"Council of the Dead" - [Deigetta] ©

Capítulo 45.

Maratón 8/8.

Narra David (Dei).

Desperté abrazado a Samuel, se veía tan tierna durmiendo que sólo me a aferré más a él. Estaba por volver a dormir cuando volví a sentir aquel frío tan conocido.

"¡Mami! Regaña a Israel, no nos dejó a Sayuri y a mí molestar a los trabajadores de Daniela"  — Me separé un poco de Samuel para poder voltear a ver a Rocío.

  —        ¿Cómo que molestar a los trabajadores de Daniela? ¿No les había prohibido ir a ese lugar?

"¿Eh? No, nunca dijiste nada de eso".

  —        Creo que debo de poner restricciones y que Israel me recuerde  — Supsire  —. Hablaremos más al rato de esto ¿de acuerdo?

"Sip, iré a molestar a los vecinos"  — Sonrió y salió corriendo de la habitación.

  —        Pobre de los vecinos  — Trate de separarme más de Samu, para poder ir a tomar un baño, pero este sólo me jaló más a él.

  —        Sólo un rato mas  — Dijo algo somnoliento.

  —        Ya regresaron, así que ya hay que levantarnos.

  —        ¿No hay otra opción?

  —        No, no la hay.

  —        Pues ya qué   — Se sentó en la cama, volteo a verme y me dio un beso.

  —        ¡Oye!

  —        ¿Qué?

  —        Nada  — Trate de sentarme pero al instante sentí un dolor agudo en mi espalda baja y trasero, haciendo que me volviera a recortar.

  —        Creo que no vas a poder caminar  — Dijo acercándose a mí.

  —        Calla...  — Voltee a ver a otro lado  —. ¿Me ayudas a ir al baño?

  —        Con mucho gusto.

[...]

Después de algo sumamente vergonzoso –como ser ayudado a bañarme porque no podía estar de pie por mí mismo–, terminamos bajando a la cocina, donde se encontraban Luis e Isreal platicando y viendo por la ventana como los niños molestaban a los vecinos.

Samuel me dio algo para el dolor –cosa que encontró en el botiquín del baño–, después de eso se puso a hacer el desayuno, una vez termino de hacerlo lo sirvió en dos platos y acercó dos tazas con café.

  —        ¿Por qué se llevaron a los niños a donde se encuentra Daniela?  — Les pregunto a Israel y a Luis.

"Samuel quería que los dejáramos solos"  — Contesto Luis.

  —        Pero no era para que se los llevaran a ese lugar.

"Estamos muertos ya, no nos pueden ver ni hacer nada"  — Argumento Israel.

"Espera, creo que su instinto maternal se está activando"  — Dijo burlonamente Luis.

  —        Como sea.

  —        ¿No te preocupas demasiado?  — Pregunto Samuel.

"Uy, metió la pata, eso no se le debe de decir a una madre preocupada"  — Comentó Israel.

  —        Me preocupo porque esa tal Daniela es capaz de obtener cosas que dañen a mis niños.

"Oww, que lindo"  — Dijo Luis.

  —        Aún así, no creo que sepan que te siguen ellos o que llegaron a ir hacia alla  — Dijo terminando de desayunar.

  —        Uno nunca sabe, y es mejor prevenir que lamentar.

Termine de desayunar y Sam lavo los trastes, yo con algo de dificultad fui al patio trasero a ver qué hacían los niños, al llegar vi como Ángel y Sayuri hacían caer a uno de los vecinos, mientras que Rocío jugaba con el perro.
Puede que Luis tenga razón, y mi instinto ma... Paternal ya haya decidido aparecer, después de todo ya llevo tiempo cuidando a dos mocosos –que ahora ya son tres–, aunque aún así no siento que pueda cuidar a otros dos niños, siendo que estos estarían vivos; y luego con todo esto que sucedió, el asunto se pone muy peligroso y más para unos pequeños que ni culpa tienen.

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ATK: Y así concluye el maratón, esperamos que les haya gustado.

JT: Hasta el próximo miércoles ^¥^

*FECHA DE PUBLICACIÓN 27/09/17*.