Sangre joven: El comienzo de una nueva era.

Capítulo 16. tuve sueños

ANAIRAM

Nunca quise esto. El pensar que Sofhia estaba involucrada en este asunto de algún modo, me revolvía el estomago. Si siempre lo supo, ¿Por qué no me lo dijo?, solo se lo cayo y ya, cosa que veo muy injusta. Tenia el completo derecho de saber que pasaba en mi vida y cual seria mi supuesto destino.

Por esa misma razón, Luna me había dicho que confiara plenamente en ellos, incluyendo a Sofhi, aunque ya no se si confiar sea lo adecuado, me traiciono con solo ocultar algo tan importante.

Ahora todo cobraba sentido.
°Los ojos rojos y amarillos
°La fuerza sobrenatural
°El miedo de sofhia al hablarme del tema
°La discusión que tuvieron anteriormente

¡Todo el mundo lo sabia, menos yo!. ¿Era justo?, pues no, no lo era. A la afectaría seria a mi, la que le caería el balde de agua fría era a mi, no ha ellos.

Mire a Sofhia con los ojos cristalizados.

Siempre pensé que me hablaba con la verdad, pero ya veo y entendí que no tenia que confiar en nadie. Se que sueno injusta, ¿pero qué puedo hacer?.

Sofhia me miraba como si ella fuera la víctima, cosa que no era así.

Solloze y comencé a negar rápidamente. Mi mejor amiga me miraba dolida, ¿pero qué podría esperar?, ¿una felicitación de mi parte?, si así era, pues se quedaría sentada esperándolo

—¿Por qué? —susurré—¿Por qué me mentiste?— Pequeñas palabras, grandes significados.

Se le veía a leguas que no sabia como comenzar a decir torpes excusas, no encontraba palabras adecuadas para cubrirse la espalda y no entendía el por qué.

Aunque no quitemos el hecho de que, nunca le dije sobre mi sueño, aquel que tuve con mi supuesta madre y tampoco pude informarle sobre el que tuve una semana atrás.

Ella pensaría que no estoy al tanto de la situación cosa que es verdad, solo se pequeñas cosas, como por ejemplo.

°Soy una princesa
°Mi madre es la reina
°Muchos seres quieren hacerme daño
°Cambiare, y no se si para bien o para mal
°Detendré una guerra
°Hay muchos seres oscuros en un mundo de simples mortales

Sabia solo las cosas básicas y aun tenia piezas del rompecabezas que armar. Tenía el juego por así decirlo, pero no el pleno conocimiento para ganar y mucho menos una treta para lograrlo fácilmente. Tenia que tener las indicaciones en la mano y no las encontraba, ¿Qué hacer?.

Sofhia era de esas jóvenes que no le costaba decir la verdad, ¿Por qué no pudo hacerlo conmigo y con otras si?, que fuera su mejor amiga me daba el pleno derecho de saber cualquier asunto que me incumba, pero ella no lo veía así.

Se que pudo haberlo hecho en forma de protección y todo lo que conlleva, ¿Pero ocultarme que seria una princesa codiciada por millones de seres desconocidos para mi?, tenia sentido si, pero no quita el hecho de que me sienta destruida y engañada por la persona que pensé que nunca me defraudaría.

Mi mejor amiga me miraba con arrepentimiento. Tenia los  ojos caídos y el labio inferior temblando.

Suspire pesadamente mientras me secaba algunas lágrimas traicioneras, y me preparé psicológicamente para decirle todo lo que se, y después escuchar sus excusas para echarla de mi habitación.

—Sofhia— me miró con ojos cristalizados, pero aparte mi mirada. No quería caer en sus enredos, no se lo merecía y yo tampoco — S-se cosas — subí unos segundos mi vista hasta sus ojos y los encontré plenamente confundidos, por lo que aclaré — Se que soy la princesa que gobernará el reino oscuro — Sus ojos como platos me miraron con asombro y comenzó a negar rápidamente.

Los chicos, que ya sabia se encontraban detrás de la puerta, entraron de sopetón y me miraron sorprendidos. Seguramente ellos no esperaban que supiera esto, y los entiendo, yo tampoco esperé tener sueños con una mujer que se dice ser mi madre, pero uniendo alguna piezas, todo concordaba para apoyar dicha teoría

—¿Cómo sabes eso?— él primero en romper el silencio fue Humter. Lo dijo con tono sorprendido.

—Tuve sueños — respondí cortante. La situación no era nada agradable y menos para mi— ¿Sueños?, ¿Cuales sueños?, ¿y por qué no dijiste nada?— Humter preguntó de sopetón, cosa que hizo que todos lo que se encontraban en esta habitación, le miraramos mal. Él en defensa se alejó dos pasos, cosa que me causo gracia pero lo pase por alto. No era un buen momento para reír.

—Digamos que Luna se comunicó conmigo para informarme de lo que pasaba— Suspire— Mi primer sueño fue el día en que Humter me acorraló en el instituto — mire a Humter de reojo, pude notar como se sonrojaba — él segundo fue cuando Harry me desmayo — mire al nombrado y podía notar en sus ojos como pedía disculpas. No le preste mucha importancia y me fije en sofhia

—¿Estas hablando de la Reina Luna?, ¿Tu madre?— asenti con una mueca, todavía no me agradaba el hecho de saber que tuve una madre.

Aunque pensándolo bien, ¿Por qué Luna me abandono en aquel "orfanato"?. ¿Cual era el motivo?

Tantas preguntas, cortas respuestas.

Escuche un suspiro en el aire e inmediatamente dirigí mi mirada a Harry. Arrugue el ceño pero nadie lo noto. Todos estaban en su mundo y no los culpaba.

Se que, ser princesa seria un gran trabajo, ¿pero de verdad quería serlo? Aunque no podría hacerme esa pregunta. Si o si debía convertirme en princesa, al fin y al cabo era mi destino <<no deseado por cierto>>

Reinar sonaba de lo peor. Nunca me gustó ser el centro de atención, en ningún lugar y ahora con solo pensar que todo un mundo desconocido me tendría que ver y alagar sentía miedo, miedo al fracaso, miedo a no lograr lo que muchos deseen, en pocas palabras, miedo a ser una falla.

Recordé el último sueño que tuve con Luna, era curioso que no se presentará, aunque cabe mencionar que, podría estar estresada y por eso me mando a sus gorilas a buscarme. Aparte, ella sabia que me negaría a ir, y con eso me mando un espejo...un momento, ¿Dónde deje el espejo?, se supone que yo lo tenia, lo guarde dentro de mi blusa, ¿Pero dónde ésta?

Me levante de un brinco de la cama y comencé a buscarlo. Si de verdad este mundo existe, entonces Luna debió dejarme el espejo, de algún modo sentí que ya me pertenecía y ella lo sabia.

Busque bajo la cama y por el suelo, pero en plena búsqueda; alguien me detuvo preguntando — ¿Qué buscas Anairam? — Harry hablo pausadamente, seguramente temiendo que le salga con alguna mala palabra.

—U-un espejo de mano— respondí secamente y seguí con mi búsqueda.

Sentí unos pasos moverse por la habitación pero no les pare. Me levante del suelo y cuando iba s buscar en la mesita de noche, alguien me detuvo.

—¿Esto es lo que buscas?— me voltee rápidamente para encontrarme a un Harry nervioso y con un espejo en la mano

¡El espejo!

Sonreí y me moví rápido para tomarlo. Era hermoso, un color brillante y sin ninguna pedrería. —No me digas que ese espejo es— Humter fue cortado por sofhia — Es el espejo que conforma las tres reliquias de la oscuridad — levante mi vista para encontrarme a todos perplejos. Arrugue mi ceño sin entender nada, ¿Las tres reliquias?, ¿Qué es eso?