Jeremy Armitage

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Título: Fin de semana

Personaje: Jeremy Armitage

Advertencia: No

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—Te prometo que la pasaremos genial —sonreía con inocencia mientras juntaba sus manos en forma de suplica—, por favor.

—Está bien, Rose —accediste—. Sólo porque eres mi mejor amiga.

Recordabas y te preguntabas otra vez el cómo te pudo convencer. En ese instante, te estabas arrepintiendo de aceptar ir con Rose a su casa para conocer a su familia y pasar un par de días con ellos.

Por alguna extraña razón, tu mejor amiga quería que fueras a su casa, siempre hablaba de eso, mencionándote que algún día tendrían que visitarla.

—Ya falta poco —dijo Rose con una emoción notoria en su voz—. En serio, muchas gracias por venir conmigo.

—No hay problema, Rose —dijiste con una sonrisa cansada—. Sólo serán dos días, ¿qué podría salir mal?

Fueron tranquilas por la carretera, escuchando la música que emitían por radio hasta que llegaron a su destino.

Bajaste del automóvil antes que Rose para observar el alrededor, era un lugar muy lindo, había un gran bosque que se notaba cuando pasaron por la carretera. La casa era enorme, aunque parecía ser algo antigua. Tu mejor amiga bajó del coche y empezó a sacar el equipaje, mientras tú seguías mirando el paisaje.

Escuchaste el abrir de la puerta y dirigiste tu vista hacia ella. Viste a dos personas adultas, los padres de Rose. Ambos se acercaron para saludarlas y ayudarlas con las maletas.

Después de una cálida bienvenida, entraron al hogar.

—Espero que estés cómoda con nosotros, ____ —mencionó la madre de Rose, Missy Armitage—. Rose nos habló mucho de ti.

—Gracias por dejar que me quede aquí —sonreíste.

El señor Armitage se ofreció a llevarte a tu habitación. Lo seguiste mientras llevabas la mochila que preparaste para el viaje y él llevaba el resto de tus maletas. No querías empacar mucha ropa, pero Rose insistió tanto que al final accediste.

Cuando llegaron al dormitorio, Dean abrió la puerta y te dejó pasar primero, al entrar lo primero que notaste fue una cama en el medio de la habitación y luego el decorado que era algo simple. El padre de Rose dejó el equipaje cerca de la cama que, por ahora, te pertenecía. Te mencionó dónde estaba el baño y las diferentes habitaciones del hogar, trataste de recordar cada detalle que te decía, luego no querías rondar por toda la casa tratando de buscar el baño o la cocina. También te comentó sobre los dos empleados que tenían y que si necesitabas algo, no dudaras en preguntar. Finalmente, te dejó sola para que te acomodes y ordenes lo que sea necesario.

Suspiraste cuando el señor Armitage se fue, te sentías un poco incómoda ya que no conocías mucho a la familia, sólo los habías visto en algunas fotos que Rose te había enseñado. En el camino, te había dado más información sobre ellos. Sabías que su madre era algo así como una hipnotista, el padre era un neurocirujano y su hermano Jeremy quería seguir el mismo camino.

Frunciste el ceño levemente al recordar al hermano de Rose, aún no lo habías visto por ningún lado y eso te pareció raro por un momento, pero luego no le diste importancia.

Al llegar el momento de la cena, bajaste las escaleras dirigiéndote al comedor. Por suerte, encontraste la habitación al oír la charla que mantenían Rose y su padre. Les sonreíste a ambos amablemente y tu amiga señaló un asiento a su lado.

—¿Tienes hambre, ____? —preguntó tu amiga, asentiste soltando una pequeña risa. En ese momento, se escuchó que alguien entraba por la puerta principal—. Seguro es mi hermano —dijo Rose con una sonrisa.

—¡Hola, familia! —exclamó Jeremy entrando al comedor y cuando te notó, se quedó mirándote confundido, pero con una pizca interés en ti.

—Jeremy, ella es ____, se quedará con nosotros el fin de semana —la expresión del joven cambió, ahora mostrando una enorme sonrisa.

—Oh. En ese caso, bienvenida, ____ —se acercó a ti para luego agarrar tu mano y besar el dorso, sonriéndote coquetamente. Tú sólo lo mirabas, sin hacer gesto alguno.

La cena transcurrió tranquila, con preguntas y risas de parte de toda la familia, pero te sentías algo incómoda debido a que durante toda la cena, Jeremy no apartó su mirada de ti.

Él, al verte, creyó que eras una chica interesante y ya tenía planeado conquistarte. A ti te pareció un chico muy apuesto, pero parecía de esos que quieren estar con todas las mujeres que ven.

Estabas en tu habitación, cambiándote para poder descansar después de un largo día. Al escuchar la puerta abrirse, lo primero que hiciste fue tratar de cubrirte con la pijama, ya que estabas en ropa interior. Giraste asustada para ver quién había entrado sin golpear y te encontraste con la persona menos indicada.

—¡Podrías haber golpeado primero, idiota! —soltaste con rabia, aún tratando de cubrirte. Jeremy soltó una risa al escuchar cómo lo llamaste.

—Bueno, qué suerte que no lo hice —recorrió tu cuerpo con su mirada, junto a una sonrisa divertida en su rostro.

—Sólo, vete de una vez —espetaste tratando de calmarte.

—Como desees, preciosa. Sólo quería desearte dulces sueños —te guiñó antes de cerrar la puerta. Te cambiaste rápidamente, por si se le ocurría entrar de nuevo.

El joven pelirrojo se fue a su habitación, mordiéndose el labio al recordar tu imagen.

Definitivamente sería un largo fin de semana.

N/A

Otra vez no resistí las ganas de subir xD ya tenía uno escrito, así que aproveché la ocasión. Este One Shot es uno de mis favoritos, además me encanta el personaje

Si quieren un OS, imagina o cualquier otra cosa, no duden en comentar de quién!

Nos leemos pronto!

One Shots •Caleb Landry Jones•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora