Un chico diferente

Ella

John: 

Vas por la vida, caminando, mirando todas las cosas ordinarias, donde lo superficial es más importante, así que decides dar un pequeño giro, y ahí, ahí está esa rosa, que se destaca entre todas las demás, la que con 5 pétalos sigue de pie, que tiene pequeñas cortadas en el tallo, pero aún así, sigue de pie.

Y si...
Ella era única, frágil, como una pequeña muñeca de porcelana, y esos ojos hechos de cristal, eran los más hermosos que podías a ver visto.

Los rayos de luz, deslumbraban aquella obra de arte, que solo yo podía distinguir.

Así que decidi y tome un ligero respiro, me tomo 20 segundos para saber que era el amor de mi vida.

Ella es el verso que jamás se había escrito, y yo era el poeta que podía saber que verso sería el siguiente.

Pero mi orgullo, mi dignidad como hombre me hizo perder aquella luz celestial, donde había encontrado mi felicidad, se que soy el mas estúpido, porque ahí la vi, y simplemente no hice algo por ella.

Mi estúpido ego no me hizo ver que en verdad ella me quería, que yo tenía ese control en su vida para poder hacerla feliz o destruirla, y el día en que la vi riendo con alguien más , ese día algo murió por dentro y simplemente la deje ser feliz.