?

Miró a su novio TaeYang por un momento, quien ladeó sus labios también mirándolo de reojo, quería tener la afirmación de su mayor, que no estaría mal decirlo, que no sucedería nada malo, sí...solo quería hacerle bien a su hermano.

—YoungBin, si te decimos algo, ¿no harás nada malo?— El mayor entre los cuatro miró al segundo menor, quien rascó su nuca mientras golpeaba con su hombro la cabeza de Kyun, quien reaccionó un tanto tardio.

—Ah, JuHo está de vuelta en Seúl.— Ahora el chico de 19 años de edad miró la reacción de Bin.

El silencio se había hecho presente en la casa, el único ruido que se escuchaba era una pequeña melodía del vecino de arriba, y las fuertes risas de los niños que jugaban en la calle. Aquello les dio miedo a los tres visitantes, quienes miraban casi sin pestañear al dueño de la casa.

—¿Qué?— Y justo en ese momento, haciendo gritar a HwiYoung y que JaeYoon y TaeYang abrieran sus ojos lo máximo posible, el chico se había desmayado cayendo al piso de madera secamente.

🐹