Capitulo 5

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Estábamos en mi habitación, ella estaba sentada en una silla y yo en la cama, estábamos pensando que hacer y yo di la idea de hacernos preguntas para conocernos mejor.

-¿como fue tu salida del closet?- pregunté
-pues yo tenía unos 10 años...- comenzó a decir Emily

Emily pov.
Flashback
Sonó la campana del recreo, todos los niños salieron al patio de la escuela y como de costumbre yo iba con mi mejor amigo Marco.

-¿jugamos Em?- me dijo mientras nos acercábamos a unos amigos de el que jugaban fútbol, no solíamos jugar en el recreo, siempre nos sentábamos en el piso a comer nuestro lunch y platicar.
-claro- respondí con una sonrisa
-hola chicos ¿podemos jugar?- preguntó Marco
-Claro- respondió un chico de ojos azules con pelo castaño y piel blanca, Marco le sonrío y lo miro por uno par de segundos, el chico tomó el balón y se alejó con el para ir a las canchas, nosotros lo seguimos caminando, Marco se acerco a mi oído y susurró -es guapo, no lo conocía- el se sonrojó y bajo la mirada con una sonrisa, le sonreí y lo golpeé en el brazo con mi codo, cuando llegamos donde estaban los chicos nos pusimos en posición para jugar, le robé el balón a los chicos y anoté dos goles, cuando el profesor de deportes sonó su silbato y llamó nuestra atención, me señaló y me hizo una señal para que fuera. Me acerqué y deje jugando a los niños -Señorita, usted sabe bien que no puede jugar con los chicos- dijo él agachándose para ponerse a mi altura

-pero Profe, soy mejor que los chicos- dije un poco triste -y ellos me dejaron jugar, así que no hay problema- traté de convencerlo

-mira- puso una mano en mi hombro -a mi hija también le gusta el fútbol y no es que no quiera que juegues con los chicos, tu maestra me pidió que no te dejará jugar y quiere hablar contigo ¿puedes ir y hablar con ella?- me pidió con una sonrisa, el definitivamente era el mejor profesor de la escuela -claro Profe- respondí -anda, nos vemos en clase de deportes- se levanto y yo fui hacia mi maestra que parecía estar enojada, ella siempre me gritaba.

-¿que pasa, miss?- dije amablemente ya que no quería problemas, ella siempre hacia drama por todo, una vez me llevo a la dirección porque la tinta de mi pluma se había derramado y manché su manos

-¿que le pasa a usted? ¿Que no tiene modales? ¿No sabe que es una dama y no un chico? Valla a jugar con las niñas ahora mismo- dijo con voz seria.

-si miss- volte a ver a Marco y le hice una señal con la cabeza para que viniera conmigo, el salió del juego y corrió hacia mi, tomó mi mano y nos dirigimos al otro lado del patio donde estaban las casa de plástico, vi a un par de chicas que estaban en mi salón
-¿podemos jugar?- preguntó Marco, que aún sostenía mi mano -miren lo que tenemos aquí chicas, la machorra y el afeminado- dijo Mía. Marco apretó un poco mi mano en señal de protección y me dio un besito en el cachete, susurro en mi oído -deberíamos irnos- voltee atrás y vi a la miss sonriendo, miré a las chicas y pregunté de nuevo -¿podemos jugar?- una chica se acerco a Mía y le susurró algo en el oído después de eso nos dijo -si- se volteo y nos acercamos a ellas   -estamos jugando a las princesas- la misma chica (que creo iba en un año menor a nosotros) se acercó a Mía con una espada y una corona, le entregó las cosas a Mía, ella le puso la corona a Marco y a mi me dio la espada, miré a mi mejor amigo y vi como apretaba su puño, puse mi mano en su hombro para calmarlo, de repente salieron unas lagrimas de sus ojos
-ayyyy miren, la niña quiere llorar- dijo Mía.
Marco limpio sus ojos y salió corriendo, me quedé mirando con enojo a Mía por lo que le había hecho a mi mejor amigo -que te pasa ¿quieres besarme?- dijo con voz burlona, sonreí algo molesta y me acerqué a ella, le di un piquito en los labios -¡aaaaaa! ¿¡Que te pasa?! MISS- entonces voltee y vi a la miss caminando rápidamente hacia mi, cuando llegó dijo -¿QUE TE PASA? ¿COMO TE ATREVES?- intenté acercarme para explicarle lo que había pasado -ALÉJATE MALDITA LESBIANA- no entendí lo que significaba "lesbiana", puse cara de confusión -VETE A LA DIRECCIÓN Y NO TOQUES A NADIE MIENTRAS VAS HASIA ALLÁ- me quedé mirándola, no podía cree lo que me estaba diciendo -AHORA- me di vuelta.

Corrí buscando a Marco, cuando lo encontré debajo de un árbol con la corona en las manos me acerqué a el y me senté a su lado -¿viste...?- pregunté al no saber si había alcanzado a ver o escuchar los gritos de la miss -si, creo que todos se dieron cuenta- dijo el jugando con la corona en sus dedos y mirándola con un gesto triste -Marco- intenté llamar su atención -¿si?- dijo el sin dejar de ver la corona -¿Que es una lesbiana?- por fin levanto la mirada de la corona y me miró
-¿no sabes?- preguntó un poco confundido -no- contesté
-es una chica a la que le gustan las chicas- en ese momento me sonrojé -¿co-como lo sabes?- pregunté sin saber porque me había puesto nerviosa -mi mamá hablo conmigo de eso porque...- limpió unas lágrimas que salían de sus ojos -porque soy gay- termino de decir -eso quieres decir que...-
-que te gustan los chicos- le sonreí -lo sabía- el me sonrío y recargó si cabeza en mi hombro -lo sé desde pequeño- dijo -lo sé- le conteste y tomé su mano, me moví un poco y tome la corona de sus manos, la puse sobre su cabello café claro, el me sonrío y me abrazó -te amo- le susurré -yo a ti- nos quedamos unos segundos así -Marco- dije en voz baja -¿si?- me miró -creo que me gustan las chicas- hable en voz baja- el sonrío y hablo en voz baja -lo sabía- tomo mi mano.

-¿QUE TE DIJE? ¿DONDE TE DIJE QUE FUERAS?- gritó la miss haciéndonos saltar del susto, Marco apretó un poco mi mano, dije "tranquilo" solo moviendo los labios -tu mamá ya está en la dirección, ve a la sala de espera- asentí, dirigió su mirada a Marco -y tu quítate eso- dijo de manera agresiva quitando la corona de su cabeza, se fue y nos levantamos para ir a la sala de espera de la dirección, Marco tomando mi mano y se sentó con la cabeza recargada en mi hombro.

Después de unos minutos mi mamá salió de la dirección, Marco se acomodo en la silla igual que yo y tomo mi mano -no voy a dejar que nada te pase- dijo en voz baja mirándome, mi mamá se dio cuenta, tomo una respiración y se acerco a nosotros, me abrazo y sonrío -yo tampoco dejaré que nada te pase- despeinó el cabello castaño de Marco, el sonrío -Tu mamá me pidió que te recogiera a ti también, muchacho- miró a Marco -¿que tal si nos vamos chicos?- dijo mi mamá, nos levantamos, íbamos camino a la salida de la escuela cuando la maestra nos detuvo -¡Como puede dejar que su hija sea así y como puede dejar que se junte con ese chico, usted sabe bien lo que son!- gritó a nuestras espaldas, haciendo que todos volteamos a mirarla -no, en realidad no sé como son, ¿me puede decir?- dijo mi mamá algo molesta
-¡homosexuales!- gritó la maestra con furia, Marco pasó su brazo sobre mi hombro para abrazarme de forma protectora.

Mi mamá comenzó a reír -¿Y si lo son que? Aún así siempre serán mis dos chicos, mis chicos especiales, los niños que más quiero- Marco y yo sonreímos, mi mamá volteo a vernos y sonrío
-Vámonos chicos- Marco dejó de abrazarme para tomar mi mano y salir de la escuela donde vimos un puesto de juguetes, los dos fuimos a ver, Marco se quedó mirando un par de coronas, una de príncipe y una de princesa -¿quieren esas chicos?- preguntó mi mamá sacando su billetera -si- dijimos ambos, tomamos la bolsa y nos dirigimos a la camioneta.

Abrí la bolsa donde estaban las coronas mientras mi mamá buscaba sus lentes para manejar
-hey- le dije a Marco, poniendo en su hermoso cabello castaño la tiara de princesa, el sonrío -ahora sí eres mi príncipe- dije sonriéndole, el tomo la corona de príncipe y la puso en mi cabello -y tu siempre serás mi princesa de ojos verdes- lo abracé y me di cuenta de que mi mamá nos estaba viendo con una sonrisa -y ustedes siempre serán mis chicos consentidos- se volteo y arrancó el coche.

Fin del flashback

Lauren pov.

-Y así fue como salí del closet- dijo Emily con una sonrisa en su rostro

-es la historia más linda que e escuchado- dije sinceramente
-naaaa hay mejores- dijo aún con la sonrisa en su rostro
-¿aún ves a Marco?- le pregunté ya que hablaba de él como si fuera su hermano mayor al cual quería con todo el corazón
-si, todos los días, el es como mi hermano mayor- dijo lo que estaba pensando -solo que no pudo venir porque está trabajando en una tienda de ropa y pues, prefirió más el dinero que a mi- reímos

-bueno, me toca preguntar- dijo Emily

Enamorada de... ¡una chica!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora